Mi estúpido jefe

Sorpresas

Narrado por Axel

¿Como es que alguna vez estuve a punto de casarme con esta mujer? ¿como pude haber sentido algo por Griselda? en cambio ahora la miro y lo único que me causa es pena, lastima. Toda mujer se da su lugar, su respeto y ella cae tan bajo solo por querer recuperar algo que simplemente no volverá, algo que ella misma deshecho y que no estoy dispuesto a entregárselo de nuevo, porque simplemente no lo siento.

Llegamos a la casa y entro dispuesto a tener una charla con mi hermana.

- ¡Leslie! - grito en cuanto abro la puerta - ¡Leslie! - Griselda entra detrás de mi y se queda ahí parada, escucho los pasos de Leslie bajar las escaleras y no tardo en ver su pijama rosada de Mickie Mouse y su pelo rubio amarrado en un moño, sus ojos verdes me miran algo avergonzada y ya sabe a que vine.

- hola Axel - me dice mirando a todos lados menos a mi.

- estás en serios problemas jovencita - Griselda suspira detrás de mi - ¿ por que lo hiciste? - digo enojado, decepcionado, Leslie nunca me había mentido antes.

- yo le pedí que lo hiciera Axel - me doy la vuelta para mirarla y ponerle un fin a todos los problemas que me ha causado en tan poco tiempo - discúlpame por involucrar a tu hermana en todo esto pero es que me desespere y ... simplemente lo hice y ya.

- Griselda te voy a pedir algo y espero que esta sea la última vez que te lo repita - me mira con ojos llorosos - ya basta de esto, lo mejor es que te vayas, si sigues aquí lo único que conseguirás es sufrir más, acéptalo de una vez por todas.

- es por ella ¿verdad? - las lagrimas recorren sus mejillas, se que mi respuesta la va destrozar pero es la verdad, la cruda verdad, y debe aceptarlo tal y como yo lo acepte. Le asiento y bajo la cabeza para soltar un fuerte suspiro.

- si, es por ella - al escuchar esas palabras niega con la cabeza y empieza a llorar desconsoladamente, sube las escaleras corriendo y escucho la encerrarse de un portazo en el cuarto de huéspedes.

- lo siento Axel, no sabía que tenías novia, solo quería ayudar - uf, cuanto daría porque Sonya fuera mi novia.

- no es mi novia - digo

- ¿y entonces? - me mira esperando una respuesta.

- digamos que es un chica algo difícil, complicada, diferente, hermosa y única. Tiene tantas cosas que me atraen.

- creo que estas enamorado.

¡¡¿que??!! No

- que cosas dices, Leslie - digo tratando de sonar indiferente, Sonya es atractiva pero eso de enamorarme, no lo creo. No definitivamente no.

- si que lo estas, a ver cuéntame ¿ porque no lo has intentado con ella?

- es muy sangrona - digo y empiezo a recordar las discusiones que hemos tenido, me toco la mejilla recordando la cachetada que me dio, que mujer mas intensa - ademas ahora mas que nunca piensa que Griselda y yo seguimos juntos - digo resignado - hace un rato nos encontramos con ella y pensó que estábamos en una 'cita' - digo enfatizando la palabra cita.

- lo siento, supongo que también es mi culpa - dice arrepentida.

- no es tu culpa, no te preocupes - mi celular suena y lo busco en mi bolsillo, miro la pantalla y es un número desconocido tomo la llamada.

Narrado por Leslie

Dejo a mi hermano atender su llamada mientras voy a la cocina por un vaso de leche, me alegro de que le guste alguien aunque me acostumbre a ver a Griselda, pero ella me mintió al decirme que Axel tenía planes de volver con ella y que tal vez solo faltaba ese paso para que regresaran. Jamás pensé que esto incomodaría a mi hermano, abro la puerta del refrigerador y veo un plato de fresas con una nota en ella, Leandro.