Capítulo 9.

13 2 0
                                    

Alexander fue trasladado a un hospital, donde le harán unos estudios para verificar su estado.

Está muy mal. Primero chocó con el defensor, después contra el poste y al final cayó inconsciente al piso. Su papá corrió hacia él, lo levantó y rápidamente lo subió a la camioneta, condujo lo más rápido que pudo y lo metieron a la sala de emergencias.

El doctor pudo contenerle la hemorragia pero temía lo peor; descubrir una fractura del cráneo o una hemorragia interna.

Durante varias horas, se revisaban una y otra vez los análisis llegando a la conclusión que debían darle fármacos barbitúricos. Sí, le ocasionarían un coma inducido. Mediante este proceso se pretende hacer que el cerebro reduzca su consumo de sangre y energía, para así lograr que el cerebro quede totalmente "apagado". El coma inducido ayuda al cerebro a protegerlo del paciente para lograr que el cuerpo logre recuperarse y continuar con su vida cotidiana.

Las cosas pueden llegar a complicarse si se ocasionan coágulos.

De inmediato llegan varios familiares de Alexander quiénes algunos, sobre todo sus padres, miran su cuerpo desconsoladamente, con lágrimas saliendo de sus ojos, esperando que todo esté bien.

Mediante el electroencefalograma se monitorea su actividad eléctrica en el cerebro, que poco a poco va disminuyendo por la cantidad de sedantes que va recibiendo. Su cerebro ahora si está completamente apagado, dependiendo de cómo avance su recuperación se le irá quitando los sedantes. Es imposible saber qué es lo que está viviendo Alexander. Hay muchos casos en los que la persona en coma escucha las palabras de los demás, pero no puede hablar, ni moverse.

La tomografía muestra un traumatismo craneoencefálico en la parte izquierda de su cerebro. No se sabe si fue por el choque de cabezas o por el choque contra el poste de la portería. Lo que sí es que probablemente ya no vuelva a ser el mismo. Una persona en coma toma una perspectiva diferente de la vida, lo más peligroso que le puede dejar este accidente, es que deje secuelas. Además, tiene que seguir en rehabilitación para que vaya recordando las funciones básicas como respirar, moverse, hablar, después deberá comenzar a probar su memoria, qué cosas recuerda, qué cosas olvidó. ¿Recordará a Natalie? O ¿pensará en llegar a Taylor? Es algo que no se puede saber, qué tan lejos está de Natalie o de Taylor.

Sus padres se quedaron ahí, esperando a cada reacción que pudiera tener, abrazados, deseando estar en casa tranquilamente, sin preocuparse por el estado de su hijo.

Al día siguiente, su hermana y su cuñado son los encargados de cuidar que todo esté bien. Ella avisó a los amigos de Alexander sobre su situación, incluso a Natalie. Nathan, Joe y Austin son los primeros en llegar, Stephanie llega después, más tarde, cuando no queda nadie más, llega Natalie junto con Valeria, casi al mismo tiempo que Katy.

En ninguna de ellas se mira más preocupación que en Natalie. Está preocupada, destrozada, sin poder asimilar qué es lo que está pasando.

Se acerca a Alexander, sujeta su mano, su vista no se aparta de sus párpados, no entiende por qué sus ojos están cerrados, pide un poco de privacidad que se le otorga.

Mientras no suelta su mano, intenta decirle algo:

-Sé que escuchas todo lo que te han dicho, porque sé que tú sigues aquí, no creo que serías capaz de dejarme sola, sin poder verte, sin poder dejarme decirte lo mucho que me gusta ver cuando sonríes y se te forman esos lindos hoyuelos *acaricia suavemente sus mejillas*, no soportaría que te alejaras de mí para siempre. Si me escuchas, te diré que necesito que despiertes, tómate tu tiempo, yo estaré aquí esperando verte sonreír de nuevo, me quedaré contigo, no estaré aquí físicamente, pero sí mentalmente, al abrir tus ojos notarás que yo sigo aquí, tu mente te lo dirá. Sé que estarás bien, pero necesito que despiertes para oírte decir lo mucho que me quieres y yo decirte lo mucho que te quiero y terminar peleando hasta acabar abrazados, no me importa que te burles de mi estatura, te golpearé si lo haces.

Solo mejórate, espero tu pronta recuperación para poder seguir queriéndonos.-

Termina con un beso en la frente y sale de la habitación.

Para en la noche, regresan sus papás.

Así serán estos días hasta que su estado de salud mejore, por lo pronto solo les queda esperar.

Cinco días fueron suficientes. Las nuevas imágenes sobre su cerebro muestran una recuperación de un cien por ciento. Los doctores llegan a un acuerdo donde deciden que a partir de hoy, comenzarán a retirarle los barbitúricos.

Un día después, a la sala de espera comienzan a llegar unas cuantas personas, familiares.

En el cuarto donde se encuentra Alex solo están él y los doctores. Lentamente comienza a despertar. Sus ojos están sensibles a los rayos de la luz, su boca está seca. El médico intenta comunicarse con él.

-Hola.-

-Ho-hola.-

-¿Cómo estás?-

-Creo que me siento bien, no lo sé.-

-¿Recuerdas tu nombre?-

-¿Soy Alexander?-

-Sí, Alexander. Tienes casi una semana sin estar consciente, tus papás están afuera esperándote, prométeme que saldrás e irás a abrazarlos. Nosotros te ayudaremos a caminar y que no pierdas el equilibrio.-

El camino hacia sus padres es largo, paso a paso, lento, la incógnita es saber a qué personas recuerda.

Listo, ahí están papá y mamá corriendo hacia él, una escena que cualquier padre no quisiera vivirla, menos con su hijo.

-¿Estás bien? ¿Nos recuerdas?-

-Sí, estoy bien, pero...-

-¿Qué pasa?-

-¿Dónde está Taylor?-

-¿No recuerdas lo que le pasó?-

-No, ¿qué pasó? ¿Ella está bien? ¿Dónde está? ¡Quiero verla!-

-Hijo, ¿recuerdas el accidente que tuvo?-

-¿Qué accidente? ¿¡De qué me hablan!?-

-Hace casi un año, un accidente ocasionó que ella perdía la vida.-

-¡No es verdad! ¡Ella está bien! Hace un rato estuvimos platicando y ella me dijo que se iría, solo que no mencionó a dónde, también recuerdo haberla escuchado decir que muy pronto nos volveríamos a ver, para estar juntos por siempre.-

Estas palabras ocasionan que todos se queden paralizados. Quizás en algún momento, vio una parte de lo que sería su futuro. Entra el miedo, el pánico.

-¿Qué más te dijo?-

-No recuerdo, solo estábamos sentados en un parque, con un extraño cielo entre color naranja y rojo, disfrutábamos de un helado, cuando en eso me empezó a doler la cabeza, después ella me dijo eso y cuando el dolor comenzó a hacerse más fuerte, se nubló mi vista y al despejarse, miré a los doctores frente a mí.-

Y sí, Alexander ya no es el mismo.

Al parecer no recuerda a Natalie. Los doctores aseguran que poco a poco irá recuperando su memoria, mientras tanto, tendrá que preocuparse por volver a comer, ver cómo reacciona su cuerpo ante los alimentos, moverse, caminar más rápido, inhalar y exhalar, todo eso dependerá de su memoria.


Volver a comenzar. EMPH p.IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora