Poderes

413 35 9
                                    

@@nyanperonayaoiesca Gracias por acompañarme mientras se desarrolla esta historia, gran parte es porque me has animado a seguirla aun cuando no veía mucho la luz. Infinitas gracias para ti.


Pov Wólfram

Estaba siendo egoísta. Ambos éramos tan egoístas como siempre. Ahí estaba el, egoístamente besándome, y yo en mi propio egoísmo le correspondí ese beso.

Podía ver que las cosas que me decían de verdad él las creía, y que por fin ahora sentía algo por mi y se estaba esforzando por recuperarme. Pero al final, aun después de escuchar por fin ese "te amo" salir de sus labios, supe que era demasiado tarde, ahora podía aceptar definitivamente que todos mis sentimientos por el habían acabado.

Entonces toda la dulzura de sus ojos se esfumo, reemplazándola por esa frialdad y locura a la que ya me había acostumbrado. Aunque en ocasiones lograba ver al mismo patoso Yuuri del que me había enamorado, ahora era más que nada la esencia del Maou la que lo consumía por completo.

-me amaras otra vez-afirmo levantándose

-tú sabes a quien corresponden mis sentimientos ahora-musite

-Adalbert?-se burlo- puedes pasar tu vida aquí esperándolo, o volver a Shin Makoku y casarte conmigo como estaba planeado, como debe ser.

Lo mire un poco aturdido y me levante también, para mirarlo directo a sus oscuros ojos.

-me estas amenazando?

Se encogió de hombros y sonrió burlonamente.

-tómalo como quieras, tarde o temprano vas a regresar a mi por voluntad propia.

Este pequeño imbécil no podía estar hablando enserio. Lo mire con odio y asco.

-no puedes hacer eso!-le grite- nunca regresare contigo Yuuri, se acabo, entiéndelo.

Alzo una mano y la acerco a mi mejilla, la aparte de un manotazo antes de que pudiera alcanzarme. Entonces tomo mi brazo en el aire sujetándola con fuerza y me empujo hacia él.

-cuanto más te resistas, será peor.-aseguro, su fiera mirada flaqueo otra vez-por favor Wolf, no nos hagas esto.

Yo no estaba haciendo nada, no iba a quedar como el malo en esta historia.

Me zafe de su agarre con un tirón brusco y me di meda vuelta, dándole la espalda, no podía ver otra vez su rostro. No le respondería a eso tampoco. Simplemente todo empeoraría.

Supe cuando se fue, dejándome otra vez solo al lado del lago, preguntándome si algún tipo de magia se apiadaría de mí y me regresaría a mi tierra. Nada paso, y derrotado me dirigí de regreso a la gran mansión de Bob.

/

Una vez de regreso en la casa encontré un salón alejado y me deje caer en uno de los cómodos sofás del lugar. Supongo que en algún punto mis pensamientos se detuvieron, dándole a mi cerebro una tregua y me adormecí.

Horas más tarde fui despertado por un leve zarandeo en mi cuerpo.

-Hey. Estas bien?-escuche a alguien preguntar. Me tomo un momento darme cuenta que la persona me estaba preguntando a mí.

-eh, si-dije, mi voz saliendo temblorosa, sorprendido lleve mis manos a mi boca para cubrirla.

-he, no pasa nada- la persona era amable, aunque parecía un poco incomoda, me incorpore un poco para espabilarme y ver quién era.

Demonio de fuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora