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Después de un día agotador en el instituto, Louis llegó a su casa, encontrándose con la niñera ahí. Amaba a su madre con toda el alma. Pero, ¿por qué le hacía esto a él? Ahora tendría que ayudar a la niñera. Porque, Dios, eran demasiados pequeños, aunque las dos mayores se superan cuidar, eran dos bebes, bueno dos niñas de 8 años, las comida, las casa ordenada...

Y Louis tenía que llegar a su trabajo en dos horas.

Hoy definitivamente no había sido un buen día para el ojiazul. Bueno, si, puede que un poco si. Hoy había hecho reir a Harry hasta llorar. ¿Alguna vez había dicho que su risa era hermosa? Pues, el castaño realmente lo pensaba. Podría quedarse así, mirándolo reír y no se cansaría nunca.

Louis ayudó a Carol, mientras ella hacía la comida. Carol era joven de unos 23 años, no vivía muy lejos de aquí y su familia y ella se llevaban bien. Ella vive con su novio y están preparando la boda que será en unos meses. Ahora ella trabaja de niñera porque no consigue trabajo en su profesión, administrativa, y su novio es médico en el hospital.

Louis subió rápido a su habitación tan pronto como le fue posible, encontrándose en las escaleras a Lottie y Fizzy, las mayores.

Se duchó y se vistió con el uniforme del trabajo. Cogió una manzana y salió. Ya comería cuando volviera. Cogió su coche, porque sí tenía coche y estaba muy orgulloso de eso, y cogiendo por la carretera se dirigió a su trabajo.

Louis trabaja en una tienda de juguetes.

Y hoy, bueno, hoy no había mucha clientela. Algo más bueno en el día. Estaba colocando unos juguetes que había tirado un niño sin querer cuando unos rizados aparecieron delante.

Oh, Dios, ya veo a Harry por todos lados. Pensó, creyendo que eran imaginaciones.

Pero cuando oyó su voz supo que no lo había imaginado.

-Niall, para. Tengo que encontrar un juguete para mi primo. Viene que con mamá a quedarse en mi casa este fin de semana, y mi padre me pidió que le comprara a él un juguete, no a ti.

Ese era Harry y venía con Niall. Louis se quedó agachado detrás de las estanterías colocando las cosas, porque él si o si seguía trabajando.

-Pero es una peluche Harry, es un peluche adorable. A ti te encantan las flores, ¡mira! Tiene una flooooor. -Hasta Louis podía sentir el entusiasmo del rubio incluso sin verlo.

-No, Niall. -Habló tranquilamente el rizado. Louis quiso reír.

-¡Venga! Hoy me deprimi con Romeo y Julieta en clase. ¿Por qué Shakespeare tuvo que odiarme y escribir algo así? Es tan triste... -Respondió Niall.

-Bien, hazlo que quieras. Yo seguiré buscando. -Louis seguía colocando los juguetes. ¡Nunca iba a acabar! Porque exagerado siempre.

-Vale, yo voy a coger el peluche. ¡Es mío, de mi propiedad!

Unos pasos se oyeron cerca del ojiazul. Y éste sabía perfectamente quien era.

-Um... Perdone. ¿Sabes que le pueda gustar a un...niño de 8 años? -La voz de Harry se oía a tan sólo unos pasos.

-Oh, claro, Harry. -Habló él.

-¡Lou! No te había reconocido. ¿Trabajas aquí? -Dijo sorprendido Harry por encontrárselo aquí.

Los dos se saludaron con un abrazo y empezaron a hablar del juguete del primo de Harry. Niall se había perdido entre tanto peluche y ahora había visto más y todos le gustaban.

Louis terminó su turno a las ocho, una hora después de que los chicos llegaran y una hora después de que Niall quisiera llevarse todos los peluches. A las ocho Harry tenía su regalo y Niall, bueno, el tenía dos nuevos peluches.

Salieron por la puerta de la tienda a las 8:05. Se subieron al coche de Louis que se ofreció llevarlos. Niall se pasó todo el camino hablando de los nombres de los peluches. Mientras Louis y Harry reían.

Y Louis no decía en broma lo de la risa de Harry.

El último en bajar fue Harry. Y A Louis casi le da otro para cardíaco. Harry le volvió a besar la mejilla. Cuando lo vio desaparecer por la puerta de la casa. Se quedó unos segundos con su mano en la mejilla.

Si así se sentían sus labios en su mejilla... ¿Cómo se sentirían en sus propios labios?

Y con ese pensamiento, arrancó el coche y volvió a su casa.

-Mes 7-

Hoy a sido un día muy atareado. He tenido que hacer muchas cosas... Tía Marta vendrá a visitarnos este fin de semana y tuve que ir a comprar un regalo para su hijo.

Me he encontrado a Louis ahí. Parece que me lo encuentro en todo lados.

Me gusta.

No sabía que trabajaba... Bueno, creo que él tampoco sabe que yo trabajo... Le queda bien el uniforme. El rojo le queda bien. Aunque, todo le queda bien siendo sincero.

Mamá, ¿me estaré haciendo ilusiones demasiado rápido?

A papá no le gustó... Le dije, bueno, le dije que era gay... y no le gustó. Ahora está enfadado y dice que cuando ahorre lo suficiente me quiere lejos de la casa. ¿Por qué él no puede ser como tú?

Pero me iré. Ya te lo dije... Lo haré. Yo sé que puedo.

Me estoy poniendo triste. Y no me gusta. Hoy tuvimos que ver Romeo y Julieta, Niall lloró con la película. ¿Por qué tuvieron que escribir algo tan triste?

Si todo fuera triste, nada tendría sentido, porque no tendrías motivo para levantarte cada mañana, ¿Recuerdas? Eso me decías tú.

Tiene que haber un final feliz. Y, yo también quiero mi final feliz.

"No me gustan las historias que acaban mal.
Porque si todos tuviéramos un final trágico,
La vida no tendría sentido vivirla"

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¡Holaaap!

Espero que os haya gustado. Lo siento por tardar tanto en actualizar...

¡Gracias a los que leen, comentan y votan!

*Perdón si hay faltas de ortografía*

¿Quieren otro capítulo hoy? *Nadie contesta*

Hasta la próxima y un besoo a todos.

#AllTheLove ❤

18 Frases Para Él: Amor Secreto -L. S-PAUSADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora