Cuando desperté estaba sola en la habitación. Claro que si, no recordaba que alguien haya venido aquí conmigo. Alguien como Zayn.
No me iba a engañar a mi misma, me dolió saber que Zayn no estaba aquí, abrazandome, dandome cariño.
-¡Hope te necesito abajo lo antes posible! -Grito mi padre.
Suspire profundamente y me levanté de la cama. Antes de entrar al baño mire la hora: 11:00 a.m. Demasiado temprano para mi estado actual, pero mi padre parecía estar desesperado.
Sólo lave mi cara, tratando de despertarme y quite el maquillaje corrido. Me puse mi pijama de cuerpo entero con forma de stich y salí de la habitación.
Mi padre se encontraba sentado en el sofá con una sonrisa mientras sostenía su celular. Me acerque a el y me senté a su lado, abracé mis piernas para llevarlas a mi pecho y apoye mi cabeza en su hombro.
-¿Que necesitas de esta pobre niña?
-¿Pobre niña? -Rió.
-Si. Ahora dime, ¿Que quieres?
-¿Estas bien del corazón para escuchar lo que estoy a punto de decirte?
-Papá, estoy comenzando a asustarme.
-Bien pues... Tienes más de 10.000 visualizaciones en YouTube.
Mi respiración se detuvo.
Mi corazón dejo de bombear sangre.
No siento mis piernas.
No puedo mover mis manos.
Creo que me estoy malditamente muriendo.
-¿Que? -Susurre.
-Lo que escuchaste hija, y mira estos comentarios.
Me entregó su móvil, comencé a mirar todos los comentarios y... ¡Dios! Era hermoso lo que estaban viendo mis ojos. En un segundo la resaca desapareció y ahora no me importa que Zayn me haya dejado, no me importa Simón y nuestra ridicula discucion. Ahora, viendo aquellos comentarios, lo único en lo que podía pensar era en que la gente me amaba de una manera que... ¡WOW! No podía describirlo.
-Creo que tienes que agradecerlo.
Sonreí y le entregue su móvil. Me levanté del sofá y corrí hacia las escaleras, y creo que no debí correr tanto ya que mis tiernas pantuflitas de enrredaron, haciendo que caiga al piso.
-¡Estoy bien! -Dije rápidamente para luego levantarme y seguir con mi camino.
Entre a mi habitación y tome mi celular lapidamente. Mi barra de estado rebosaba de notificaciones: Twitter, Instagram, ¡SnapChat! ¿Como habían encontrado mi SnapChat? Creo recordar que no lo había posteado en ninguna red social.
Comencé a seguir a las primeras personas que vi, siempre había deseado que mis ídolos me siguieran y, bueno, sentía que yo podría hacer realidad el sueño de otras chicas o chicos.
"@HopeRay: Gracias a todos por su reciente apoyo, no puedo creer esto!!!"
"@HopeRay: Para agradecerles su enorme apoyo, les regaló una foto de mi ahora mismo."
-¡PAPÁ! -Grité con fuerza.
-¿QUÉ? -Grito el en respuesta.
-¡VEN! NECESITO TU AYUDA.
Lo escuche bufar muy fuerte. Llego a la puerta de mi habitación a los minutos con una cara de pocos amigos. Me miro interrogante, parecía querer matarme.
-¿Que quieres?
-¿Me tomas una foto? -Sonreí.
Fruncio el ceño y me miro seriamente, aunque luego lo relajo y suspiro resignado.
-Odio cuanto te pones ese pijama, te vez tan tierna que no puedo enojarme contigo.
Sonreí de la manera más adorable posible. Tomó mi cular y yo pose para que tomara la foto. Tomó dos y me entregó nuevamente el celular.
-¡Gracias papi!
Bufo y salió de la habitación murmurando algo como "Niños de hoy." Reí en una carcajada y me senté en mi cama para postear la foto.
Segundos después, un mensaje de Whatts App llego: Zayn.
"Necesito hablar contigo."
Mi corazón se aceleró. Esas palabras nunca terminaban en una buena conversación.
"Ven."
Envié y me recoste en mi cama, mientras llevaba mi celular al pecho y pensaba en que quería decirme mi, ahora en duda, novio.
***
Luego de 40 minutos con mi cabeza dando vueltas, Zayn apareció por mi casa con una cara de no muy buenos amigos. Entró por la puerta de mi habitación con la cabeza baja.
-Hola. -Dijo en un susurro Zayn.
-Hey. -Conteste suavemente con una sonrisa. Parecía nervioso.
-Yo... Sólo... -Respiro profundamente-
¿Como estas?
-Bien... ¿Ocurrió algo?
-¿No estas enfadada?
Frunci el ceño. -¿Deberia estarlo?
Si, aún estaba algo dolida porque el no había estado conmigo anoche, pero tengo que admitir que no me puedo enfadar con el. Es demasiado guapo para eso.
-No lose. -Bajo la cabeza.
-Ven aquí.
Me acomode para que el pudiera sentarse a un lado de mi. Lo quería cerca.
-No estoy enfadada contigo Zayn, sólo... Dolida.
-¿Porque? -Se acercó más a mi.
-No estabas aquí conmigo en la mañana. Te necesitaba.
Me miro por unos segundos, luego muy suavemente retiro en cabello que molestaba mi rostro. Paso su mano por mi mejilla para luego terminar sujetando mi mentón.
-Ahora estoy aquí, contigo. -Acercó su rostro- Y nada puede evitarlo.
Lo besé, porque nada podía inpedir que lo amara de esta manera. Le quería, y tanto que no podía esconderlo.
-Te amo. -Susurre mientras ponía mi frente sobre la suya.
-Y yo a ti.
Sonrió con los labios sellados y volvió volvió besarme.
-Explícame porque estoy besando a Stich.
Reí con una carcajada y lo abrace por el cuello.
-Sólo besame idiota.
