capitulo 16 ( castigada)

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Justin entra a la recamara con una charola en las manos, ya tiene puesto los jeans pero sigue sin camisa. Se ve tan... ¡sexy!

-Mmmm, eso huele delicioso- comento cuando Justin acomoda la charola frente a mí.

-Qué bueno que te guste- dice contento sentándose conmigo en la cama.

-Por cierto ¿Cómo sabias que eran mis favoritos?- pregunto mientras observo que comeré primero. Dios. Juego de naranja recién exprimida, hot cakes con mermelada de moras, gelatinas de mosaicos, ensalada de frutas... por Dios.

-¿Mande?- pregunta con voz ronca.

-Eso... ¿Cómo sabias cual era mi desayuno favorito?- vuelvo a preguntar pero esta vez mas curiosa, lo miro directo a los ojos.

-No lo sabía- dice después de pensar un poco la respuesta.

-Si lo sabías- insisto- lo dijiste.

-Te lo tomas todo a pecho- comenta tratando de evadirme- ven desayunemos, esto se ve delicioso- dice y le hago caso. No tiene sentido seguir con eso, probablemente solo adivino o fue una expresión. Por un momento llegue a pensar que le importaba realmente... que tal vez yo fui o soy centro de su atención pero dah, ¿Qué más da? El nunca me vera como nada más que sexo y yo...

-¿Crees que tu mamá se enoje porque no llegaste a dormir?- pregunta Justin sacándome de mis pensamientos mientras mastica un bocado de hot cakes. Mierda. Casi me atraganto con el pedazo de fruta que tenía en la boca.

-¡MAMÁ!- me exalto- ¿Por qué no me recordaste antes? ¡Me va a matar! - digo y comienzo a levantarme. Tomo mi ropa interior y me la pongo rápidamente.

-Detente- dice Justin sorprendido-Vamos, quédate, un ratito mas- dice Justin mientras se levanta de la cama y se dirige hacia mí.

-No puedo, no entiendes, desaparecí para este momento Kevin ya debe de...-me corta.

-Kevin... ¿osea que todo es por él?-pregunta Justin fulminándome con la mirada.

-No, no es eso... Justin... - le digo pero son las únicas palabras que salen de mi boca.

-Vamos, de todas maneras no llegaste a dormir y que te quedes un rato mas no cambiara eso, quédate conmigo, no quiero volver a la realidad, a mi realidad donde tú no estás en ella- dice Justin y se acerca rodeándome la cintura con sus manos y comenzándome a besar lentamente.

-¿Has hecho el amor en un jacuzzi?- le pregunto a Justin de forma coqueta. El me sigue besando y entra besos me contesta.

-No, pero siempre hay una primera vez para todo- contesta.

-Entonces mañana en este hotel- le propongo.

-No, mañana no, ahora mismo- dice y comienza a besarme el cuello. No puedo evitarlo y gimo.

-Ah, me encantaría pero quiero tener la garantía de que me volverás a ver, de que volveremos a estar juntos- le digo sin darme cuenta si quiera de lo que eso significa.

-Es un trato- contesta y sigue besándome, recorriéndome el cuerpo con pequeños besos húmedos.

***

-¿Dónde estabas?- pregunta mamá cuando entro a casa todavía con el vestido de la noche anterior puesto.

-Ah, tuve un... am, problema, puedo explicarlo- le digo a mamá que se encuentra sumamente molesta delante de mí.

-Pues entonces explícaselo a Kevin que se quedo TODA la noche preocupado esperándote- dice mamá y Kevin sale de la cocina con una taza de café y unas grandes ojeras debajo de sus ojos. Dios.

-Kevin...- susurro.

-¿Y entonces?- pregunta el.

-Lo que pasa es que... bueno... olvide comprar unos aretes. ¡Sí! Unos aretes entonces tuve que salir y...- comienzo a mentir pero me quedo estancada. No sirvo para esto, o no de la manera que me gustaría.

-Estas castigada- dice mamá- Y olvida lo de ser tutora de Jazzy, creo que lo del trabajo no funciona para ti- dice mamá dirigiéndose a la cocina muy enojada.

-Mamá tú no puedes impedirme trabajar en la casa de los Bieber, además necesitamos el dinero...- me quejo frustrada. ¡No! Eso me impedirá verme con Justin y yo no podría.

-No, no lo necesitan. Me tienen a mi ___(tn)___- dice Kevin de manera cortante y toma su abrigo y las llaves de su coche- Estaré en casa despidiendo a los invitados de ayer, espero hayas tenido una buena noche- contesta y sale de la casa. La fiesta en nuestro honor y todas esas personas que fueron para conocerme, lo deje en vergüenza, a él y a su familia entera.

-Por cierto, estas castigada- agrega mamá desde la cocina cuando Kevin cierra la puerta tras él.

***

Llega la noche y estoy en mi habitación aburrida, esto es un asco. No puedo salir por el castigo, no puedo hablar por teléfono, no tengo internet, solo mi celular que no cuenta son saldo en estos momentos. Si tan solo tuviera Wi-fi... ¡Justin! El siempre tiene su red de Wi-fi abierta. Me conecto. Pero ¿Cuál será la clave? Comienzo intentando con su nombre, su apellido, su edad, el nombre de la calle y muchas cosas más... Maldita sea. ¿Por qué tiene que ser tan difícil? ¿Qué podría ser? Duh, jamás me voy a conectar a esta red así...

INGRESE CONTRASEÑA:

___(tn)____

CONECTANDO... CONECTADO.

¡Sí! Adivine la contraseña. Comienzo a bailar de emoción alrededor de mi habitación.

-Dios. ¿La contraseña de Justin es mi nombre?- quedo petrificada.

***

*Iniciando video llamada a través de Skype*

-Hola preciosa- saluda Justin a través de la cámara.

-Hola- contesto sumamente contenta-¡Me estoy robando tu Wi-fi!- le presumo victoriosa.

-Pero tiene contraseña y la única manera de que...- Sonrió triunfante y el se sonroja levemente.

-¿Cómo te fue?- pregunta rápidamente para evitar el tema del Wi-fi.

-Bien, estoy castigada, ya no puedo ir a tu casa y Ke...- me detengo- Bien.

-¿Por qué ya no puedes venir a mi casa? Tienes que, tienes el pretexto del trabajo con Jazzy, tú eres su tutora. Además tu mamá había dicho que necesitabas el dinero y...- corto a Justin.

-Necesitaba- susurro.

-¿Qué dijiste?- pregunta Justin.

-Nada, nada- evito el tema. Aun recuerdo las palabras de Kevin en mi cabeza. "No, no lo necesitan. Me tienen a mi ___(tn)___-"

-¿Qué?- pregunta Justin curioso.

-Kevin se ofreció a darme ese dinero-susurro apenada. Justin se tensa de inmediato y su sonrisa se convierte en una línea.

-Una vez me masturbe pensando en ti-confieso, me pongo roja, todo con tal de romper la tensión.

-¿Enserio?- pregunta Justin coqueto y su semblante cambia totalmente.

-Ajam- contesto.

-¿Podría ver eso?- pregunta alzando una ceja, por Dios. Es tan sexy.

-Si- respondo algo tímida.

You and meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora