Tentación Prohibida.

Capítulo 1.

CAPITULO 1.

Hace demasiado frío en la calle y ya empieza a llover, mis tacones resuenan por la solitaria calle de Nueva York. Es mi primer día de trabajo en "Larousse", el club nocturno más famoso de Brooklyn, y también el más caro. Ciertamente tengo miedo, nunca he trabajado como camarera para este tipo de clientela, los que suelen ser hombres ricos y poderosos, por lo que no sé si podré hacerlo y si estaré a la altura. Mi cabeza intenta cambiar estos pensamientos negativos por algunos otros un tanto más positivos cuando escucho algunos gritos provenientes de algún callejón cercano. Me acerco sigilosamente y puedo ver como un chico bastante alto acorrala a una chica en la esquina de este frío y oscuro callejón.

-No puedes hacerme esto Alexandra- Grita él.

-Si, si puedo, por que le quiero, ¿ Quien te crees tú para manejar mi vida?- Dice esta vez ella, pero ella no grita, solo llora.

-¿Tanto le quieres?- Pregunta él. y ella solo si limita a afirmar con la cabeza. Ahora tampoco grita el, parece triste. Parece que el la quiere demasiado, su tono de voz flaquea y por instante parece que se va a echar a llorar el también. Pasa su mano derecha por su pelo dejándolo despeinado, acaricia la mejilla de la chica y deposita un beso suave en los labios de esta. Ella llora aún más fuerte y le abraza.

-Lo siento- Dice ella, y el la abraza aún más fuerte.

-Yo solo quiero que seas feliz, conmigo nunca lo hubieses sido,lo comprendo, no lo sientas Alexandra. -Dice él a la vez que deja de abrazarla y se da media vuelta. Ella intenta decirle algo pero no le salen las palabras, se seca las lágrimas con la mano, pone una mano en su hombro y el se aparta bruscamente.

-Vete Alexandra, no lo hagas más difícil.- Dice.

- Recuerda que aún seguiré trabajando en Larousse- Dice ella mientras se pone delante de él pero dándole la espalda.

-Lo sé, de ahora en adelante no iré a verte a ti, iré únicamente por diversión.- Dice él, su voz ahora se ha vuelto fría y ya no le flaquea, es más fuerte que nunca.

-Adiós Kyle.

-Adiós Alexandra.

Corro y me oculto tras varios coches para que no puedan verme. ¿Que había sido eso? No podía evitar sentirme triste por lo que acababa de presenciar, se notaba que entre ellos había habido bastante amor, ¿Porque habían acabado con el? y ella, ¿Trabajaba en Larousse? ¿Ibamos a ser compañeras de trabajo? Eran demasiadas las preguntas que se formulaban en mi cabeza. De pronto miro el reloj, las 23:56, echo a correr y consigo llegar a la puerta de Larousse a las 00:02. En la puerta se encuentra un hombre bastante alto y musculoso, vestido con un impecable traje negro y con una especie de auricular en su oído. Doy por echo que debe ser el portero de este club nocturno tan famoso.

-Hola, buenas noches, soy Nicole, la nueva camarera.-Digo intentando sonar simpática y poniendo mi mejor voz.

-Bienvenida Señorita Nicole, sea tan amable de acompañarme por favor.-Dice él mientras me da paso para que vaya yo delante.