HUMANA

VIII

NO SIEMPRE SE ES BUENO

Sus ojos se rindieron ante la presencia del beso que aparentemente prometía ser solo un roce inocente, tanto Apolo como Juno disfrutaron del contacto intimo y calmado, pero en cambio Júpiter se sintió traicionado, muy atormentado ante la idea de un futuro donde ella, la chica que aun seguía siendo un misterio para él fuese de otro hombre.

Los días habían transcurrido demasiado rápido para él y cuando quiso darse cuenta Apolo había creado cierto sentimiento hacia la humana, porque dentro de él sabía que ella lo era y lo demostraría. Se enojo, claro que si, fue tanto así que se regreso por donde había venido, Juliet se sorprendió ante aquella decisión y tras asomarse a la ventana descubrió con gozo la razón, no odiaba a la chica pero mientras más lejos estuviesen ambos seres sería mejor para ella. Decidió no interrumpir y fue tras Júpiter quien se mostraba molesto por la situación.

-Me ha traicionado. Apolo lo había jurado y en la primera que puede me traiciona -El poco razonamiento abandono el cuerpo del hombre dejando solo los celos, que según él no existían en su ser.

-¿De qué hablas Júpiter? Apolo jamás te haría algo así -Le dijo de la manera más calmada e inocente que pudo, aunque su intento de disimular su felicidad fue en vano.

-¿Te hace gracia esta situación? -La voz oscura se mostro haciendo que la sonrisa de la chica desapareciera- Dime Juliet ¿Te gustaría traicionarme también?

-Jamás lo haríamos, debes pensar con... -El grito del hombre estremeció sus oídos, atravesando sus tímpanos.

Aquello la asusto mucho, ese hombre era poderoso, más que ella y si él quisiera le haría daño, eso lo sabía.

-¡No me jodas! -Respiro agitado, perdía el control y lo sabía.

-Júpiter... Nosotros...

-Vete. Vete y no me molestes -Se dio la vuelta decidido a marcharse donde pudiera tener privacidad, donde pudiera desquitar todo el sabor acido que atravesaba sus extrañas desde lo más profundo de su ser.

-No puedes huir de todos tus problemas Júpiter. Lo llevas haciendo desde que... -Silencio su objetivo, sabía que aquello no la llevaría a nada bueno, no tratándose de él.

Júpiter se detuvo dándose la vuelta para observarla, aquello le pareció tan espantoso, la sonrisa malvada que yacía en sus labios era tan espeluznante que incluso las moiras huirían del destino que él mismo Júpiter maquinaba para su adversario.

-¡Dilo! -Exigió con una voz fuerte y profunda, salida del mismísimo inframundo.

-No quise hacerlo -Estaba temblando con más fuerza, temerosa de su imprudencia, observaba el suelo con nostalgia.

Jamás se imagino como blanco de la rabia de aquel ser que ella adoraba.

-No quise hacerlo... Hmmm -Su voz era baja pero no perdía el toque malvado, no sabía si se burlaba de sus palabras o si las estaba considerando ciertas- No quisiste...

Lo siguiente sucedió tan rápido que ni ella pudo predeterminarlo. Se hallaba contra una pared mientras Júpiter la miraba con recelo, sus ojos ahora rojos parecían trasmitir la furia de su interior.

Mas sin embargo no la lastimo, observo hacia un lado y ablando su humor, sabía que estaba mal y que aquello estaba perdido en la lógica de su realidad.

¿Estaba celoso?

No, eso jamás lo admitiría, y menos por un ser que necesitaba para limpiar su apellido.

La soltó con delicadeza, la dejo respirar y acunar en sus pensamientos la idea de que jamás la lastimaría. La observo buscar con desespero el aire que le faltaba ya a sus pulmones y se sintió culpable de su arrebato.

-Déjame solo Juliet, no me siento muy bien -Se dio la vuelta nuevamente reanudando su camino.

Juliet le dejo marcharse, sabía que el detenerlo conllevaría una batalla que no quería librar, preferiría mil veces la muerte que alzar su magia contra la de un ser que llevaba todas las de ganar.

Si tan solo ellos hubiesen sabido que aquel gesto de cariño iba a desatar los celos y la envidia de un ser más oscuro de lo que aparentaba, si tan solo, solo tal vez hubieran preferido la distancia que la perdida.

Juno descansaba sobre un mueble mientras los lamentos flotaban a su alrededor, todo aquello debía ser una cruel pesadilla, una broma del destino la cual la arrastraba a lo más profundo del abismo. Nadie podría salvarla de aquella oscuridad que la consumía con lentitud y suavidad, deleitándose con su dolor.

Días después del beso el comportamiento de Apolo cambio por completo, él había aceptado que su corazón había escogido a la extraña como su dueña.

Fueron días de calma aparente donde ella aprendió sobre cada tribu y sus regentes, menos de Júpiter, Apolo pareció olvidar contarle la historia sobre su apellido y el destierro.

Apolo se encargo de darle los conocimientos necesarios para sobrevivir en aquel mundo donde el más débil era consumido por el más fuerte. Así de crueles resultaban ser aquellos seres superiores de poder más no de filantropía.

Aun no comprendía como Júpiter había olvidado por completo su existencia, le había prometido regresar pero descubrió con tristeza de que no era así.

En ese momento su atención había sido atraída por Apolo, aquel que le acompañaba día y noche, aquel que la protegía y apreciaba, que le sonreía con sinceridad y le miraba de manera especial, Pero no podía olvidar aquellos ojos llenos de una triste tortura, y aquel rostro expresivo donde sin duda alguna percibió más que maldad, Júpiter era su talón de Aquiles, aquella caja de pandora que deseaba con todo su ser descubrir por sí sola.

Apolo jamás noto aquella atracción, su percepción se vio afectada por aquel romance que si bien era correspondido, jamás seria completo.

Lo cierto es que Juno tenía un destino completamente distinto, uno en donde él no podría pertenecer.

"¿Qué sucederá con ella?" -Alguien susurro en algún lugar.

Esa misma pregunta rondaba su cabeza, no solo el dolor reinaba en su diminuto mundo, si no la tristeza de no poder hacer nada más. Ella no podría sobrevivir de ese modo.

Cuando abrió los ojos ese día, Apolo se hallaba en su consultorio, por petición y recomendación de Mercurio fue inscrita en la dichosa academia mágica y no podría despedirse de él.

Era el comienzo de todo, y a la vez de nada.

¿Qué tendría que hacer en aquel lugar?

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YA PRONTO TENDRAN UN BOOKTRAILER. IHODERA ESTA CON EL.

BUENO AQUI LES DEJO ESTE CAPITULO. ESPERO LES GUSTE.

ARRIBA LES DEJE ANEXO LA EXPRESIÓN DE JÚPITER CUANDO TOMA EL CUELLO DE JUELIET EN SU MANOS.

CREO QUE NO DEBERIAN DE HACER ENOJAR AL MUCHACHO.

BESOS Y ABRAZOS

OXOXOXOXO