Un viaje con proposito

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Narra Daniel*

Desde que la volvi a ver ahora podia ponerle nombre a mis sueños. Liv, era increible la sensacion abrumadora que me hacia sentir, estuve toda la noche pensando en lo del fin de semana y antes de ese dia tendria que resolver lo de mi sueño. 

Me dirigi a la casa de Montana que teniamos, la cual habia soñado. Esa casa donde pasamos nuestras vacaciones y unas cuantas navidades durante mi niñez. Recorri gran parte del pais para, bueno la mitad la verdad para ir hasta la casa de mis padres y averiguar de una vez por todas lo que habia pasado o si solo fue una alucinacion.

Despues de que aterrizara el avion me dirigi a la "modesta" cabaña y tenia la esperanza de encontrar algo que disipara mis dudas acerca de la muerte de papa. Tal como la recordaba ahi estaba, deshabitada pero seguia de pie, fuerte como un roble decia papa. La cabaña abarcaba gran parte de un terreno a lado de un lago donde podias venir a perderte. Los paisajes eran majestuosos, sin duda fueron mis primeras fotografias plasmadas.

Al entrar me percate del olor a encerrado pero a la vez fue acogedor y miles de recuerdos pasaron por mi cabeza. Dejando tanta puñetero sentimentalismo me aproxime al despacho de papa y rebusque los papeles que se suponia debia encontrar. Despues de un buen rato nada, asi que hice memoria y recorde el retrato de mi madre. Fije mi mirada y me aproxime, lo quite de la pared y no habia nada. Maldita sea porque habria de haber soñado falso me sentia impotente no lograba nada, solo unas cuentas raras en los libros contables necesitaba mas mucho mas. 

A medida que iba intensificandose mis pensamientos podia sentir la fuerza que hacia con mis manos aprentadolas en puños, era tan desesperante no encontrar ni una puta pista. Hice lo mas primitivo y le di un puñetazo a la pared haciendole un agujero.

-ARGGG la puta madre que me pario!!-dolia pero no tanto.

Madre tu que estas en espiritu perdona a este estupido , guapo, carismatico y sensual hijo tuyo, sobre todo sensual.

El agujero no era profundo pero de igual cabia mi mano. Al parecer alguien arreglo la pared en el pasado, seguro fue mi padre. Introduje mi mano y saque una libreta de cuero vieja y un sobre.

Con un carajo estaba tan nervioso que sentia transpiraba hasta por el culo. Tuve que tomar todo mi sentido comun y hacer que mi cuerpo se moviera hasta lograr sentarse. 

Me dispuse abrir el sobre y ver su contenido, saque unas hojas membretadas y unos documentos firmados. Mis ojos no podian creer lo que veia, anonadado abri rapido la libreta aunque batalle con mis dedos torpes solo para corroborar que lo que ahi habia fuera lo que pensaba. 

-La puta madre.......



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