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Capítulo 30

DISCULPAS A TODOS !!!!!! ESPERO QUE LES GUSTE, SE ACERCA EL FINAL.

Busco desesperada en mi armario alguna prenda que cubra mi cuerpo, no soy demasiado ciega para no darme cuenta de que he estoy cogiendo peso, miro vestidos sueltos, camisas, de todo, mi habitación está convertida en un semivertedero. Son las nueve en punto, he quedado a y media con Carla, y como siga a este paso, ni treinta minutos serán suficientes para mí. Decido pasar de la ropa y me siento en el tocador, me maquillo naturalmente sin usar tonos exagerados, uso tonos suaves, de color piel, perfecta. Al final me decanto por un pantalón ancho negro de tubo y una camisa extragrande que no me apriete. Me dirijo al espejo y veo que:

- Bueno, así no se nota.- le digo a mi reflejo, me ha vuelto a crecer el pelo y ya puedo notar cierta inflamación en mis mofletes, definitivamente estoy engordando, sonrío y niego con la cabeza, me cuelgo a los hombros mi chaqueta negra con estilo clásico de smokin, recojo mi maletín de la cama y bajo las escaleras, tengo que continuar con mi vida.

Ya abajo termino de prepararme un batido de proteínas y me siento en la silla alta alrededor de la isla de mi cocina, sólo oigo unas gotas del grifo caer directas, parece que no lo cerré correctamente, voy y lo aprieto un poco más, se abre la puerta de mi casa.

- ¡Molly!.- exclamo y voy directa hacia ella, cómo la he echado de menos.

- Elizabeth.- me dice en respuesta a mi saludo, le doy un intenso abrazo.- ¿Cómo estás Elizabeth?

Me doy la vuelta y evado su mirada, me conoce bien y sabrá que no estoy nada, nada, bien.

- No puedo quejarme Molly, intento vivir al son de la vida y del destino.- vuelvo a coger mi batido.

- No me gusta esa respuesta Elizabeth, noto algo raro en tu voz, tristeza...

- Estoy bien Molly.- le interrumpo, me llevo las manos al vientre.- Estoy más que bien.- ella se lleva manos a la boca y deja escapar un sollozo.- sí, sí, Molly, tenías razón, estoy embarazada.- digo emocionada. Me vuelve a abrazar, creo que no tiene palabras, sonrío, pero el llanto de emoción se está acercando, Dios otra vez no, me he vuelto muy sensible desde que me quedé en este estado.

- Felicidades, lo sabía, lo sabía, ahora tu vida cambiará rotundamente, alguien depende ya de ti, ese bebé será para siempre parte de tu vida, madre de Dios, gracias, gracias, ¿Sabes qué es lo mejor? Que es fruto de un amor sincero, me imagino cómo estará el señor Shane.- intento que esas palabras no me afecten en lo más mínimo, ni que cambie mi cara para nada.

- Lo, lo, estamos.- tartamudeo, intentando mantener la calma.- él está muy feliz, ni te lo imaginas Molly, ni te lo imaginas.- repito distraída y en voz baja.

- Ser madre es la mejor bendición que puede tener una mujer Elizabeth, y estoy segura de que seréis los mejores padres.

La miro con detenimiento y rezo por no morirme del dolor ahí mismo. Antes de que pueda responder la voz de Alfred nos interrumpe:

- Señorita Carter, su coche.

- Gracias Alfred, enseguida bajo.- cuelgo el teléfono otra vez y dedico a Molly una mirada dulce.- Muchas gracias Molly, nos vemos mañana.

- Prométeme que te alimentarás mejor Elizabeth, prométeme que al llegar, lo primero que harás será desayunar, por favor.- pongo mis ojos en blanco pero sonrío porque sé que tiene razón.

- Te lo prometo.- ella asiente no muy convencida pero al final me deja ir. ..........................................................................................................................................................................