Cuando El Sol Se Va

4. Amame.

Me lenvate y salí al balcón. No tenía camisa pues en la madrugada me la quite porque no podía dormir. El aire corría fresco, todo se veía húmedo.

•Narra Wendy.

Desperte y lo primero que vi, fue a Edén en el balcón, no llevaba camisa y se veía tan sexy. Sonrei ante mi pensamiento morboso. Me estire el la cama y logro salir un pequeño quejido de mi garganta. Edén giró enseguida y se aserco a mí.

Edén: buenos días princesa. Que tal dormiste- se recosto de nuevo y junto a mi.

Yo: bien, este colchón es muy suave.

Eden: a la hora que me digas nos podemos ir.

Yo: claro.

Edén: tienes hambre.

Yo: no, deja voy a cambiarme para que nos vayamos.

Salí asia la habitación de junto por mis cosas. Entré al baño y me puse mi vestido, lave mí cara y sali a buscar mis zapatos. Eden tocó la puerta y yo salí para de una vez irnos a mi casa.

En el camino hablamos mil cosas, del clima o alguna cancion que pasaba en la radio, de mis clases o de su trabajo. El viaje no demoró y en unas horas llegamos. Estaciono su carro fuera de mi casa. Los dos bajamos del coche y entramos a mí departamento.

Yo: Mahyrani ya llegue - cerrando la puerta- que tonta, ella debe de estar trabajando. Pero sientate,quieres comer algo?.

Edén: no gracias princesa.

Yo: ha no, te are algo de comer y nada de pretextos.

El sólo me sonrió, y yo entre a la cocina y le estaba preparando unas enchiladas cuando lo escuchó detrás de mi.

Edén: en que te puedo ayudar? - enpujandose las mángas asia los codos.

Yo: sabes cocinar?

Edén: soy un experto.

Yo: ok rebana una poca de lechuga- se la enseñe. El enpeso a rebanar y lo asía muy bien.

Edén: listo, la pongo a desinfectar.

Yo: si.

Término de aser lo que asía. Me abrazo por detrás y me dio un beso en la mejilla.

Eden: huele delicioso- oírlo hablar serca de mi oreja asia que mi cuerpo se erizara por completo- pasa algo, te siento tensa?

Yo: no nada - obvio no le diría nada de lo que provoca en mí.

Eden: bueno, ire a sentarme- lo jalo de la camisa y lo beso.

Yo: aora ya vete a sentar.

Preparé las enchiladas y nos sentamos a comer. Yo le daba de comer en la boca al igual que el a mi. Terminamos de comer y levanté los platos para llevarlos al lavabo.

Eden: té ayudó en algo- me decía mientras yo guardaba algunas cosas en el refrigerador.

Yo: sólo que laves los platos.

Edén: ok.

Comenzó a lavarlos mientras yo terminaba de meter las cosas al refrigerador. Me acerque y lo abrase por detras. Obio yo no le llegaba a la oreja pero logré sentir su tencion.

Yo: un hombre que lava los platos enamora...

Edén: Crees?

Yo: claro, eres el nombre perfecto- el pone el último plato en el escurridor y se seca las manos y gira para mirarme.

Eden: Y tú eres única- nos basámos, yo jugaba con sus cabellos. El beso se torno apasionado, el me pegaba mas a su cuerpo y yo ya no podía contener las ganas de fundirnos en uno sólo.