¿Quieres matarme?...Permite que me ría

Cap 10

Salgo de clase. Como siempre, me había parado a hablar con mis queridas amigas de la fiesta del sábado. Bueno en realidad parecíamos gallinitas todas, una habla la otra la pisa, las otras no escuchan y la otra a su bola hablando del modelito.

Si se pudieran poner bocadillos como en los cómics aparecería :

Bla bla bla ..¿si?, ok ..¡ No! … bla,bla, bla ¿como ?

¿En serio ?bla, bla, bla, bla
y ...al final ninguna se ha enterado de cuando a qué hora y como ir a esa dichosa fiesta.
Algunos dirán que es un defecto, otros dirán que es cosa común en las mujeres, aspecto que me parece demasiado machista y otros sin embargo lo verían como algo positivo,  todas descargamos pensamientos, y desahogamos hablando, da igual si a veces se nos escucha o no pero lo importante es hablar y echarlo fuera.

Finalmente dado los últimos acontecimientos por cortesía del innombrable, patético y repelente señor x ...no tenía coche, evidentemente. 
El último autobús de línea escolar ya había pasado por la parada, y solo me quedaba acercarme a la del bus pero el interurbano para poder llegar a casa a una hora razonable.
Quizás no debí de pararme a observar por qué el guaperas de la clase le hacía la rosca a la menos agraciada y luego echarse a reír con sus amigos al marcharse ella. Tal vez no debí perder el tiempo y acercarme a ese grupito y decirle al machote que hiciese el favor de no estar cada dos por tres rascándose sus partes nobles como si no hubiese mañana porque aparte de ser una imagen bastante desagradable estaba empezando a suscitar en mi mente que le picaba por algún motivo que no quiero nombrar.

Si …perdí el autobús porque no me daba la gana de dejar que gente estúpida quisiera estar por encima de la gente normal y corriente siendo ellos siempre el centro de atención.
Así que , en conclusión, había perdido el autobús pero esto había sido por una buena causa.
Ese día teníamos clases prácticas y estas eran por la tarde con lo cual serían las ocho de la tarde  y ya estaba empezando a oscurecer.
La parada del bus, estaba como a un kilómetro más o menos del instituto ...y yo  tenía costumbre de salir a correr, con lo cual un kilómetro no significaba nada para mí normalmente ...peeero, se me ocurrió,  como chica presumida que soy, ponerme ese día cuando me levanté mis súper botines de 10cm de tacón.

En fin, yo no sé en qué estaba pensando el día que los compre, sería porque estaba frustrada tras haber ido al supermercado y no conseguir alcanzar mis galletas favoritas que amablemente los respondedores habían puesto en la última balda de la estantería. Por más que intenté escalar por dicha estantería no llegaba, no soy una persona con estatura demasiado baja pero diablos, era imposible llegar para una persona de estatura normal.
Y diréis que tendrá eso que ver con unas botas o botines …pues una señorita demasiado elegante con unos super taconazos de mínimo 10 cm, se situó a mi lado como quien no quiere la cosa agarró un paquete de mis galletas y las depósito en mi carro de compra enseñándome una radiante sonrisa y omitiendo decir nada para que yo no me sintiese demasiado incomoda. Tengo que decir que se lo agradecí mucho. Quizás con la boquita pequeña pero …agradecida .
Entonces supongo que eso fue lo que impulsó mi compra de botines con  tacón de aguja. ..¿lógico, no?
Bueno, andar con aquello era peor que hacer la procesión descalza de Semana Santa sobre las calles empedradas, Jesús ..¡.como me dolían los pies!. No solía tener costumbre de arreglarme tanto, era más de vaqueros y bambas, pero ese día debí tomar el cacao caducado y mi cerebro arrancó al revés ya en la primera hora de la mañana haciéndome cometer semejante barbaridad.  Pero yo soy terca y cabezota y si yo decía que  llegaba a la parada sin descalzarme y manteniendo mi dignidad, pues yo llegaba. 
En un tramo del trayecto pasé por una pareja de mi misma edad más o menos que se echó a reír al verme andar como un androide de la guerra de las galaxias. Estuve por darme la vuelta y encararlos para decirles un par de cositas bien dichas pero era tarde y no podía empezar a discutir no fuera a ser que también perdiera ese autobús…y además pensándolo fríamente la imagen era digna de echarse unas risas que yo misma me eché.
Estaba cerca ya ... __solo un poco más Vera!.__ pensé para mis adentros a modo de infundirme ánimo en el último sprint antes de llegar a mi meta  ....pero entonces un coche se situó detrás mía, con las luces encendidas alumbrándome, sin pasar de largo, a una velocidad de 20 por hora.