La venganza es dulce (HOT) *Youtubers FanFic* [Editando]

#35. Cumpliendo el trato.

Hi everybody!

¡¡El "Preguntas y Respuestas" lo tenéis al final del cap!! :D

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- No irás - Me asegura.

- ¿Quién eres para prohibírmelo? - Contraataco.

Su mandíbula se tensa y se queda callado. Eso es, no eres nadie para decirme qué hacer. Doy media vuelta y salgo de la habitación abriendo bruscamente la puerta. Bajo las escaleras y voy al jardín.

Una vez fuera, respiro hondo con los ojos cerrados. Exhalo una gran bocanada de aire mientras miro el cielo. Me cuesta creer que hoy haga buen día, el tiempo no acompasa con mi corazón.

Si para salvarla debo entregar mi libertad, lo haré. No me da miedo. Pero antes, debo buscar una manera de llegar hasta el lugar. El muy capullo me obliga a ir prácticamente hasta la otra punta de Madrid.

Sigo con la mirada una nube que vaga solitaria por el extenso cielo. Tengo que encontrar a alguien que me lleve. Rub...¡No! Él no. Estoy segura de que no accedería, y además...temo por él. Mi corazón se estremece solo de pensarlo. No quiero arrastrarlo conmigo.

Entro a la casa y miro la hora en el reloj de pared. La una y media. Creo que ya sé quién puede llevarme, solo he de llegar a un acuerdo con esta persona.

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- ¡¿Estás loca?! ¡¿Cómo se te ocurre pensar en ir?! - Exclama Christopher.

- ¡Shht! - Miro de lado a lado, asegurándome de que no se haya alarmado nadie. Le he arrastrado hasta la parte más alejada del jardín para hablar - Ya te he explicado la situación, esperaba que tú me entendieras.

- Y te entiendo. Pero... - Se calla por unos instantes y niega levemente con la cabeza - Angy, no puedes. Es una trampa, esos tipos se te van a llevar junto con tu amiga y su hermana.

- Sé que es una trampa, por eso necesito que me ayudes. Tú sabes luchar. La idea es que yo entre aparentemente sola y los distraiga mientras tú intentas llevártelas.

- ¿Te crees que es tan fácil? ¿Y qué pasará contigo? - Pregunta alzando una ceja. No le gusta ni un pelo la idea.

- Iré con vosotros y...desaparecemos - ...o no.

- No lo dices muy segura.

- Hazme caso. Por favor Christopher, debo ir. Nunca me lo podré perdonar si no las salvo.

Me observa atentamente y lo piensa. Su expresión ya me transmite lo poco que le entusiasma esta idea, pero parece comprender mejor como me siento. Emite un bufido.

- No lo veo Angy.

- Por favor...- Insisto

- De acuerdo - Accede a regañadientes y desconfiado.

- No le digas nada a los demás.

- ¿Y qué decimos cuando salgamos?

- Que vamos a entrenar o algo por el estilo. Se lo crean o no, nosotros ya nos habremos ido.

Christopher frunce el ceño. La verdad es que no me gusta tener que pedirle que venga, le estoy poniendo en peligro, pero confío en su habilidad de lucha.

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Miro el reloj de pared. Las tres y cuarto. Estamos esparcidos por el salón. Como dijo alguien; Cada loco con su tema. Yo estoy apoyada en una pared con los tobillos y los brazos cruzados, algo apartada de los demás. El dedo índice no deja de saltar de los nervios, dándome pequeños golpecitos en el brazo.