Babysitters: Counterattack - EXO

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POV AUTOR

Sus ojos estaban ligeramente hinchados intentó abrirlo pero le era incomodo, podía sentir el canto armonioso de los pájaros pasar por la ventana, Tao tomó unos segundos para parar sus pensares, con mucha paciencia y tranquilidad abrió sus párpados, aun se sentía cansado, sabia que era muy temprano ya que la alarma aun no había sonado, y el sol apenas se podía percibir sobre la habitación, apenas con suerte había logrado dormir 5 hs, y sus ojeras se notarían mas que nunca, aunque ahora se sentía más tranquilo, había llorado toda la noche, se había desahogado por completo, y ahora se sentía con más energía que de costumbre, con mucha pesadez se levantó de la cama, ahora sabia que tenia a un mini-panda dentro suyo, y aunque dolía su bebé solo contaba con él, la idea de "formar" una familia se había desvanecido por completo junto a las lágrimas, pero como dicen, a mal tiempo buena cara, y ahora más que nunca tenia que sonreír, dentro suyo tenia a un ser pequeño que dependían por completo de él y su amor, aun le ansiaba el genero de su bebé, Tao anhelaba a una niña, quería compartir muchas cosas con ella, ya que ser un doncel no era muy diferente a una mujer con sola la diferencia de que no se debía preocupar sobre los días menstruales, le aterraba la idea que su bebé naciera como el un doncel, no quería que su panda sufriese la discriminación de la sociedad sobre ellos, no quería que lo menos preciaran , una mujer era diferente, tenia derechos pero los donceles no contaban con mucha ayuda, y era muy raro encontrarse con donceles en un mismo lugar, agradecía por completo que su madre fuese parte de las Wonder mom's, si no fuese por ello era muy seguro que no tendría a sus amigos.

Sin vacilar se metió a la ducha, el agua haría milagros en su piel, quitaría la suciedad y borraría sus marcas de lágrimas, Tao se aseguró de tallar cada parte de su cuerpo, quería sentir renovado, lavó su cabello muy cuidadosamente, su cuerpo con jabón. Dejó que el agua actuara por si solo, se dejó llevar por el liquido que recorría su cuerpo, cerró sus ojos así sentirse más relajado, abrió lentamente los párpados y observó su plano vientre, lo acaricio con una sonrisa.

— Empecemos de nuevo — musitó suavemente, cerró el agua de la llave, se colocó una bata, y secó su cabello, se detuvo en el espejo, se observó, de las meditas saco un estuche mediado, sacó su maquillaje, y con mucho cuidado lo comenzó a aplicar en su rostro, así cubriendo sus ojeras.

Cuando por fin cubrió las marcas de la trasnoche, salió del baño, buscó su uniforme, se sentía extraño ponérselo, luego en unos meses no tendría que usarlo más, y quizás no iría más al instituto, soltó un bufido, una vez listo cogió su chaleco y mochila, comenzó a bajar las escaleras pero todo acto de detuvo al sentir un pequeño mareo, Tao se sujetó del barandal — Mierda — bisbiseó mientras se sujetaba la cabeza, sus síntomas poco a poco se irían notando, en un embarazo normal eso no sucedía dentro de unos días, pero su embarazo de por si no era algo normal, en los donceles en el embarazo era más delicado, y muy riesgoso, comparado con el de las mujeres. Tao cerró sus ojos para poder calmar el mareo, pero abrió los ojos al sentir una mano sobre su hombro, giró su rostro, y ahí estaba él, con su semblante frío.

— ¿Te encuentras bien? — preguntó Kris, Tao lo observó, siempre tan fresco, sin pensarlo, quitó la mano de aquel con brusquedad.

— No me toques — fue lo único que pudo decir con sequedad, Kris sonrió.