¿Pareja nosotros? y... ¿una alumna nueva?

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7 años más tarde...

Era una hermosa mañana, el sol empezaba a salir, iluminando todo Tokio. En una mansión situada en Beika st, un chico de unos 14 años, cabello negro y ojos azul cobalto que harían que hasta la chica más hermosa cayera a sus pies con su mirada irresistible, había salido del baño y se había atado una toalla alrededor de su cintura mostrando sus músculos bien definidos debido al entrenamiento del club de fútbol de su escuela media, después de todo, era el capitán. Mientras prepara su desayuno, suena el timbre.

DING DONG

Shinichi: A juzgar por la hora, debe de ser Shiho para ir juntos a la escuela-dedujo.

Dejó la sartén puesta y se fue por el pasillo para abrir la puerta, sin darse cuenta de que todavía no se había puesto el uniforme.

Shiho: Buenos...-se fijó en cómo iba Shinichi, medio desnudo y aprovechó para ver sus brazos y su torso musculoso-al menos te podrías poner la camisa antes de abrir y ver quién es, ¿no?-entró por la puerta, sonrojada, apartando la vista de su cuerpo y sin esperar la invitación suya para entrar.

Shinichi: Buenos días a ti también-dijo poniendo los ojos-supuse que eras tú, además no me ha dado tiempo, acabo de salir de la ducha...-respondió.

Shiho: Eso no me vale como excusa, igualmente soy una chica, a pesar de que nos conozcamos desde pequeños...por cierto, ¿qué es ese olor a quemado, acaso te has dejado el secador encendido?-preguntó divertida.

Shinichi: ¡Oh no, es el desayuno!-exclamó.

Fue a apagar el fuego y se fijó en que sus huevos se habían chamuscado.

Shiho: Realmente eres pésimo cocinando, no se como has sobrevivido estos años sin tu madre-suspiró frustrada-anda, déjalo, ya te preparo yo algo rápido antes de que lleguemos tarde por tu culpa. Tú mientras ponte la ropa.

Se puso el delantal por encima de su uniforme y comenzó a preparar un jugo de naranja, huevos revueltos y un par de salchichas. Mientras, Shinichi que ya se había puesto los pantalones y se estaba abrochando la camisa, la observó con admiración, pensando en que sería una buena esposa en el futuro, a lo que se sonrojó.

Shinichi: ¿Pero en qué estoy pensando?, ella es solo mi amiga de la infancia, nada más...-se dijo a sí mismo-la verdad es que debo admitir que es buena en las tareas domésticas y es muy guapa...

Shiho: ¡Shin-i-chi!-se sobresaltó el chico-¿en qué diablos estás pensando?, te llevo llamando por 5 minutos, se te va a enfriar el desayuno. Encima de que te lo hago-replicó enfadada, dejando el delantal y dirigiéndose a la puerta.

Terminó rápidamente el desayuno, se puso la chaqueta encima del uniforme, cogió la mochila, cerró la puerta y la alcanzó. Caminaron juntos como siempre lo habían hecho, desde los 7 años. Desde pequeños eran como uña y carne. Todavía se acuerdan de la promesa de ser buenos amigos y se cumplió. No había nadie que los separase... o eso pensaban.

Finalmente llegaron al instituto, cruzaron la puerta de su clase y todo el mundo, como siempre, empezó a aplaudir y a silbar. Mientras, las chicas curioseaban y cuchicheaban.

Chico 1: Fiu fiiiiu, ¡ey parejita!, ¿habéis tenido alguna discusión matrimonial?-preguntó entre risas.

Shinichi y Shiho: ¿Pareja nosotros?-se miran tímidamente por un segundo y se voltean sonrojados-¿qué os hace pensar eso?-dicen ambos.

Chico 2: Pues que siempre venís juntitos, no hay quien os separe y decís que no sois novios ni nada por el estilo.. Y nosotros vamos y nos chupamos un dedo, ¡ja!-replicó.

Shinichi: Idiotas, es que no somos novios, ¿cuántas veces os lo tengo que decir?-dijo claramente molesto y ruborizado.

Shiho: Vamos...déjalo Shinichi, no tienen remedio, son unos imbéciles sin cerebro-comentó revolviendo los ojos.

De pronto, aparece y entra el profesor, interrumpiéndoles.

Pr.Fukiyama: Alumnos, siéntense-todos le obedecen-bien, antes de comenzar, vamos a presentar a una estudiante transferida de América-se voltea hacia la puerta-pase, por favor.

En un momento, todos los chicos se quedan callados y observan como la nueva chica camina elegantemente y despacio, con un aura misterioso, hasta llegar al lado del profesor.

Ran: Me llamo Mouri Ran y... espero hacer buenos amigos-dijo con una sonrisa, mirando hacia Shinichi con determinación.

Shiho: ¿Por qué... por qué tengo esta extraña sensación de nuevo?-pensó, mirando a Mouri, atemorizada por esa simple idea. 

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¡Eeey! ¿Qué tal?, espero que muy bien...

Estos días no voy a publicar nada porque me voy de vacaciones y no me puedo llevar el portátil, pero no os preocupéis, que actualizaré el lunes o el martes, ya veré. Esta vez no me enrollaré como otras veces (lo sé, soy muy pesada -_-), así que... ¡adiós y disfrutad de la lectura! ^_^

Nunca dejaré que te separen de mi ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora