4 de Agosto de 2013
-Pipipipipipi Sonaba la alarma
-Joder, ostia tío Enfadado por la alarma me levanté.
Que clase de niño era, aquel inocente que nunca quería salir del armario, es curioso, me forzará alguien, yo desde ese instante lo sabía, iba a ser una persona la cual te obligará o aconsejará a salir del armario, a contar la verdad, tu personalidad. Como era de esperar era un día muy caluroso de verano, estaba muy cansado ese día, era totalmente feliz pero no, había algo que me agobiaba, aiiii maldita calor, como lo odiaba, aunque ese día daba tormenta, osea que tenía ganas de salir, así que después de una mañana de piscineo y de liguilla de monopoly, me dispuse a hacerme mis kilómetros de bici.
-Veamos, hoy haré ruta nueva, tiraré por la tarasana, llegando así al pueblo, llego hasta Ciudad Expo, y cruzar Mairena del Aljarafe para así llegar a Almensilla, volver a Mairena e ir hacia Bormujos vía Pisa, cruzar Bormujos y llegar hasta aquí por el puente, perfecto.
Le dí a empezar a calcular ruta, y el día estaba casi completamente oscuro, de repente justamente cuando iba a pasar por la tarasana, un manto de agua caía encima mía como casacadas, con truenos impresionantes, pedaleaba sin cesar hasta Cavaleri cruzando Mairena, así llegar hasta la policía local, me detuve un segundo para beber agua y seguí con mi camino pensando en las vacaciones de este año, esa Roma antigua, y pensar que esta ciudad ha sido escenario de luchas, guerras, batallas interminables, recuerdo que en el avión mis padres y yo nos hicimos una foto haciendo el tonto, lo hacíamos cada vez que nos íbamos de viaje por ahí, como un recuerdo, entonces no dejaba de pensar en aquellas monstruosas ruinas de la antigua Roma como por ejemplo el Colisseo, aquel donde los gladiadores luchaban a muerte, o la Fontana di Trevi esa plaza tan pequeñita donde cabía una monstruosa fuente con esculturas mitológicas de la antigua Roma, o la ciudad de Florencia que visitamos en esa semana, el Duomo, el puente con casas, que en realidad eran tiendas, joyerías mejor dicho, Rolex, Swaroski o cosas de lujo, aunque ahí como que no paramos.
Seguía en mis pensamientos cuando llegué a Almensilla y de repente pise un charco sin querer con un bordillo y me caí, podría haber pasado algo peor? De repente vi a un grupo de chicos medio "canis" riéndose de mi caída, pero, uno de ellos, impresionantemente se dispuso a ayudarme, en ese momento quería que la tierra me tragase, llovía muchísimo en ese momento y al chico no le importaba mojarse, solamente me ayudaba y sus "amigos" nos miraban con asco.
-Iros adelantando, yo voy más tarde, voy a ayudar a este chaval que creo que se ha hecho bastante daño- Dijo el chaval amablemente.
Estaba lleno de barro del maldito charco y la lluvia no cesaba, me daba igual, nos metimos en un hueco con tejado con la bici y a el le daba igual mojarse o ensuciarse, se mostró amable diciéndome que iba a arreglar la cadena de la bici, yo estaba que no me lo creía, el chico era apuesto, alto con los ojos marrones, pelo corto, negro, con un pendiente y con gorra. Viéndolo así, parecía un auténtico cani pero no son de los "canorros" como digo yo, era muy amable y simpático, realmente este era el peor día de mi vida, no sabía como actuar, ya no estaba acostumbrado a este tipo de personas.
-Bueno, pues esto va aquí y ya está, arreglada, ten más cuidado la próxima vez, por cierto soy Cristóbal, nos sentamos? - Dijo algo amable
-Yo me ruborice y dije algo nervioso - Yo soy Luis, encantado- De repente se levantó, cogió la bici y entonces pensé, este me la birla.
-Hey!! Vamos!! Te tengo que llevar al médico, te has hecho daño no? Dijo con tono preocupado
-Entonces fue en ese momento cuando me quedé anonadado - Bueno, vale.
Fuimos hasta la clínica más cercana que era el ambulatorio de Mairena y estuvimos esperando al médico que me había revisado
-Bueno pues tienes un pequeño esguince en el tobillo pero aún así puedes andar, con cuidado evidentemente, puede empeorar
-Muchas gracias doctor-Contestó el chaval como si fuera mi madre.
Salimos del médico y llovía sin cesar, nos fuimos al tejado del metromar a ver si escampaba
Después de media hora, dejó de llover y me acompañó a casa, cosa que yo no esperaba pero ni en mis sueños, estaba en una nube, tenía una sonrisa increíble, el me miraba sonriendo, me hablaba, yo le miraba mientras pensaba que este es el típico que se llevaría bien conmigo pero no era gay ni de coña, es más pensaba que hasta tuviera novia, de lo guapo que era.
-Aquí vives?, Dijo impresionado
-Sí, Contesté nervioso y de repente sin pensarlo
-Oye quieres pasar? Tomar algo? Estaba muy nervioso, de hecho en ese momento me quería morir.
-Vale, encantado.
Subimos, me dí una ducha, mientras que el esperaba en el salón. Salí y nada, empezamos a hablar de nuestras vidas, pero de repente dijo algo que yo ya no esperaba ni de lejos, le pregunté que donde vivía y me contesto que vive en San Pablo, ahí ya pensé que ya era un caso perdido, no era gay ni de coñas, me caía bien, se veía un chico muy pero que muy inteligente.
Pero no creía que iba a pasar hasta que de repente el silencio se hizo, un silencio incómodo entre nosotros dos......
Continuará....
