A Cameron Wells sólo le importaban tres cosas :
1.-Fiestas.
2.-Mujeres.
3.-Amigos.
Era todo lo que le importaba, sólo era "Yo" hasta que se da cuenta que no todo es color de rosa.
No, enamorar a una chica sólo para pasar un buen rato no salió como...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"Lo siento, por hacerte perder el tiempo..."
-Beret.
Cameron.
Al terminar mi encuentro con Mery me vine de inmediato a casa de Elías donde supuestamente habría una junta de nuestro círculo de amigos pero al parecer se había divulgado de que el chico este haría algo, no me sorprende, Elías aparte de ser un buen DJ hacia muy buenas fiestas así que ahora habían mas de cuarenta personas bailando, bebiendo y fumando marihuana como locos.
Me tomó la segunda lata de cerveza y lo tiro al basurero, la música estaba bastante fuerte y así que decidí salir de aquí a tomar un poco de aire pero me detuve al encontrarme a Eric bajando de las escaleras junto a una chica tomados de las manos.
—¿Ya te vas?―Me pregunta, mis ojos se desviaron a la chica por un momento.
Eric no suele acostarse con la misma chica dos veces, pero ahora que lo recuerdo ha salido mas de una vez con ella.
"Supongo que se gustan".
—No, iré a fumarme un cigarro al balcón.—Le informe, este me da una palmadita en el hombro diciéndome bien nos vemos en un rato y ambos pasan por mi lado dirigiéndose a quien sabe dónde.
Subo hasta a la segunda plata y avancé hasta al balcón, agradecí que no había nadie. Saco un cigarro de la cajetilla y lo llevo a mi boca para encenderlo, me inclino un poco hacia adelante apoyando mis codos a las barandas del balcón. Me dedique a mirar a las personas que estaban bailando y unas dos chicas me pedían que bajara con ellas pero me negué.
Necesitaba estar solo un momento, ni siquiera estando con Mery pude olvidarme de toda esa mierda con lo de mi padre y mucho menos, mucho menos deje de pensar en ella.
Cierro mis ojos por un momento recordando una noche que Valentina y yo discutimos, sus hermosos ojos derramando lágrimas por mi culpa, ya no quiero seguir lastimándola, no quiero y lo que me dijo después de ello hizo que todos mis pensamientos cambiaran.
"Quiero que solo tu tome mi mano y me de las fuerzas en el día en que nuestro hijo nazca..."
Esas palabras retumban en mi cabeza, puede que sienta miedo ahora porque un bebé es mucha responsabilidad, admito que al principio me comporte como un idiota con ella y la trate de la peor manera pero el tiempo en que llevamos viviendo juntos logré conocerla un poco más pero aun así siempre acaba haciéndola llorar.
Yo quiero cambiar, realmente quiero ser un buen papá para mi hijo y que se sienta orgulloso de mi en el día de mañana.
Salgo de mis pensamientos al momento en que alguien se detiene justo a mi lado y me arrebata mi cigarrillo de la mano.
Me le quedé mirando a la chica que llevo el cigarro a su boca, ella exhaló el humo y se voltea a mirarme con una sonrisa.
—Tiempo sin vernos, Cameron.—Dice, guiándome un ojo y me devuelve mi cigarro.