Capítulo 14

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Fueron hacia una tienda cercana y compraron un par de Pringles sabor a crema de cebolla y latas de Coca Cola helada.
Tomaron otro taxi hacia el lugar donde sería su cita: El Cementerio.
-Te molesta este lugar?- preguntó Jason de manera amable, ella negó con la cabeza, depositando la servilleta del helado en un cesto de basura cercano.- Veo que no hablas mucho...
Ella aún así no le dijo nada y guardó su iPhone en el bolsillo del pantalón.

Mientras Jason esperaba a que la gente del último entierro se vaya, miró a Taylor de pies a cabeza. Era fina, sombría, interesante, guapa... perfecta, no como las chicas que él se llevaba a la cama: Huecas, superficiales, artificiales, etc. Ella era hermosa, pero poseía una belleza rara, natural sin la necesidad de maquillaje excesivo, que con solo observarla lo hacía volverse loco, dudar de sí mismo, sentirse inferior.

-¿Quieres?- preguntó la voz de Taylor, interrumpiendo los pensamientos de Jason y ofreciéndole su cajetilla de cigarrillos. La gente en luto del entierro se estaba retirando de allí pero miraban de reojo a los chicos. Una chica con un vestido negro ceñido hasta la rodilla le guiñó el ojo a Jason y él la ignoró, pensando que en este momento el alma que acababan de velar y enterrar estaría yéndose al purgatoria y ella no sabía respetar el luto.

Él tomó uno, le sonrió y ella le alcanzó un encendedor. Jason encendió su cigarrillo y exhaló una bocanada de humo, ella también tomó uno y empezó a fumar. Ambos se sentaron en la hierba del Camposanto, Jason se dejó el cigarrillo en la boca mientras sacaba de la bolsa las Pringles y las latas de Coca Cola.

-¿Puedes hacer esto?- le preguntó Taylor, sonriente, inhalando de su cigarrillo, tragándose el humo y botándolo por la nariz en forma de círculos. Jason soltó una carcajada, debido al truco con el humo de ella y por haberla escuchado hablar.

-Tienes una bonita voz, Taylor- le dijo él, apagando su cigarrillo en el césped y abriendo su lata, Taylor lo imitó. Estuvieron bebiendo en silencio, hasta que Jason la miró y riendo le dijo.- Veo que te llevaste bien con mi amigo Bruce e hiciste que mantuviera su distancia con tu mano "caliente"    

Ella puso los ojos en blanco y su cigarrillo se resbaló de sus dedos, Jason dio una carcajada leve y lo piso para apagarlo.

-Estas personas no quisieron ser incineradas ¿sabes? No vayas en contra de la voluntad de estos difuntos- dijo él riendo mientras Taylor estaba con la cara inmóvil debido al miedo.-Venga, sentémonos a hablar.

Ella temblorosa asintió y se sentó, miró a Jason a los ojos y ella pudo notar que sus pupilas eran rojas como la sangre y por extraña razón la hicieron entrar en calma.

-¿De qué quieres hablar, Jason?- dijo ella tranquilamente, tomando un poco de su lata.

-¿Sabías mi nombre?- preguntó él, confundido pero admirado.

-Sé más de lo que crees, Volk- dijo riendo ella maliciosamente, prendiendo otro cigarrillo- El olor a demonio es inconfundible y más si es de alguien como tú.

Hubo un largo silencio entre ambos, Taylor solo miraba como él no podía digerir lo que estaba oyendo y que haría con ese descubrimiento.

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Hola mis lectores y lectoras, perdonen la tardanza pero he tenido que hacer huecos en la agenda para poder escribirles. Espero gusten de este capítulo y si quieren un saludo en el próximo saludo solo dejen sus comentarios y yo los mencionaré con muchos agradecimientos en el siguiente capítulo ya que esto no sería posible sin ustedes.

Antes de irme quiero agradecer a:   

<3 nohemiy

<3 dianaR779

<3 Paolaagueda

<3 esmeuzumaki

<3 Sol16Horan

Por apoyar a esta novela, en serio se los agradezco ya que repito que sin su apoyo esto no sería posible, les doy mi mas profundo agradecimiento 

MaggotBronie






No te sueltes y confía en mí, estás en el infiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora