Al borde de la curiosidad.

CAPITULO II

DEMONIO

Jena decidió que en el almuerzo debíamos sentarnos en las gradas de la cancha de lacrosse, es algo extraño por qué está totalmente solo y eso no me agrada ya que me gusta buscar chismes nuevos y descifrar cosas, pero creo que Jena lo hizo de gusto para que no hiciera ninguna de esas cosas.

- pero exactamente ¿qué fue lo que te dijo el profesor Murray cuando me fui?-le pregunte a Jena

- me dijo que mi nivel en sociales era muy bajo y tenía que superar el promedio de los años pasado o sino no me darán una beca.

- y que piensas.- ladee la cabeza haciendo como si me interesara.

- pienso que no sabe todo lo que me he esforzado en esa maldita materia, cree que sabe todo pero en realidad no sabe nada- hizo una mueca y se llevó una papa a la boca.

Achine los ojos, ambas sabíamos que Jena era un completo fracaso para sociales y ambas sabíamos que nunca se esforzó por sacar una buena nota, pero quería dejar qué se auto ayudara con sus reproches de que si se esforzó para no hacerla quedar mal.

- bueno hablemos de otra cosa- se quedó Jena pensativa mientras yo miraba los alrededores en la búsqueda de algo jugoso pero no vi nada.
Me irrite.

- oye ¿enserio te quieres quedar aquí? me irrita estar en la soledad.
Jena me miro

- ¿sabes? eso es por qué quieres ver al chico nuevo, ¿como dices que se llamaba?.

- para empezar no sé su nombre y no, no quiero verle, solo no me gusta estar en la cancha de Lacrosse como una estupida.

- oh solo aguarda unos minutos- me dijo y yo la verdad no quería esperar pero sabía a lo que se refería y algo de eso no me haría nada mal.
Sabia que a Jena le encantaban los chicos de Lacrosse, 1) por qué todos son atractivos 2) por qué la mayoría son unos cerebritos y 3) por qué bueno Jena tenía un flechazo por Adam Lawrence osea nuestro capitán.

- Jena, los de Lacrosse no son tan buen partido.- le dije seria con la esperanza de podernos ir.

- pero ¿como crees?, son los chicos más guapos de la prepa y sin hablar de Robbie Stilles que es de nuestro salón.

- como sea- seguí tomando de mi jugo y en ese preciso instante quería escupirlo por la sorpresa.
Los del equipo estaban saliendo de los vestidores y venían en dirección completa a las canchas junto con el entrenador y profesor de educación física.
La mayoría de los chicos estaba sin camisa y yo , bueno yo estaba babeando.

- Santa madre Jena, no sé por qué ninguna de las chicas viene a ver semejante espectáculo.- dije con los ojos como platos y totalmente sorprendida

- por qué las chicas son estupidas- me dijo y nosotras seguimos mirando el espectáculo de hombres quienes algunos nos echaban alguna que otra mirada.
El último chico nada más y nada menos era el novato y toda mi atención iba en él quien obviamente, estaba sin camisa.

- Ah bueno si tú no te metes con el nuevo me meto yo, pero es que mira eso es el dios de los dioses, es el súper Adonis...acaso...¿acaso su torso brilla?

Ahora sí estaba que estaba sorprendida. El chico era perfecto, todo lo que una chica promedio pide como hombre de sus sueños y me incluía, pero es que, ese "no sé qué" seguía ahí a pesar de ser el tipo más guapo de la tierra hacía que no me agradara.
Su mirada azul me vio entre las gradas y vi una sombra de sonrisa torcida en su rostro, ¡por Dios pero que pasado!. Yo en ningún momento aparte la mirada a pesar de que yo estuviera sonrojada, no lo hice. Él si la apartó y vi cómo caminaba viendo su espalda y bueno yo la verdad estaba anonadada, el aire me faltaba pero no podía hacer nada, así era él un guapo Adonis.