Hoy jueves, he estado reflexionando sobre mí, sobre mi persona. He pensado en mi presente, y en mi futuro no muy lejano. He investigado por instagram y tras ver las cuentas de innumerables famosos, me he dado cuenta de que al fin y al cabo son humanos al igual que yo. He decidido que no me voy a amargar por quedarme sabados sin salir, o por no contentarme con mi cuerpo, porque la vida es una, y la gente la está aprovechando, ya es hora de que comience a aprovechar yo la mía.
Tras esa reflexión en el autobús de vuelta a casa, escribo a Bruno:
- ¿Corres?
- Si es contigo sí.
Me sonrojo al leer su respuesta. Es tan mono. Me cambio corriendo de ropa y nos miramos por la ventana. Me regojo el pelo en una coleta y salgo por la puerta.
- Que sepas que hoy vengo motivada.
- Peligro...
Sonrie y nos damos un cálido beso. Comenzamos a correr y nos recorremos el precioso paseo que da al mar. Cuando llegamos a los 30 minutos, paramos en una campa rodeada de árboles inmensos. Nos tumbamos bocarriba en la hierba mirando al despejado cielo.
- ¿Qué haces este sábado?
Su pregunta me pilla por sorpresa.
- ¿A que se debe ese interés? ¿Me vas a pedir una cita?
- Mi padre estrena su galería de arte y me obliga a ir. Basta con que solo vaya unos minutos al comienzo y luego me escape... Y... me ha dicho que puedo llebar acompañante.- me mira con mirada cómplice- luego... si a esa acompañante le parece bien, podriamos ir al cine o a la playa...
- ¿Y quien va a ser esa acompañante misteriosa?
- Hombre, pues había pensado en varias candidatas, pero si a ti te hace ilusión...
- Haré un esfuerzo.
Nos miramos fijamente a los ojos. Le abrazo apoyando mi pierna completamente sobre él. Me agarra el muslo y nos volvemos a besar. Sus besos y su forma de agarrarme me llenan de placer, me siento en una nube. Asciende su mano hasta mis gluteos y me besa mas pasionalmente. Noto su miembro erecto sobre el mío, pero teníamos un trato.
- Esto... no esta... bien.
- ¿Por qué?- me pregunta sin dejar de besarme.
- Esto... es un lugar... público- respondo mientras recorre mi cuello con sus besos- nuestros padres... podrían pasar por aquí en cualquier instante...
- ¿No te gusta... correr riesgos?
- No si son tan arriesgados- le miro y nos sonreimos.
Nos levantamos de la campa y Bruno comienza a correr.
- ¡Quien llegue antes gana!
- ¿A sí?- comienzo a seguirle- ¿Y qué gana?
- Eso ya lo veremos...- contesta sonriendo.
Corremos durante 10 minutos hasta llegar al acantilado. Bruno desciende su velocidad con el fín de dejarme ganar.
- ¡Gané!
- No se como ha podido ser...- responde con tono irónico- te he machacado y lo sabes.
- ¡Eso nunca!- corro hacia él y me subo a su espalda haciéndole cosquillas.
- Te crees que puedes conmigo ehh...- instantaneamente me coge de la espalda y me agarra haciéndome cosquillas en la tripa.
- ¡Vale vale! ¡ Has ganado, has ganado!
- No me vale eso.
- ¡Bruno eres y siempre serás el ganador!
- Ha sonado muy falso...- canturrea a su vez que incrementa las cosquillas.
- ¡Vale! ¡Bruno eres super bueno en todo y conmigo y TE QUIERO!- grito con el fín de que acabe ya esa martilia.
Me deja cuidadosamente en el suelo y nos sentamos en un banco que da las vistas al mar.
- Me... quieres- me mira fijamente a los ojos.
- ¿Te sorprende?
- No... es solo...- mira hacia el suelo- nadie me lo había dicho antes.
- Seguro que tus padres te lo dijeron alguna vez...
- Ya... me hubiera gustado oirles.
- ¿Nunca te lo dijeron?
- Cuando yo era mas pequeño mis padres viajaban diariamente a diferentes partes del mundo por temas laborales, así que yo vivía con mi tía.
- ¿Y ahora que vives con ellos?
- Mis padres nunca han sido personas con facilidad para expresar sus sentimientos... ni siquiera conmigo.
Le abrazo por un lado apoyando mi cabeza en su hombro.
- Cata...- hace una breve pausa- creo que yo también te quiero.
Me adormizo abrazada a él durante unos minutos. Se escuchaba la música procedente de mi móvil y la brisa del mar nos golpeaba fragilmente en la cara.
- Debo irme.
- No te dejo.
- Mi profesora de ballet me va a echar la bronca si llego tarde.
- Yo hablaré con ella.
-¿Tú?- suelto una carcajada.
- Yo soy un macho alfa, soy un encantador de mujeres.
- Ya... esque a ella no se la denomina como una mujer...
- ¿Entonces que es? ¿Un alien?
- Sí.
- ¿Y como es eso posible?
- Tu charla 1 solo minuto con ella y te darás cuenta.
Continuamos con la estúpida charla por el camino de vuelta a casa. Ya eran las 7:30 y estaba oscuro. Vamos andando cogidos de la mano y noto como varias miradas por el camino se fijan en nosotros.
Llegamos a nuestra calle y nos despedimos con un beso. Entro en casa y saludo. Me visto corriendo y salgo de casa. Conecto mis auriculares y suena mi tema preferido de Adele "Hello". Camino rápida mirando al frente cuando al cruzar la esquina me encuentro con alguien:
- ¡Cata! Que raro tu por aquí- saluda irónico.
- ¡Marco! ¿Es que acaso me sigues?- rie.
- Oye...- dice un poco tímido- tengo dos entradas para el basket este sábado... se lo iba a pedir a un colega pero me apetecía...
- Lo... lo siento- le interrumpo- tengo planes para el sabado.
- Ahh... bueno... no pasa nada solo...- hace una breve pausa y coje aire- solo quería conocerte mejor.
- A mi también me hubiera gustado pero no puedo cancelarlo.
- ¿Y de que tratan esos planes tan importantes que no puedes cancelar?- pregunta divertido.
- Pues la verdad...- me daba pena responder lo que iba a responder, pero debía hacerlo- mi novio me ha invitado a un evento.
- Tu... novio...- confirma cortado.
- S...sí, veo que te sorprende.
- Ya solo... no sabía que tubieras novio.
- Bueno... no sé si se le puede llamar novio... pero sí.
- Vale no importa... pues... pasadlo bien- se despide algo decepcionado.
- Adiós- me despido fria.
No me gustó decepcionarle así, pero ¿qué podía hacer? De todas maneras se iba a enterar de alguna forma u otra.
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Diario de Cata- sexo y otras drogas
Teen FictionCatalina es una chica de 15 años que lo ha pasado muy mal en su vida. Ha tenido una infancia feliz, pero le esta costando superar la adolescencia debido a unos cuantos baches. Cuando estaba convencida de que su vida no podia estar mas hundida, apare...