Continuación...

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Narra Liv*

Alessia Cara-Here

Estaba en shock total, no podía creer que Sam fuera primo de la puta mas grande de la escuela. De la zorra que de tanto en tanto hacia mi vida imposible en la escuela. A que claro ahora con estos dos enfrente se portaba como toda una inocente. Si claro ella tiene de inocente lo que yo tengo de virgen...ahh no esperen, si lo soy pero el punto era que era una falsa y quería sacarle los ojos con lo que fuera. Para mi mala suerte Daniel me miraba con complicidad y solo tenia esa tonta sonrisa en su carota que juraría podría enamorar a cualquiera, bueno a mi no, yo estoy con Sam y pues es distinto.

-Vaya parece que te tragaste un pañal sucio, estas bien?-me pregunto Daniel.

-Si claro estoy excelente-lo mire a los ojos y vi como se dilataban.

Por ahí recordé que pasa algo raro con las pupilas. Cuando alguien ve algo que es de su agrado estas se dilatan, pero que carajos ya deja de pensar maldita sea.

-Bueno heme aquí hermosa, tu dirás quieres tomar algo en la cafetería?-me pregunto Sam.

-No sabia que conocías a mi amiga Lin-dijo Chase.

Maldita golfa hasta para mentir eres pendeja y te equivocas en mi nombre.

-Liv, me llamo Liv, Olivia para ti-le dije con un deje de molestia.

-Si primita Liv es mi novia-y se lo soltó así sin mas.

Mi mirada viajo a Daniel que en cuestión de segundos dejo de sonreír y en su cara se podía leer el asombro ante la noticia. Lo vi bajar su cabeza y suspirar con pesadez, pero que le pasa a este. Regrese mi mirada a Sam quien me miraba con cariño y orgullo. Paso su brazo derecho por sobre mi cabeza y me acerco a el en un tierno abrazo. Mi mirada iban de Chase  a Daniel y viceversa, entre que la zorra esta me miraba con asco e hipocresía, Daniel solo asentía a lo que Sam decía, que por segundos ya no podía ni escucharlo, solo miraba a esos ojos tan azules que pensaba que me absorbían y podía jurar que me culpaban de algo y sentí una desdicha en el pecho. 

Pero porque me siento así, de esta manera. Liv reacciona Sam te esta hablando.

..Y que dices vamos?-me dijo emocionado Sam.

-Ah perdón no te escuche-dije con un hilo de voz.

-Que si vamos a la casa de lago de mis padres el próximo  fin, haremos una fogata y así podremos pasar mas tiempo juntos, creo es después del recital bebe, así no tendrás razón alguna para faltar.

-Si claro-dije sin dejar de sostenerle la mirada a Daniel.

Y en eso paso lo impensable.

-Vale yo iré con Daniel -dijo la zorrona.

-Si claro vamos cariño-dijo el forzando una sonrisa en su rostro.

De un momento a otro ellos dos se alejaron dejándome con Sam a solas. Y de pronto mi mente se fue en blanco no sabia como articular palabra, y no dejaba de sentir esa opresión en el pecho. 

-Y de que iba la platica bonita?-me dijo mi "novio".

-Bueno a decir verdad, haz disipado mis dudas-le dije serena.

-Tus dudas?! a que te refieres dime por favor-me dijo preocupado.

-Nada juro era una tontería, te lo aseguro ya confirme lo que quería saber-dije tímida.

-A claro espera, es por lo que dije?, el que eres mi novia, vaya pensé que ibas a cortarme y no querías volver a hablarme nunca mas, pensé que en el beso se me había ido un saborcito a ajo por el pan de la pizzeria y ya me iba a cortar las venas con el celular-dijo graciosamente.

-Ah que estas loco-me reí con sinceridad.

De pronto se acerco y me dijo al oído lo que yo quería escuchar, salvo que en ese momento no sabia si quería que viniera de el o no.

-Eres preciosa, y eres mía-y me beso.

Sus labios sabían a menta y podía sentir que me besaba con cariño a lo cual yo no puse resistencia, es decir sus labios eran suaves y carnosos que me olvide por un momento donde estaba y con quien.

Terminamos el beso y le prometí llamarlo mas tarde. Lo vi alejarse y con el a Daniel también, quien al final me miro con tristeza y no pude hacer mas que darle una media sonrisa. Me di la media vuelta y salí como alma que lleva el diablo, tan solo quería gritar o llorar, meterme un calcetín en la boca y ahogarme, algo lo que fuera.

*****


Había llegado tarde a los ensayos y sabia que seria amonestada severamente a escasa una semana de la presentación, nadie se podía dar el lujo de llegar tarde y mucho menos por un mal de amores, o por estupidez o lo que fuera esto que sentía. Realmente estaba loca de remate, porque por un lado tenia a un gran chico y por el otro tenia a otro que bueno ya ni se si lo tenia o no después de aquella tarde.

Si seguía así seria una mas de las huele culos de Chase, esto debía parar y tenia que ser tajante con mis sentimientos y pensamientos por igual. No puedo enamorarme de dos.

Mordí mi labio pensativamente y me adentre a la clase, tal vez bailar podria ser mi escape.


DE LA NADA AL CIELO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora