Capítulo 41.

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LEAN LA NOTA AL FINAL

N/A: Me sentía muy mal anoche, tenía casi el capítulo listo y se me borró. Así que el capítulo será menos elaborado pero con las mismas ganas.

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Martijn's POV

Tenía al menos unos cinco minutos de haber despertado, ella seguía dormida con su respiración lenta y sus labios entreabiertos. Literalmente preciosa.

Sus pequeñas manos estaban entre nos y las mías la rodeaban. Al menos debía ir maquinando una verdadera disculpa para toda la mierda que armé el día anterior. Menudo cumpleaños la hice pasar.

Ella gruñe. Y frunce el ceño.

Debe estar teniendo una pesadilla, si es eso...

-Oh Dios Martin...

Y como que en esa pesadilla salgo yo, sí es eso.

-Sigue, si-sigue haciéndolo...

Sin comentarios.

Ahora su respiración es irregular, sus mejillas están ligeramente sonrosadas y sus manos en puños.

Mierda ¿acaso estaba teniendo un sueño húmedo?

-Qui-quitame la camisa. Joder hazlo.

Ella se aleja de mí y da un giro brusco. Luego se levanta sentándose modo indio sobre la cama y empieza a quitarse la camisa que le había puesto anoche.

No, Jenna no me hagas esto.

Cuando al fin se la quitó, sus ojos permanecían cerrados y sus labios entreabiertos, cada cinco segundos los relamía, su cabello rubio rojizo estaba alborotado y ahora estaba terriblemente roja.

Aquel conjunto de ropa color rosa pálido de encaje no debía cargarlo puesto. Como que ahora el mundo no está de mi lado.

Y ahí estaba yo, como un pendejo con ahora una chica sonámbula sobre mí y casi desnuda con un conjunto costoso de lencería. Perfectísimo.

Tal vez mi privilegio ahora es que esta chica ahora estaba casi violándome y era voluntario porque jamás me opondría a que mi novia lo haga. Y más cuando me traía cayendo baba por ella.

No, no, Jenna no te muevas. Ay mierda, se movió.

-Dios...

Fue lo único que pudo salir de mis labios en cuanto ella tanteó buscando mis manos para luego tomarlas y ponerlas en el broche de su brazier de encaje.

Ese color le sienta perfecto.

Ella mordió su labio ¿cómo es posible que aún siga dormida?

De un momento a otro se tiende sobre mí, aún con sus piernas a cada lado de mi cadera para luego reír suavemente.

-Te amo Garritsen.

Dijo con voz adormilada. Para luego caer rendida sobre mí.

Con un muy excitado yo.

***

El ceño fruncido y los ojos molestos de Jenna me observaban, y ahora los nervios eran gigantes.

-Responde Martin. Dime ¿cómo mierda llegué a tu habitación?

-No..No lo sé y-yo en reali...

-No quiero verte.

-¿Qué?

-Dije que no quiero verte. No quiero hacerlo, y a ti simplemente no te interesa.

Papercut #Papercut .1 (CORRIGIENDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora