El día esperado de nuestras vidas: ¿una muestra de amor?

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¡¡OMG, maadre mía, 5 días sin actualizar!! ¿Pero qué es esto, cómo me lo permito? Esto no es muy propio de mí... Pido disculpas a todos, no tengo tiempo para actualizar en 2 o 3 días. Es que salgo tarde del insti y, entre que llego a mi casa, hago mis cosas y deberes, se me acaba el tiempo y solamente me da para descansar 20 minutos en el sofá, cuando necesito horas y horas para escribir una. Ayer iba a poner la conti, pero son las fiestas y fui allí, así que no pude escribir. Hoy que es sábado, ya me dejan tranquila y puedo por fin ponerla y, mañana, tal vez (aunque es lo más seguro) que ponga otra más, ya que el lunes no tengo insti. Aviso de antemano, me queda por escribir 1 capítulo más, el final, que lo pondré el sábado que viene... También debo decir, que este capítulo va a ser más largo que la anterior, por lo que voy a tardar bastante en escribirla. ATENCIÓN: ¡Llegó el momento LEMON! Sí, my friends, habéis visto bien. A quien no le guste, que no lo lea, no soy responsable de nada, pero viene más o menos por el final. Eso sí, es un lemon de suave medida, no es nada exagerado, pero para gustos, los colores. Bueno, aquí va la conti ^^:

Pov Shiho

¡¡PI PI PI... PI PI PI...!!

Un molesto, incordioso y estruendoso sonido perturba el silencio del ambiente, logrando que me sobresalte. La peor "melodía" que puedes escuchar: la maldita alarma del despertador. Ese sonido que te saca de quicio, pensando en que ha llegado la hora de levantarse y empezar un nuevo día, volviendo a tu rutina diaria. Ese sonido que hace que vuelvas a la realidad, saliendo de tu estado de semiconsciencia por lo que estés pensando o haciendo, aunque hayas perdido la noción del tiempo. Sigo recostada porque soy muy vaga para levantarme y alcanzo mi mano hacia el botón, en un intento en vano de apagarlo. Soy tan torpe que lo tiro sin querer y lo rompo, haciéndose añicos por el suelo. Otra tarea más por hacer, qué pereza. Me acurruco y me tapo hasta la cabeza con las sábanas recién limpiadas y lavadas de ayer porque estamos en principios de verano y los rayos radiantes que desprende el sol me ciegan completamente, incapaz de poder abrir los ojos. Pienso en qué día es hoy cuando me doy cuenta de algo. Me destapo y me repongo rápidamente, abriendo los ojos de par en par, pero la luz se infiltra por las persianas y lo perciben mis ojos, por lo que me restriego las manos por ellos hasta acostumbrarme a aquel ambiente de por la mañana.

Shiho: ¿Cómo he podido olvidarlo? ¡Mañana me caso, el día más importante de mi vida y con el hombre que amo con locura! Hasta tengo los días contados, literalmente...-resoplé por mi estupidez. Probablemente, en este mismo momento, sea la más idiota y olvidadiza de este país-además, me prometí a mí misma que debía de hacer una visita a alguien muy importante para mí antes de mañana...-me recordé a mí misma.

Me senté en el borde de la cama y me apoyé con las manos en el filo de ella. Soy tan descuidada que, al levantarme, no me di cuenta de los trozos de cristal del despertador que se habían caído al romperse y pisé uno de ellos, produciéndome un pequeño corte en el dedo pulgar del pie. Tal vez me haya levantado con el pie izquierdo porque normalmente no suelo tener tan mala suerte, aunque me olvido de ello porque mañana obtendré la recompensa que siempre he esperado con tanto anhelo, y que me propuso Shinichi hace 3 años: el comienzo de una vida juntos. Sí, ha pasado 3 años desde aquel maravilloso día. Desde entonces, hemos estado de noviazgo todo este tiempo y mañana, comenzaríamos una nueva etapa y totalmente desconocida por nosotros porque no la hemos vivido todavía. La siguiente, sería crear una familia y después, envejecer juntos, sin separarnos, aunque todavía queda un gran camino por delante. Mejor, tiempo al tiempo. Hay que vivir el presente sin saber qué nos deparará el futuro. Bueno, ahora, será mejor que me deje de tanto pensar y ponerme manos a la obra en las tareas que debo cumplir. A pesar de darme pereza hacerlo, lo tengo que hacer porque cuando me case, debo de cumplir con las tareas domésticas.

Nunca dejaré que te separen de mi ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora