Intento recobrar el sueño después de todo lo que había estudiado pero no podía. Estaba preocupada, preocupada por Lauren, desde que me encerró en el armario del conserje que no la veía.
Me canso de llamarla y dejo mi teléfono en la mesa de noche. No estaba segura de a quien llamar, ya había llamado a Cynthia pero tampoco contestaba. Esto era muy confuso.
De pronto alguien se me viene a la mente... Lucy.
Marco su número, pero no contesta. Marco una vez más y escucho el pitido del teléfono que indica que ya ha contestado.
"¿Hola?" grita. Escucho música muy fuerte de fondo, debe estar divirtiéndose creo. "Espera" unos segundos más tarde la música es casi inaudible.
"Lucy, Hola" le digo.
"Hey ¿como estas?" dice, con un tono alegre. "¿Donde vienes?" me dice. Frunzo el ceño aunque ella no pueda verme.
"¿Qué?" pregunto confundida.
"¿Que?, ¿acaso no vendrás?" pregunta.
"¿Ir donde?" pregunto de vuelta. Hay un silencio del otro lado. "¿Lucy, sabes donde rayos está Lauren?" pregunto.
"Está aquí" dice. "¿Camila, acaso no lo sabías? Creí que Lauren había ido ayer a decirte" dice.
"¿Decirme qué?" digo.
"Estamos en su fiesta de cumpleaños, Camila. Ella dijo que te diría sobre esto..." dice. ¡Mierda, mierda y más mierda!. "No te lo dijo, ¿verdad? ¡Dios, por que hizo eso!" exclama enojada.
"Ella me lo iba a decir, Lucy. Pero yo no la dejé" susurro.
"Pero, ¿por qué hiciste eso?" dice.
"Larga historia" digo.
"Bueno... ¿vendrás?" dice.
Niego con la cabeza de inmediato aunque estaba bastante consiente de que ella no podía mirarme. ¿Por qué iría?, ¿con qué cara miraría a Lauren ahora? Es imposible ir al cumpleaños de tu novia sintiéndote extremadamente culpable. Es estúpido e innecesario.
Pero tengo que ir.
"Si" respondo
"Ok, te pasaré a buscar" dice. Asiento conforme y corto la llamada.
Rápidamente me visto, me peino, tomo mi celular y salgo de los dormitorios. A esta hora ya no podíamos salir, pero ¿que más da? Si no me pillan nada puede impedirme que vaya.
Lucy ya estaba fuera de los dormitorios esperando en el auto de Cynthia, creo. Así que le sonrío y subo rápidamente.
"¿No estás borracha, verdad?" le pregunto. Ella ríe y niega con la cabeza.
"Solo un vaso" aclara. "Seguramente Cynthia debe estar como loca, por no saber donde estoy" dice.
"¿Como?, ¿No le haz dicho?" pregunto, justo cuando el cemaforo da en rojo. Ella me mira y suspira.
"Escucha, Camila. Yo me he enterado hace unos minutos de que tu no sabias sobre esto. Le pregunté a Lauren si tu vendrías pero me dijo que estabas enferma" dice, suspiro y la miro nuevamente. El cemaforo da en verda y ella comienza a conducir nuevamente. "Y cuando estábamos hablando, Cynthia salió y me preguntó con quien estaba hablando, obviamente le dije que contigo. Y me dijo que no te dijera sobre la fiesta" dice.
"Cynthia me odia, de eso estoy segura" digo. Mirando hacia la ventana.
"No es su culpa" dice. La miro queriendo que sea mas explícita. "Lauren le dijo a Cynthia que por favor no te dijera nada sobre la fiesta. Ya que tu no la quisiste escuchar" suspiro, sintiéndome la persona mas estúpida del mundo. "De todos modos quiero que sepas que me enteré de todo esto hace sólo unos minutos" dice. "Cynthia me pidió que no te dijera nada sobre el cumpleaños, pero obviamente fue demasiado tarde porque ya te había dicho"
"Así que Lauren no me quiere allí" susurro. "Detén el auto" le digo.
"¿Que? No" dice.
"Lucy, deten el auto" le digo una vez más, pero ella no me presta atención. "Lauren no me quiere allí, tú me lo haz dicho" digo, cruzando mis brazos.
"No dije eso. Además ella si te quiere allí, le harás mejor" dice. "Ella sólo estaba enojada contigo, pero estoy segura de que cuando te vea tendrá sólo ojos para ti" dice con una gran sonrisa. No digo nada.
De hecho no digo ninguna palabra hasta que llegamos a una gran casa. Me bajo del auto y escucho como la música retumba en toda la casa, hasta por afuera. Lucy me sonríe y entra conmigo, hasta la sala, donde hay un montón de chicos y chicas bailando, podía jurar que hasta había visto a Alexa. Pero era algo imposible.
"¿Donde estará?" grito por encima de la música.
"No lo sé" grita Lucy en respuesta.
Comienzo a mirar en todo el lugar en busca de Lauren por un largo tiempo, hasta que por fin la encuentro. Está sentada en una de los sofás con un vaso de cerveza, está de espaldas a mí, pero aun así puedo reconocerla desde kilómetros.
Me acerco a paso lento a ella, hasta quedar a centímetros de su cabello.
"Feliz cumpleaños" susurro en su oído. Ella al instante se voltea y me mira sorprendida, pero luego sacude la cabeza y vuelve a estar seria.
"¿Qué haces aquí?" pregunta.
"Acompañándote en tu cumpleaños" digo, mirando directamente a sus ojos.
"¿Quien te trajo? Camila es mejor que te vayas" mi cuerpo se congela al instante. ¿No quería que me quedase? Digo, fui una idiota pero... No era tan grave.
"Lauren, perdón. Lo siento mucho de verdad. Es que hable con la directora y me puso un ultimátum lo que es muy grave para mí y..."
"No importa eso ahora, Camila" dice mirándome severamente. "Tienes que irte" dice mirando hacia otro lado.
"Creí que te iba a agradar mi presencia" menciono, bastante apenada.
Sentí como si me despreciara por completo, como si yo fuera un animal callejero al que había que apartar, como si yo tuviera lepra o algo por el estilo. La verdad no entendía porque me sentía así si sólo me había pedido que me fuera de ahí, pero para mí era como si me tiraran un gran balde de agua fría con hielo. Pensé que le gustaría, pero me equivoqué por completo con ella y con esta idea loca que se me pasó por la mente. Pensar que se alegraría de verme después de no haberla escuchado... Ja!.
"Vete" dice. Ella me da una corta mirada.
"¿En serio quieres que me vaya?" digo casi sin escucharme a mi misma. Sentía mis oídos tapados. Ella mira hacia otro lado, manteniendo la vista en aquel lugar detrás de mí. Asiente con la cabeza.
"Vete, Camila. Hablaremos otro día" suspira y toma uno de mis mechones de cabello. Tomo su mano y la aparto lentamente.
"Sí... Otro día" susurro, antes caminar hacia la puerta principal e irme con los ojos llenos de lágrimas... Y decepción.
Sentía la voz de Lucy gritar mi nombre desde atrás pero no podía hablar con nadie, así que seguí caminando rápidamente. Sin mirar atrás. Hasta que las gotas comenzaron a caer... Genial, lo que faltaba.