Siempre Siempre |Ziall Horalik|

xxCapítulo 12xx

°Narra Liam°

El sonido de unos pequeños golpes en la puerta me despertó.

-¿Liam?- La angelical voz de mi madre resonó en mi habitación

-¿Mmh?

-Liam, que paso. Acabo de ver a Sophia salir de casa llorando. ¿Acaso pelearon?

-Ay mamá creo que mandé todo al demonio.- El llanto no tardaba en llegar.

-¿Qué paso? ¿Quieres contarme?- Mi madre se sentó a una orilla de la cama para poder estar más cerca mío mientras tocaba mi mejilla.

-Tuve una conversación con Sophia y no termino nada bien.

-¿Acaso pelearon y no quieres decírmelo?

-No. No es eso. Bueno al final si peleamos, pero la conversación no fue una pelea. Más bien yo le estaba contando un problema que acababa de tener. Ella me estaba consolando y...y...y

-¿Quieres contarme el problema que has tenido?

Asentí con la cabeza y comencé.- Hace mucho tiempo, antes de conocer a Sophia, estaba enamorado de alguien más. Esa persona no sentía lo mismo por mi entonces decidí olvidarla y en ese momento como un ángel mandado por Dios, apareció Sophia en mi vida. Yo comencé una relación con ella. Todo era feliz, hasta que aquella persona apareció nuevamente en mi vida.- Obviamente no iba a contarle la historia verdadera. No sabía cómo reaccionaría.- Puso mi mundo de cabeza nuevamente. Le dije a Sophia que ojala esa persona se hubiese fijado en mi hace mucho tiempo y yo sería feliz y...

-Oh por Dios, Liam. ¿Cómo pudiste decir una cosa como esa?- Mi madre se cubrió la boca como su hubiera visto algo asqueroso.

-Lo sé. Entonces Sophia me dijo que si esa persona se hubiese fijado en mí, yo no estaría con ella y que si no era feliz estando juntos, que me fuera con esa persona.

-Liam, creo que estas en problemas.

-Claro que estoy en problemas, y es por eso que me gustaría pedirte ayuda. Tú y papá nunca han superado muchas cosas juntos y quiero que me ayudes a mí ahora. Por favor mamá. No quiero perderla. Ella me ayudo mucho, estuvo cuando más lo necesité, es el gran amor de mi vida.

-Pues. Creo que deberías llamarla. Invitarla a cenar aquí. Pero no ahora, sino un día en que estés solo. Un día en que puedan hablar tranquilos y entenderse. Tú le haces alguna comida de esas que te salen muy deliciosas, disfrutan de la noche y pueden arreglarse.

-¿Enserio?

-Claro, amor. Llámala mañana, porque seguro ahora no va a querer atenderte, y queden en encontrarse el sábado en la noche. Con papá nos iremos a una fiesta así que la casa es toda tuya.- Me dijo mientras depositaba un suave y tierno beso sobre mi frente y sostenía fuertemente mis manos.

-Gracias mamá. Es por esto y tantas cosas más que te amo.

-De nada amor. Ahora duerme que mañana tienes que ir al colegio.

*Al otro día*

-Sophia, por favor. Ya son 3 mensajes que te dejo. Por favor atiéndeme. Quiero que hablemos y poder aclarar las cosas.- Suspire.- Si es que escuchas el mensaje, por favor llámame o escríbeme pero dame alguna señal de que aun quieres aclarar las cosas.- Deje mi celular sobre mi mesita de noche y termine de arreglarme para ir al colegio. Al rato, mi celular sonó. Era un WhatsApp con el sonido que le había elegido para Sophia. Corrí hasta él para verlo.

"-¿Enserio quieres aclarar las cosas? Yo creo que está más que claro que el te haría más feliz que yo."-La voz de Sophia en ese audio sonaba tan apagada. Ella no era así. A ella siempre se la escuchaba alegre. Me siento completamente una basura. Saber que está así por mi causa. Es obvio que quiero aclarar todo y volver a verla sonreír. Volver a verla conmigo. Volver a verla. Volver con ella.