Demonio de fuego

En casa

Primera parte del especial! muchisimas gracias a todos!

Pov Murata

Todo el castillo se encontraba en silencio. Incluso a pleno medio día. No escuchaba las bromas entre los guardias y soldados, los murmullos de las criadas habían cesado e incluso todo estaba en silencio en los laboratorios de Anissina. Lo último resultaba realmente alarmante, era preferible que se dedicara a construir un peligroso invento a que se focalizara demasiado en diseñarlo ¿Quién sabe? Quizá incluso y terminaban resultando...

Era pleno verano en Shin Makoku. El calor resultaba sofocante.

Había llegado a un precioso claro entre los bosques, un poco alejado del castillo, pero el césped parecía recortado y al recostarme descubrí que era realmente cómodo.

Desabroche un par de botones de mi negro uniforme y cerré los ojos.

Solo pasaron unos minutos antes de sentir su presencia.

-sal de detrás de ese árbol-dije

-te conozco demasiado Shinou, deberías cambiar tus tretas. Sabes que no puedes sorprenderm...

Unos labios se habían aplastado contra los míos. La suave presión duro unos segundos. En cuanto note que desaparecía rodee su cuello con mis manos y lo atraje para un beso más profundo. Su boca sabia a miel, su cabello olía a flores, era endemoniadamente perfecto.

-me subestimas mi gran sabio-señalo en cuanto lo libere de mi abrazo- siempre puedo sorprenderte.

-¿no crees que ya has jugado suficiente? Von Bielefeld está causando un gran alboroto por tu culpa

Me miro con fingida expresión de horror-¿crees que estoy jugando con ellos? ¿Con el gran y severo von Grantz y el terco von Bielefeld?

-si –afirme- y no te olvides de Yuuri.

-pues te equivocas-dijo obsequiándome otro beso

-es igual a cuando hiciste esa cosa con el espejo...

-oye! Ahora no estoy poseyendo a nadie! – dijo medio enfadado.

Carraspee y reacomode mis gafas-y tampoco andas robándole besos a la gente pero...

-celoso?-pregunto, interrumpiéndome otra vez

-puedes dejar de interrumpirme? No me has informado de tus planes con ellos, creía que era tu juego y que en algún punto todos recobrarían su cordura y se disolvería este lio. Y ahora vienes a decirme que no estás metido en esto!-le solté, estaba comenzando a perder la paciencia, y valla que era difícil hacerme enfadar.

Shinou rodo en el césped para quedar viéndome de lado. Parecía un bobo mirándome con la boca entre abierta y los ojos grandes por la sorpresa. No pude reprimir una sonrisa, lo que fue un error porque ese rubio arrogante se recompuso de inmediato.

-¿pero yo creía que tu siempre entendías mis planes?

-pues creíste mal- afirme- solo te sigo la corriente, intento no perderte la pista y luego enderezo lo que torciste

Shinou hizo una mueca disgustado.

-venga, no te enfades...

Me cruce de brazos.

Shinou suspiro derrotado.

-bien, tienes algo de razón –admitió- al igual que esa vez con el espejo del futuro, solo les di un poquito de confianza –dijo, mientras juntaba su dedo índice y pulgar – es lo que ambos querían, solos no se atrevían.