Automaticamente salió de encima de mí.
-Vete, vete, entra al baño.. -Le susurré lo más bajo que pude y él hizo lo que le pedí-
* * * *
-Oriana, ¿Estás en casa? -Oí a mi padre desde abajo-
-¡Si, papá!
En menos de 5 segundos ví cómo mi madre abría la puerta de mi dormitorio.
-Oriana tenemos que hablar. A ver, ¿porqué me mientes? -Se sentó a mi lado en la cama-
-¿Qué dices?
-Llamé a la madre de Jenny, me dijo que jamás fuiste a dormir en su casa.
-Yo... es que, fuimos a una fiesta, y...
-No fuiste a casa de Jenny, ¿verdad?
-Si, pero...
-Pero nada. 1 semana más de castigo. Deja de desobedecerme, hija...---
-Pero mamá, yo----
-Tú nada. Ya termínala, Oriana, no sé qué es lo que te sucede, de la nada comienzas a comportarte mal, a faltarme el respeto, a desobedecer, a faltar a la escuela, irte de fiesta cada noche sin avisarme.
-Se me comenzaron a salir las lágrimas- Pero si jamás te falté el respeto, mamá---
-Ya basta, Oriana, no se habla más. -Se levantó y se fue del dormitorio-
-Me limpié las lágrimas rápido y fui hasta el baño a abrirle la puerta a Julian, no quería que me viera llorar como estúpida- Ya puedes salir. -Murmuré con la voz llorosa y abrí la puerta, me dí la vuelta y me pasé la mano por mi cara. Fui hasta mi cama y me recosté con la cara sumergida en la almohada. Julian me siguió detrás y se sentó en la misma silla de antes-
-Oye, Ori, ¿estás bien? -Tocó mi hombro-
-No. -Dije fastidiada y quité su mano bruscamente-
-No llores...---
-Lo interrumpí- No estoy llorando y déjame en paz. Te vienes a hacer el buenito y lo único que haces es generarme problemas, problemas y más problemas.
-Escucha, no fue mi intención---
-Ya sé, sé que no fue tu intención, porque sé perfectamente cuáles son tus intenciones.
-Lo siento.. -Se acercó a mi-
-¡Aléjate de mi! -Le grité frustrada y lo empujé con una mano-
-No decías eso hace 10 minutos.
-Cállate. No sé cómo haces eso. -Me dí la vuelta-
-¿Qué cómo hago qué?
-No sé, es que te acercas a mi... y no sé. Yo no puedo así, vete.
-Se acercó aún más a mi- ¿Así? -Murmuró cerca de mi cara-
-Volví a darme la vuelta- Déjame. -Dije y empujé su cara con mi mano-
-Bien, me iré con Sabrina.
-¿Lo ves? No puedes estar un momento sin una chica a tu lado. Bien, vete con Sabrina.
-Bien. -Se encogió de hombros como si nada pasara y se levantó-
-Le tomé el brazo- Ni se te ocurra bajar así como si nada, están mis padres abajo.
-¿Entonces que quieres que haga?
-Quiero que dejes de molestarme.
-A ti te molesta todo, no estoy haciéndote nada.
-Me molesta tu presencia.
-Entonces me voy, pero cuando digo que me voy me dices que están tus padres abajo solo porque no quieres que me vaya.
-Lo miré extrañada- ¿Te das cuenta que eres un idiota, verdad?
-¿Te das cuenta que tengo razón, entonces?
-¿Razón en qué?
-En todo. -Dijo simple-
-En nada. -Dije fastidiada y me levanté-
-¿A dónde vas?
-A ver si mis padres están. -Dije y salí de la habitación. Bajé las escaleras lento, despacio y silenciosa. Llegué a la sala principal y noté que no estaban ahí, por lo que supuse que estarían en sus oficinas. Volví a subir las escaleras y entré en el cuarto- Puedes bajar -Dije mirándolo y se levantó-
-Caminó hasta mi, me tomó ambas muñecas y me aferró contra la puerta-
-Otra vez no, por favor... -Susurré e intenté girarme pero no pude-
-Bésame como lo hiciste antes. -Murmuró en mi oído-
-Me quedé helada y no supe que decir ni hacer-
-Vamos, preciosa.. deja de hacerte la difícil. -Seguía tomando mis muñecas para no dejarme ir-
-Yo no fui quién te besó. -Logré decir entrecortadamente-
-¿Ah, no? ¿Quién entonces?
-Tú fuiste quién me besó a mi.
-Ambos sabemos que no fue así.
-¿Recuerdas qué fue lo que te dije ayer?
-¿Qué?
-No más besos.
-Acercó su cara haciendo que nuestras narices se toquen- ¿Porqué?
-Suspiré y cerré los ojos- Porque no. -Volví a abrirlos- Ya te he dicho que no. -Dije entrecortadamente-
-Mira cómo te pones. -Sonrió-
-¿Cómo?
-Hablas entrecortadamente, estás nerviosa y sudas. Sé cuando estás nerviosa.
-Tú no sabes nada. -Dije firme- Y antes de que te vayas, me das mi teléfono.
-Sacó mi teléfono de su bolsillo soltando mi muñeca y pasó su mano por mi espalda y guardó mi teléfono en mi bolsillo- ¿Feliz?
-Algo. -Sonreí- Estaría más feliz si me dejaras en paz.
-Posó sus labios en los mios y su lengua pidió acceso en mi boca. No le correspondí el beso e intenté mover mis manos que aún estaban sujetadas por las suyas. Con uno de mis pies pisé uno de los suyos y él mordió mi labio en venganza. Abrí mi boca por la mordida y aprovechó ese momento para que su lengua tenga acceso en mi boca. Sentí cómo sus manos me soltaban y viajaban desde mi cintura hasta mis mejillas y las enredaba en mi cabello. Clavé mis uñas en su cuello y no hizo nada a cambio.
Se separó de mi y pasó una de sus manos levantando mi mandíbula haciendome mirarlo a los ojos.
-No más besos. -Dijo con voz aguda, imitándome-
-Julian---
-¿Te dije que amo cuando dices mi nombre?
-¿Te dije que odio cuando me besas?
-Sabes que no es cierto.
-Julian, tú tienes novia... yo no quiero---
-Deja de hablar de ella, por favor, me harta. -Pasó su otra mano por su cuello- Ori...
-¿Qué quieres?
-Me dejaste una marca. -Tomó mi mano y la pasó por su cuello-
No, no puede ser. No puede ser.
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Una fiesta,un error PT |Orian|
RomanceOriana Sabatini es la chica más popular de la escuela, tiene 16 años, es bonita pero algo engreída. Sus mejores amigas son Jenny, Caro y Lola. Todas están en el grupo de animadoras de la escuela North High, aunque Oriana es la capitana. Sus padres s...