Un día más sin ti es un día menos sin mi

149 4 2
                                    

Estamos todos callados, llevábamos casi 48 horas no sabiendo nada, si hay mejoras, o si está empeorando y eso me mata.
Me bajo a fumarme un cigarro; este estrés se mata con algo. Y me siento, necesitó pensar en todo lo que está pasando, y en como le echo de menos desde que no oigo su voz y no está aquí. Joder, es que se me esta haciendo algo interminable. Parece que haga semanas desde que el no está, y tan solo dos días. Aunque para mi es muchísimo; tengo mucho miedo a perderle, si le pierdo a el, me pierdo completamente a mi. Sería incapaz de seguir con mi vida como si nada si el no vuelve.
-¿Qué? ¿pensando no?- me dice una chica que no conozco de absolutamente nada.
-¿quien eres?- le digo directa, demasiado. No estoy para nada ahora mismo.
-Soy la ex de Hugo- abro los ojos. ¿Y está que pinta ahora aquí?
-¿Cual de todas?- le pregunto con ganas de que coja y se vaya a la mierda.
-Paula- me dice sonriendo.
-¿Se puede saber que haces aquí?- le digo mirándole con toda la cara de asco.
-¿Y tú?- me dice preguntándome encima.
-Soy su novia, ¿tu que eres? Por que vamos, no eres nada de el- le digo sonriendole yo también.
-Solo vengo a verle, me he preocupado y ya está, no hace falta que te pongas a la defensiva por todo- me dice explicándose y yéndose.
-Si pues poco vas a ver- le digo desde aquí gritándole, mientras entra.
Ni si quiera nadie puede verle, ¿que hace ella aquí? ¿que cojones pinta? Enserio, decírmelo vosotros, porque yo no lo sé. Que vale, tu puedes tenerle un cariño a una persona y haberle querido mucho y todo eso, pero alguien que no se ha preocupado en llamar en años, y ahora tiene un accidente y se preocupa. Vale. Llamarme tonta, pero hay ciertas cosas que no logró ni lograré entender.
Suspiro, necesitaba aire y encima me lo estropea, en fin

Subo para arriba, total, no pinto nada allí, pero quiero ir por si acaso.
Me veo a Pablo y a Paula, lo que me faltaba, Paula.
Llego, saludo y me voy a hablar con la médica. Necesito saber si ella sabe algo.
-Espera Malú- me dice cogiéndome del brazo, pablo- ¿estas bien?- me dice apenado. ¿Desde cuando le importa a este tío esto?
-No, ¿y que más da? Tu amigo está en coma, deberías de preocuparte por eso, y no por si estoy bien imbécil- le digo con cara de asco. Dios. Acabo de ser muy cruel...¿no? El solo quería ver como estaba y yo le contesto así...joder, me estoy pasando. Y demasiado.
-Perdone, ¿quería algo?- me dice la médica.
-¿Hugo está mejor?- se queda callada, y me mira otra igual de apenada.
-Lo siento, pero no sé nada de eso, solo sé que esta en coma, no me han dicho mucho más- niego con la cabeza. No puede ser joder. ¿dos días y no despierta? Me cago en todo lo que me rodea.
-¿Como que no sabe nada?- le grito- usted para que coño esta aquí? Si nunca sabe nada- le digo yendome de allí. Estoy nerviosa y no puedo más. Necesito volver a fumar, o me va dar algo. Salgo y me siento, pero no me vuelven a dejar mucha tranquilidad...
-¿Paseamos?- me dice alargando su mano para que le diese la mía. Me sonríe, y acepto.
-¿Crees que se despertará?- le digo a Pablo, desconcertada, pérdida. Esto no es lo mío, yo no puedo aguantar que mi novio este en coma joder, ni yo ni nadie podría aguantar esto.
-La verdad es que no tengo ni puta idea - me dice con las manos en los bolsillos- solo sé que esto no es su final, es un presentimiento.- me dice mirando al suelo.
-Oye- le digo parando en seco, y mirándole a sus ojos azules.-siento lo de antes, me he pasado...es que todo esto me está matando, y no sé ni quien soy ahora mismo.- le digo, se me queda mirándome un buen rato, y me sonríe. Me da un abrazo, en el cual me pongo a llorar como una enana. Me acaricia el pelo y me hace sentir que todo esto saldrá bien.
-Escucha Lucía- me dice mientras me quita el pelo de la cara- ¿tu sabes lo fuerte que es Hugo? No lo has conocido cuando todas sus novias le jodían vivo, el puede con todo, y tú eso lo sabes perfectamente- me dice seguro- solo que tienes un miedo horrible; a que se vaya, a que se quede, a que le duela, a que no le duela, a fallarle, o sentirte más culpable aun cuando se levante, y tienes miedo, porque crees que todo esto es culpa tuya- levanta la mirada del suelo, y me mira.- pero no lo es, ni nunca lo va a ser, ¿vale? - me pongo a llorar, aun más. O estoy muy sensible, o realmente esto va acabar conmigo. Es que hugo...como Hugo no hay nadie. Y no puedo más, lo echo mucho de menos. Más de lo que pensáis.
Subimos arriba, y veo al médico en la puerta de la habitación. No quiero pensar que haya pasado algo malo. No, por favor. Quiero pensar que todo va ir bien, dios, nada más. No pido nada más, solo que el se recuperé. Me acerco preocupada; no quiero que se vaya. Llego y le pregunto, necesito saberlo todo.
-¿Que ha pasado? ¿esta mejor? ¿que le pasa? ¿donde está?- le pregunto al médico demasiado rápido.
-Calma, calma...de momento está estable, no ha empeorado ni nada, eso es muy bueno- sonrió...dios es todo lo que necesito. Pero aún me sigue mirando con pena, y eso me preocupa.
-¿Y que es lo que pasa?- le pregunto muy preocupada.
-Tiene una fuerte herida en la cabeza.- me dice.
-¿Y que le puede pasar?
-De momento está bien- me dice mirándome- pero tenéis que hacer que se sienta bien, aunque no este aquí, que se sienta así- dice mirando a todos- tenéis que hacerle sentir que estáis aquí con el, cuánto más cariño sienta más ganas tendrá de volver a esto-dice sonriendo.
-¿Y cual es la parte mala? - no puede haber una historia sin parte mala, entonces acabaría demasiado bien.
-La parte mala es que puede que haya perdido la memoria de todo- ¿que? Ya no escucho más. Me centro en esas palabras, parece que el mundo ya ha dejado de tener sentido hace un minuto.
No puedo más. Quiero que vuelva de una maldita vez y me diga que me quiere y ver la sonrisa que tiene de la felicidad que trae encima. Pero no, en vez de eso, me entero de que mi novio no se va acordar de nadie, vale, bien, perfecto.
-¿Me estas diciendo que cuando despierte, quizás no se acuerda ni de mi?- me afirma con la cabeza.
-Sí, pero mientras le deis más cariño mas rápido se despertará, y menos posibilidades hay de que le haya pasado eso, o le pase-.
-¿Cuando lo podremos ver?-pregunto.
-Esta misma tarde- dice sonriente. Dicho esto, se va.
Se va dejándome con las dudas de todo. ¿Y ahora? ¿Ahora que? Estoy enamorada del chico que está sin absolutamente nada de conocimiento. ¿Y si no se acuerda de mi cuando despierte? ¿y si ha olvidado como me conoció? Y lo que es peor, ¿y si ya no se acuerda ni por asomo quien soy?
Se me ha ocurrido una cosa, bueno mejor dicho solo estoy haciendo lo mínimo por el.
Pido una hoja, y un boli y me pongo manos a la obra.

Me acuerdo de un domingo que me desperté llena de besos, y ahí estaba su sonrisa en mi boca...esa sensación era tan sumamente mágica. Recuerdo que hablábamos de tonterías, y el quería poner una película de miedo, no me apetecía nada.
-¿Porque no vamos al cine a ver una película de amor?- le pregunte en sus piernas mientras le miraba desde ahí, con la sonrisa mas grande del mundo.
-¿Para que? Para ver la típica película de novia enamorada del chico, y el chico pasa de el, y al final se enamora de ella? - me dice riendo- siempre es lo mismo.
-Eres idiota, no siempre es lo mismo.- se río y me miro.
-¿Ah no? En las películas de amor siempre acaban bien, pero claro, algo malo tiene que tener.- me dijo muy serio.
-¿y por que tiene que tener algo malo?- reí.
- Cariño, porque no puede haber una historia sin parte mala, entonces acabaría demasiado bien.- en ese momento no lo entendí, a día de hoy lo he entendido todo. Sonreí y le pregunte.
- ¿entonces que hacemos?- le pregunte mientras se acercaba a mis labios.
-Ya sé, escribeme una carta.- recuerdo que sonreí y abrí los ojos.
-¿Enserio? ¿desde cuando te gusta a ti el rollo ese?- le dije sonriendo, y me beso. Un beso tan tierno, enserio.
-Me va desde que te conocí- me sonrió. Que sonrisa chicos. Que sonrisa.
-Eres un moñas- le dije mientras cogía el mando de la tele. Me quito el mando y se puso serio; me encantaba así.
-Espera, ¿no me la vas a hacer?- negué con la cabeza y el dedo.
-Sabes que mi letra es una mierda- me miro serio y a mi me hacia especial gracia como se ponía por una carta.
-Me da igual que tengas la letra del médico mas retirado del mundo; solo quiero que te molestes en escribirmela, nada más- me acarició el pelo, y me miro. Nos quedamos como 3 minutos, sin exagerar, mirándonos y sin hablar. Eso hablaba más que cualquier cosa.
-Piensalo- me dijo acariciando mi cara- para mi cumpleaños lo podrías hacer- me dijo ya que yo no era mucho de ñoñerias.
-Te compraré un ¡phone que te hará mas ilusión- le dije riendo.
-No creo que nada me haga mas ilusión que una carta escrita con la letra mas fea del mundo, de mi novia- dijo sonriendo- cuidao, todo esto dicho desde el cariño que yo te tengo, que te diré que es bien poco- se río y me hizo reír.
-Tonto- le di en el brazo y recuerdo como me cogió corriendo y me subió a su cuerpo. Ahí estaba tan agusto, y ahora...bueno ahora estoy aquí.

Suspiro, y me pongo a escribir, sé lo importante que para el era. Y imagino que seguirá siendo.

Hola Hugo, ¿como éstas? Bueno, yo espero que bien, sabes que eso me haría muy feliz. Mi niño, ya van dos días desde que me has quitado todos esos besos que no parabas de darme, ¿te parece bonito? Ya, yo pensé lo mismo.

Cariño, no te haces una idea de lo que te quiero. Y de lo muchísimo que me arrepiento de decirte esto ahora, y no cuando hace tres meses me dijiste que lo hiciese. A veces me odio un poco, luego vienes tú, y me haces quererme como a nadie; creeme, eso es algo que no hace absolutamente nadie, y te agradezco que tu consigas hacerlo.
Hugo, mi amor, no sabes lo muy mucho que te echo de menos y no sabes cuanta gente lo hace. Y lo deseando que estoy de que vuelvas y me cuentes mil anécdotas de tu infancia, y me preguntes porque coño la luna es rendonda, y porque y como nos enamoramos de alguien, y porque tenemos dientes... Yo nunca te he respondido a esas preguntas, la verdad es que en parte porque eran la mayoría unas tonterías que ni un bombero retirado, pero aun así no tenía ni puta idea. Lo de la luna ya lo adivinaremos. Y lo de los dientes, mas de lo mismo.
Lo otro sé exactamente por que y como. Nos enamoramos porque no solo físicamente nos gusta la persona, sino que personalmente jamás hemos conocido a una persona como ese alguien. Nos hace sentir cosas que otra persona no consigue que lo sintamos. Nos hace vivir, sentir, nos hace volvernos completamente locas. Y la verdad es que si me preguntases porque cuando nos enamoramos parecemos gilipollas, te diría que no tengo ni una respuesta a eso. Solo sé que enamorarse es lo más bonito del mundo, y doloroso a la vez. Enamorarse es confiar en la otra persona pese a todo y pase lo que pase. Enamorarse es tan difícil de hacerlo; se encuentra sin buscar, todo por casualidad.
Y hoy, 15 de agosto, te he encontrado a ti, como por arte de magia, de pronto te vi. Con tu pelo moreno, y tus ojos verdes, y tirándote el café encima y tu risa, una risa que no me importaría escuchar cada mañana cuando me despertase. Porque me enamorado de tu risa. Porque, Hugo Cortés Sanchez, cariño, me he enamorado de ti.
Vuelve. Vuelve ya...

Mi vida en ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora