La cabeza me da vueltas. La camioneta donde viajamos ha dado varias vueltas tras ser embestida de sorpresa por esa camioneta roja. Alguien ha comenzado a arrastrarme fuera de la camioneta, mi vista esta empañada y no puedo ver de quién se trata. Dejo escapar un grito, me duele todo el cuerpo. —Cassie— mi voz sale en un susurro casi inaudible. Hablar duele. Respirar duele. Pero no puedo evitar pensar en Cassie. La camioneta roja nos golpeó justo de su lado. —Cassie— repito y mi voz sigue siendo débil.
Intento incorporarme pero el dolor es insoportable, me paso la mano por el rostro para limpiar lo que sea que esté nublando mi visión, es algún tipo de líquido, lo más probable es que sea sangre porque sigo sin poder ver bien. Mis ojos arden. Una mano se posa sobre mi hombro y me obliga a recostarme nuevamente. —Cassie— repito nuevamente, como si no pudiera articular otra palabra que no sea el nombre de mi novia.
—Tranquilo, Danyel se está haciendo cargo de ella —dice la chica pelirroja que por algún extraño motivo tanto altera a Cass. Lo noté cuando me usó de escudo para evitar la mirada penetrante de la chica.
Las palabras de la pelirroja me tranquilizan y me inquietan al mismo tiempo porque sé que Dan no dejará jamás que nada malo le pase a Cass y porque tantas atenciones para con ella me han llevado a concluir que está enamorado de ella y que a Cass no le es del todo indiferente y la idea de perderla me aterra. Me aterra más de lo que pueda admitir con palabras.
—¿Cómo está? —pregunto con dificultad.
—No lo sé —dice ella mientras la escucho destapar algo. Acto seguido siento un líquido corriendo por mi rostro y su mano tallándolo. —Debo limpiarte las heridas.
Así que estaba en lo cierto. Mi rostro estaba bañado en sangre y termino de tallarme yo mismo. La chica está lavando su rostro y termina con algunos de sus cabellos rojos pegados al rostro. Cuando se vuelve hacia mí y mi mira, sus ojos color de cielo me resultan familiares.
Me incorporo lentamente, sintiendo un inmenso dolor. Puedo ver el panorama completo. La camioneta negra está llantas arriba con los cristales destrozados. Unos metros más adelante está la camioneta roja que terminó estrellada en un árbol que ha caído sobre ella. Unos cuerpos están cerca de ella. Probablemente Dan y la pelirroja se encargaron de ellos aprovechando su aturdimiento, antes de venir por Cassie y por mí. A mi derecha puedo ver a Dan ayudando a Cassie a incorporarse. Intento ir hacia ellos pero la pelirroja y el dolor de mi precipitado movimiento me detienen.
—No hay tiempo para reencuentros amorosos —dice algo molesta— debemos movernos rápido. Esos hombres no están solos y nuestros refuerzos tardarán un poco en llegar. La chica estará bien.
Sé que Cassie estará bien, tiene a Dan para protegerla y yo solo represento una preocupación más para ella.
Cassie se incorpora con la ayuda de Dan, puedo escucharla quejarse un poco cuando apoya el pie izquierdo. El rubio rápidamente le pasa su brazo derecho por la espalda y el brazo izquierdo de ella acaba rodeándole el cuello. Ella le regala una sonrisa de agradecimiento y él le devuelve una tan encantadoramente seductora que si yo fuera chica caería rendida a sus pies. Hago mis manos un puño, recogiendo pedacitos de cristales que cortan lentamente mis palmas. Esta vez no me importa el dolor. No quiero a Dan cerca de mi novia. Puede que suene machista y retrógrada pero Cassie es mía. —¿A dónde van? —le pregunto a la pelirroja cuando veo moverse a Cass y Dan.
La chica rueda los ojos. —¿No escuchaste lo que dije? —suena molesta—. Debemos movernos y debemos hacerlo rápido —me tiende la mano y yo la tomo para incorporarme, el dolor en las costillas es insoportable pero me limito a soltar un leve quejido —¿Estás bien? —pregunta ella sonando amable por primera vez. Me limito a asentir.
ESTÁS LEYENDO
Keep Me In Love - Keep Me #3
RomanceHay algunas parejas que merecen un final feliz y Cass y Derek son una de ellas. Han luchado contra sus sentimientos cuando pensaban que eran hermanos. Han peleado contra su propia familia para poder estar juntos. Han estado incluso cerca de la mue...