Capítulo 5: Vamos De Compras

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Hace una tarde estupenda, no he podido resistirme a salir al jardín para hacer lo deberes. De todas formas creo que necesitaba un poco de aire fresco. Me pregunto como estarán las cosas por casa. Hablé con mi madre hace dos días, puede que sea un poco exagerada pero siento como si se hubieran olvidado de mí. Deja de pensar en eso... No estás sola, está Rouge, Blaze, Silver, el idiota de Sonic, Cream... Cream. Acabo de recordar que metí sus colores en mi mochila con intención de ir a devolverselas más tarde, pero se me ha olvidado. Iré mañana, ya es muy tarde. Estoy a punto de meterlas de nuevo en la maleta cuando se me ocurre algo. Solo quiero relajarme, olvidarme un rato de todo, no tiene nada de malo, ¿no?

Sonic: ¿Qué estás dibujando?

Yo: ¿C-cuanto rato llevas ahí?

Sonic: Unos minutos. ¿Es el árbol de ahí? Parece una foto.

Yo: ¿y a tí que te importa?

Lleva puesto el pijama puesto y las púas las tiene húmedas, parece que acaba de salir de la ducha. No llevaba puestos los guantes así que puedo ver con claridad unas heridas en sus nudillos.

Yo: ¿Qué te ha pasado?

Sonic: ¿De que hablas?

Yo: Tus manos...

Sonic: Ah, eso. Bueno, el otro día descubrí por qué los boxeadores llevan guantes.

Esto es culpa mía, fue cuando peleó por mí para salvarme de esos matones, estoy segura.

Yo: Déjame curarte.

Sonic: ¿eeh?

Yo: Vamos, se va a poner peor si no te lo vendas.

Había un gran maletín de primeros auxilios en el baño de abajo. Al abrirlo me doy cuenta de que las gasas, los esparadrapos, el alcohol y otros desinfectantes estaban casi gastados. ¿Qué pasa, es que aquí tienen accidentes todos lo días?

Yo: No creas que lo hago porque quiero, sino porque estás así por mi culpa.

Sonic: Lo que tu digas.

Que infantil es, gira la cabeza para no mirarme a la cara y comienzo a vendar su mano con desprecio. En unas de las veces le aprieto más sin querer y se queja. Vuelve a girar la cabeza bruscamente y cuando pienso que está a punto de abrir la boca para meterse conmigo, se que queda en silencio, mirándome a los ojos. Sin darme cuenta yo también estaba haciendo lo mismo y es que era normal que te ipnotizaran esos enormes ojos verdes. Mi corazón se acelera al darme cuenta que estamos cogidos de la mano ¿Qué estoy haciendo? Me pongo en pie y me voy sin decir nada porque en realidad no tenía nada que decirle.
Después de cenar subo a mi habitación y preparo la maleta para mañana. No encuentro el dibujo del árbol que hice en el jardín, juraría que lo guardé aquí. Da igual, solo es un dibujo.
Miro mi móvil y veo que tengo una llamada perdida de mi madre y unos cuantos mensajes de mis amigas de tipo "como te va" y "te echamos de menos" Estos últimos días han sido tan ajetreados que no he tenido tiempo en pensar en mis amigas así que decido meterme en Facebook. Tengo más de 50 notificaciones, normal después de apenas haber cogido el móvil en tres días. Paso de mirar las notificaciones ahora, estoy demasiado cansada. Voy directamente a mirar las fotos que tengo con mis amigas, Marine y Honey. Hecho de menos ir de compras con ellas, mañana es sábado, igual puedo ir con Rouge.
A la mañana siguiente me levanto bastante tarde, a sido una semana dura emocionalmente y lo necesitaba. Abajo estaban Silver y Tails viendo la tele. Shadow siempre esta fuera de casa y Blaze no suele salir de su habitación y no sé dónde está Sonic. Prefiero no preguntar. La nevera está vacía, solo queda un poco de zumo caducado, un bote de ketchup y una manzana. Obviamente elijo la manzana para desayunar. Cuando Rouge se levanta le pregunto si quiere ir al centro comercial y acepta. También le preguntamos a Blaze si quiere venir pero no nos hizo mucho caso. Pienso que Blaze en el fondo debe de ser una buena amiga, tan solo si confiara un poco en los demás...

Rouge: ¡Mira cuantas joyas! ¿Os queréis venir con mamá?

Yo: Rouge estás empezando a darme vergüenza ajena.

Rouge: No me digas que no son bonitas.

Yo: Si, pero llevamos como quince minutos paradas aquí en el escaparate.

Rouge: Tienes razón, debería entrar.

Esta Rouge tiene una gran obsesión con las joyas, no se qué le ve. Solo son piedras, aunque estoy segura que me pegaría si me oyera decir eso.

Yo: Oye, Rouge, he visto un vestido que me gustaba en una revista ¿te importa si voy un momento a probarmelo?

Rouge: No te preocupes, yo estaré aquí.

Voy a la tienda pero no encuentro el vestido de mi talla. Al pasar por en frente del supermercado consigo ver a Sonic dentro llevando un carrito de la compra.

Yo: ¿Qué, comprando?

Sonic: ¿Umm? Si, esta semana me tocaba a mí. ¿Y tu que haces aquí?

Yo: He venido de compras con Rouge.

Sonic: ¿y Rouge lo sabe?

Yo: No me trates como si estuviera loca.

Sonic: ajajaja

Yo: Sigue riéndote de mí. Pensaba ayudarte, pero ahora vas a hacer la compra tu solo.

Sonic: Vale, vale. No me burlaré de ti, boba.

Me pasa la lista de la compra. Esta no era su letra, parecía la de Blaze, no sé por qué me sorprende, ella es la que controla la economía en casa. Nos separamos para encontrar las cosas más rápido. Cojo unas latas de refresco, leche, pan para hamburguesas y cereales. Llego al pasillo de las patatas fritas y recuerdo que en la lista también decía que compraramos un paquete. Por desgracia estaban en la estantería de arriba del todo y no la alcanzaba ni aunque me pusiera de puntillas. De pronto noto como alguien me agarra de la cintura y me levanta.

Sonic: ¿A qué esperas? cogelo.

Acabo haciendo lo que me dice y me deja en le suelo. Tardo unos segundos en reaccionar.

Yo: ¿¡A qué ha venido eso?! Podrías haber cogido el paquete tú.

Sonic: Si hubiera echo eso me dirías que no necesitabas mi ayuda. Ya has conseguido el paquete ¿no? Pues ya está.

¿Pero qué se ha creído? No soy una niña mimada. No puedo creer que eso es lo que piense de mí. Ya está bien, voy a demostrarle de una vez por todas que se equivoca.
Me dirijo a él con pasos firmes y le quito la lista de las manos. La doblo por la mitad y la parto en dos pedazos.

Sonic: ¿Qué haces?

Yo: Muy bien, tu seras rápido pero a mi se me dan bien las compras. Así que gane el mejor.

Sonic: Entiendo a donde quieres llegar.

Yo: No te oigo, te toma la delantera.

Atrapo una caja de galletas y salgo disparada hacia la sección de congelados. Tras coger lo que ponía en mi trozo de lista me doy la vuelta y observo que Sonic ya lleva la casi la mitad de su lista. Se mueve demasiado rápido pero no pienso quedarme atrás. Saco un carrito de la compra, me impulso y me subo a él como si fuera un monopatín. Sonic me mira sorprendido. Apuesto a que no se esperaba verme así alcanzo varias cosas de la estantería de chucherías lo que me hace ganarle mucha ventaja a Sonic. Agarro un paquete de harina que es lo que me faltaba de mi lista y me dirijo a gran velocidad hacia la caja, pero hay un problema. ¿¡Cómo demonios voy a parar esta cosa?! Al subir la mirada me encuentro con Sonic delante de la caja con los brazos entendidos. Un momento ¿en serio estaba pensando en parar el carrito a esta velocidad?
Espera, lo ha conseguido, estoy a salvo. Me siento genial...pot unos segundos. Al mirar atrás me doy cuenta de que todo lo que había en el carro había salido volando en el impacto.

Yo: Bueno... ¿lo dejamos en empate?

Sonamy, Compañeros De PisoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora