VIII

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"¿Hola?" Escuchó la voz de su madre viniendo a través del comunicador de la puerta. Ella no sonaba enojada pero su tono era serio.

"Soy yo." Elle simplemente dijo, esperando pacientemente el conocido sonido que le permitiría abrir la puerta principal.

"Te dije que no vinieras." Le recordó y Elle rodó sus ojos. Sabía que su madre no iba a dejarla fuera de su casa toda la noche. Aunque una parte de ella todavía susurraba "nunca sabes."

"Solo déjame entrar así podemos hablar sobre esto. " Ella rogó, comenzando a enfurecerse por la inmadurez de su madre.

Escuchó a su madre suspirar antes de escuchar el fuerte sonido proveniente del comunicador de la puerta que le permitió entrar a la casa.

"¿Dónde has estado?" Su madre preguntó cuando entró en la sala del living. Estaba usando piyamas, sentada en el sofá y con un vaso de vino tinto en sus manos.

"Te lo dije. Estaba en el parque." Repitió y empezó a desabrochar su chaqueta pero paró cuando recordó que su brazo estaba lleno de cicatrices.

"¿Con quién?" Demandó saber, dejando lentamente el vaso de vino sobre la mesa y cruzando los brazos sobre su pecho.

"Un amigo mío." Elle respondió, no mintiendo realmente.

"¿Dani?"

"No," Elle sacudió su cabeza ligeramente. "Zayn. Es un chico que yo-" se detuvo, tratando de encontrar la manera correcta de decirlo. "Lo conocí hace unas semanas."

"Oh," sus labios formaron una línea fina. "Así que ¿huiste con un chico al azar, que lo has conocido hace sólo una semana, hasta la medianoche?" Preguntó, su voz elevándose cada vez más.

"No es tan malo como lo haces sonar." Elle mordió sus uñas nerviosamente. Su día había sido genial hasta ahora, pero no, ellos tenían que arruinarlo.

"¡Tú ignoraste completamente todas las cosas que te he estado enseñando todos estos años! No estar afuera hasta tarde, no salir por ahí con chicos al azar-" Su madre comenzó a quejarse pero fue interrumpida por el papá de Elle que entró a la habitación.

"Solo déjale hacer lo que sea que quiere hacer, Miranda." Le rogó, tratando de parar su pequeña discusión. "Ella es casi un adulto ahora y es verano; no es como si tuviera otras responsabilidades de todos modos." Explicó, dando un punto válido.

"¡Quédate fuera de esto, Will!" Gritó fuertemente hacia su esposo. "¡Tú eres la razón por la que ella se ha convertido en esta niña malcriada que cree que puede hacer lo que sea que ella quiera!"

"Sólo cállate. ¡Sólo porque tu día en el trabajo fue malo, no significa que puedas venir a casa y desquitar tu enojo sobre nosotros!" Él empezó a gritar también y Elle sólo se quedó ahí, viéndolos pelear como niños.

"¡Haces lo mismo con Joseph!" Ella lo acusó y él rodó sus ojos.

Ninguno de los dos prestó atención a su hija ahora, quien encontró la oportunidad perfecta para irse a su habitación y encerrarse allí. Sin embargo, la luz en la habitación de su hermano hizo que se detuviera y se dirigió a ella.

"Hey." Lo saludó. Joseph estaba sentado al borde de su cama, lágrimas cayendo de sus ojos.

"¿Qué está mal?" ella preguntó, cautelosa. Podía ver que estaba molesto –y probablemente enojado también– y no quería que arremetiera contra ella.

"Lo quiero muerto," Dijo a través de sus dientes apretados. "Juro que algún día," Se detuvo, dejando salir una risa forzada. "Algún día voy a matarlo mientras duerme." Terminó de decir y Elle sabía que se estaba refiriendo a su padre con quien probablemente había peleado más temprano esa noche.

Wingless - Zayn Malik - EspañolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora