DE LA NADA AL CIELO

Hacia el cielo

Hola que tal mis hermosos lectores!! primero que nada una disculpa por no haber subido capitulo de inmediato, créanme he sufrido horrores por el tiempo pero vale he aquí les daré dos, espero que les gusten y sean de su agrado. También otra cosa me encantaría comentaran si hasta el momento les gusta como se va desarrollando todo y también para mencionarles que acelerare un poco la acción lo que pasa es que me desespera no ver drama y necesito hacerlos llorar de ya!! 

También quiero agradecer a las personas que votaron por mi en el concurso de #EntrevistaWatt,  que aun sigue,  gracias por darle a esta historia la oportunidad.

Bueno y por ultimo pero no menos importante , recuerden mi motivación son ustedes sus votos y sus comentarios. 

Les mando un beso y les agradezco sigan aquí.

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Narra Liv*

Echosmith- Cool kids

Aun recordaba el viaje que habíamos hecho a California como si fuera ayer, si claro no habían pasado muchos días pero igual fue mágico. Daniel me había enseñado una casa con la cual me volví loca, no solo por lo hermosa si no porque era una locura a nuestra edad irnos a vivir juntos, no que yo fuera una mojigata pero aun quería realizar mi sueño, tenia metas que cumplir y aunque no nos hacia falta el dinero por ambas partes, para mi era algo muy importante abrirme camino por mi misma y no depender de lo que me diera mama o de lo que me haya dejado mi padre. Daniel estuvo de acuerdo en que esperáramos y queramos mas despacio. El decía que quería que me hiciera a la idea que lo nuestro no es un juego y que de verdad me amaba como para iniciar una vida juntos alejados de todo y de todos. Simplemente me parecía precipitado, aunque no me negué por supuesto. Ese fin de semana fue maravilloso, nos amamos como nunca sobre todo en la recamara principal, en la sala, estrenamos la cocina, el cuarto de lavado y la orilla del lago. Vale que puedo decir, parece que traía toda la energía o era que me extrañaba mucho. Si lo se mucha acción pero ya teníamos días sin vernos  o disfrutar solos, cada que salíamos lo hacíamos acompañados. 

Sentía la urgente necesidad de aclarar las cosas con mi madre, ya que pues desde que se entero que había roto mi relación con Sam, el pequeño brote esquizofrenico que tuvo y luego la felicidad infinita por mi relación con Daniel, pude concluir que ya era hora de presentarlo oficialmente y viajar a Washington para verla. Habia hablado por teléfono hacia unas horas y me dijo que estaba encantada, "hija primera cosa que haces bien, estoy tan contenta por ti". Sus palabras siempre lograban quedarse conmigo y aun no se como es que siempre logro librarme del sermón.

Hacia mitad de semana me había topado un par de veces con Chase, que si en efecto estaba mas redonda e hinchada no era producto de su mente el embarazo. La muy idiota se pavoneaba por aquí y por allá, luciéndose ante todos y por todo el instituto. La habían dado de baja ya que no podía seguir con los cursos. De principio me alegre mucho el no tener que verla, pero cuando venia "de visita" solo era para provocarme. Ya estaba en su segundo trimestre y era mas que evidente que buscaría por cielo, mar y tierra acercarse a mi novio. Lo único que podía hacer era esperar a que naciera el niño , ah porque espera un varoncito. El tiempo es mi único aliado, y mientras tanto mi relación va mas fluida que antes. 

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Era jueves y estaba llena de compromisos escolares pero aun así logre desafanarme de unos cuantos trabajos para salir con Daniel. Esta tarde me llevaría a su departamento ese que visite una vez, donde por primera vez me entregue a el. Me dijo que me tenia una sorpresa así que no podía estar mas ansiosa.

Como no sabia que tenia planeado o si quiera que haría, decidí vestirme casual. Elegí un pantalón de mezclilla color camello con cinturón café, una camisa suelta de puntos y una chaqueta de mezclilla azul clara deslavada con unos botines de piso color café combinando el cinto. No me maquille tanto así que solo fue rimel y un poco de brillo labial igual mi cabello lo deje suelto y rebelde. Me encontraría allá porque el tenia unos asuntos que resolver en la oficina y aunque sonaba un poco estresado dijo que estaría listo para vernos. De pasada le compre en un kiosco cercano una pequeña cadena de plata con un dije tipo militar e hice que grabaran el primer día en que nos vimos junto con nuestros nombres. Aun recuerdo ese día en el pub, creo que desde ahí me enamore de el y sus ojos me acecharon tanto que aun soy presa de ellos. Camine hacia nuestro encuentro ya llegaba quince minutos tarde y no quería que pensara que no iba a ir. 

Por ultimo y ya llegando a la calle del departamento de Daniel me fije en mi celular y me di cuenta que tenia dos llamadas perdidas y tres mensajes de el.

"Donde estas?"

"Vas a venir? necesito me respondas el teléfono"

"Huiste del país y yo no supe?"

Corrí lo mas que pude para llegar, pase por el vestíbulo y subí lo mas rápido que pude. Toque a su puerta y ahí estaba el con su cara de pocos amigos, como si hubiera alguien pisado popo cerca de el y el olor se hubiera quedado impregnado. Agache la cabeza pues me sentía avergonzada pero el me tomo del mentón e hizo que lo viera a la cara. Pense que se enfadaría conmigo, pero a cambio me regalo una de las sonrisas mas hermosas que hubiera visto en toda mi vida. Sentir esa conexión con el me hacia sentir de lo mas especial, era como una energía invisible que solo nos unía y no daba tregua. Mi amor por el era tan paciente y tan fuerte que creo que todas las pruebas que veníamos pasando solo nos fortalecían. Por instinto mis manos fueron a su rostro, ese que tanto me encantaba acariciar. El paso su dedo pulgar por mi labio inferior y ahí en el marco de la puerta nos quedamos hipnotizados o decir idiotizados uno con el otro. Era nuestro momento el cual nada podía romper. Le sostuve la mirada por varios segundos o minutos que se yo, podía ver como se dilataba su pupila y su respiración iba incrementando. Ya me temblaba todo y ni siquiera me había tocado mas que el rostro. No sabia si besarle o abrazarlo, lo único que tenia en mi mente y en mi corazón era el sentimiento puro que nos unía, nos abrazaba y nos hacia uno.

-Llegas tarde.....pero te perdono por que te amo y por que se que me besaras en este momento.-me dijo casi en susurro.

Me pare de puntas y me fui acercando lentamente a el. Al principio ni siquiera respondió al toque ligero de nuestros labios pero después vi que el cerro sus ojos y nos dejamos llevar. Primero fue un beso tierno de disculpa, después se convirtió en oxigeno, era como si al besarnos respiráramos. Que haría yo sin el me preguntaba una y otra vez. No quería sentir inseguridad pero todo era tan bello. Quería saber que pasaba por su mente cuando me veía, quería poder si quiera estar ahí en su corazón para saber si el sentía esto que yo siento también.

Me aferre a el lo mas que pude, me aferre y no me solté de su agarre por que era esencial y vitalicio para mi existencia. Lo escuche gemir contra mi boca y para mi era solo un recordatorio del deseo que el sentía por mi. No solo deseo carnal si no mas bien era un deseo puro de estar junto a mi y amarme. Amarnos. Los labios se me habían entumecido y los sentía hinchados pero no me importo porque al menos lo tenia a el. Al carajo lo demás, toda la mala vibra se quedaba fuera de esa puerta y dentro de ese espacio eramos solo nosotros. Sin dramas, sin embarazos, sin tristeza, sin odio y rencores. Solo los dos.

-Yo quiero que seas la ultima persona con la que hable antes de dormirme Liv....te amo.