"PARALELO" Serie Mundos Paralelos I

CAPÍTULO TRES

– ¡Me quieres matar de un infarto! ¿Verdad? No es posible que apenas me dé la vuelta tú estés con esa partida de inútiles protestantes que no aprecian su vida, en una especie de "revuelta pacífica" y no conforme con eso eres la cabecilla. De verdad Ángel no voy a tolerar más tú comportamiento, vamos a tener que poner nuevas reglas y más severas y tú Robert eres un desconsiderado mal amigo ¿Cómo es posible que lleves a mi niña a esto? ¿Acaso no sabes lo peligroso que es esto? No quiero volver a saber que andan en manifestaciones o cualquier tipo de problema ligado a desobedecer mis normas–

Mamá está realmente furiosa, lo sé porque esta roja de la rabia su piel blanca la delata, sus ojos saltan de sus órbitas y para que me grite a mí y a Robert sin contemplación es porque realmente está muy pero muy enojada, camina de un lado a otro con las manos en jarra respirando agitada viendo las noticas en el televisor.

–Sra. Emily no fue nuestra intención, de verdad era una protesta pacífica, además usted puede ver en las noticias nadie salió lastimado...– lo interrumpió con mirada furibunda.

–mira Robert mejor te vas a tu casa, ahora no estoy de humor–dijo

– ¡Mamá!– le reproche

–déjala Ángel yo entiendo, buenas noches Sra. Emily, buenas noches Ángel, mañana paso por ti–

–te acompaño– le dije

–Está bien buenas noches– mamá lo despidió con la mano con gesto molesto, caminamos hacia la puerta.

–vaya amiga, tú mamá está realmente furiosa de veras– susurro.

–si Robert, creo que esta vez nos pasamos sabría que tendría problemas por lo de las cámaras, de verdad la embarre–

–no tienes la culpa, quien iba a imaginar que algo así pasaría, pero vaya que fue una protesta increíble con amplia cobertura – nos reímos en silencio.

–Robert, necesito hablar contigo urgente ¿Podrás esperarme a las nueve en los columpios?–

– ¿hoy?–

–claro, no puedo esperar–

– ¡estas demente! ¿Verdad? no sé si pueda estoy cansado y mi mamá debe preguntarse dónde ando y si vio las noticias te vio a ti y eso indica que donde estás tú yo estoy cerca, así que amiga hablaremos mañana en el albergue porque me imagino que tu teléfono estará confiscado hasta nuevo aviso–

–Sí, tienes razón– dije cabizbaja

–Ángel, ¡Aún no he terminado contigo jovencita!– grito mamá.

– ¡Voy mamá!– le dije– ¡rayos! segundo round, amigo te adoro gracias por estar en mis locuras– le estampe un beso y lo despedí con la mano, por favor piensa lo de hoy es muy importante.

Cerré la puerta y allí estaba mamá, sentada en el sofá color beige con las piernas cruzadas. Mi mamá es realmente hermosa a sus casi cuarenta y cinco años se conserva muy bien, sus ojos color caramelos con la luz del sol parecen verdes, su contextura delgada y piel blanca con algunas pecas la hacen ver juvenil, su cabello negro liso esta ahora corto en capas por los hombros. Trabaja por su cuenta, es diseñadora de interiores y florista profesional. Su trabajo le exige mucho tiene muchos clientes que la atiborran de trabajo. Tiene un pequeño local donde maneja su negocio, con cuatro ayudantes y una asistente. Aún después de la muerte de papá sigue sola, nos tenemos la una a la otra.

–ven siéntate conmigo– me dijo esta vez más calmada

– ¡mami discúlpame! de verdad no quería hacerte daño– le dije apenada.