me miras perdiendo el control de tus fluidos, en ti no llueve desde arriba empieza a llover desde abajo y me dices que me deseas con esa lluvia que me da toda autoridad sobre tu cuerpo.
Tu pelo como cascada que cubre mi vista al cegar mis ojos pero abriendo el olfato y oliendo a cielo. Estoy detrás de ti, me gusta el aroma de tu pelo, tratando de fluir en el manantial de tus curvas y dejándome llevar en esas siluetas que tu cuerpo me muestra aún estando tan quieto.
Mi imaginación se a despegado de la Tierra, eres una Diosa, quizás mi imaginación voló a tu ciudad natal y sigo bajando. No puedo evitar tocar esa montaña que me detuvo cuando iba en bajada pero seguiré bajando, quiero recorrerlo todo.
Estoy en la parte baja de tu cuerpo pero cada vez me siento mas arriba.
Tus muslos suaves como el terciopelo y continuo besando tus piernas, besaré también las plantas de tus pies para que en mis labios dejes huellas. Sabes que en todo aspecto estoy a tus pies pero tu mirada no es de superioridad o de control, esa sumisa y fija mirada, quieres que vuelva arriba, vuelvo arriba y el siguiente nivel de contacto inicia con algunos besos.
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Una noche con su cuerpo
PoesíaSolemos admirar la belleza femenina en todos sus aspectos , catalogarla como Diosas , fieras , únicas y de muchas más maneras unas morbosas otras educadas y adecuadas. Todos hemos tenido fantasías con esas chicas de faldas cortas y de lindo escote...