Cómo Aman Los Hombres.

8.

Capítulo # 8.

Vivir con Ava era lo mejor, nos reíamos, bailábamos, mirábamos películas hasta tarde; en algún momento intentó hablarme de un chico, pero al parecer tenía miedo de mi reacción y decidió callarlo.

Lunes, 14 de diciembre de 2015.

11:45 .A.M.

Salí de la oficina para toparme con un cielo gris y libido, no me apetecía este clima para trabajar o hacer algo, pero en fin las obligaciones primero ¿No?

Refundí mis manos en el gran abrigo que me cubría del frío para estas temporadas, a pesar de tener guantes la fría brisa se calaba en mis huesos, la bufanda tejida azul rey cubría mi cuello. La verdad me he acostumbrado al frío, solo no quiero pescar un virus de gripe, al abrir las puertas de la empresa y pisar la acera, la helada ventisca de pascuas golpeó mi rostro.

Respiré profundamente, cerrando mis ojos ante el contacto.

Caminé hacia mi coche, entré en él encendiendo la calefacción, tirando el abrigo, los guantes y la bufanda en el asiento trasero.

Aflojaba. Apretaba. Aflojaba. Apretaba, eso hacía con mis dedos al rededor del volante.

Respira. Malditos nervios.

Solo es un almuerzo donde verás al demonio. Solo aclararas tus dudas sobre él Ángel.

Inhalé. Se suponía que no encontraríamos en un café cerca de su editorial. La verdad, Amanda; siempre ha sido apasionada por los libros, era su manera de escaparse y al parecer había logrado su sueño de montar una editorial. Una la cual publicaba un nuevo libro de un aficionado o un principiante de la facultad, dándole así la oportunidad de surgir.

Mi teléfono sonaba con la melodía de Demons indicándome una llamada.

— ¿Bueno?

— ¿Jake?

— Amanda. — Afirmé.

— Sí, lamento llamarte a último momento, pero mi auto se ha averiado, ¿Podrías pasar por mí?

— Claro. —Respondí dubitativo.

— Adiós.

— Adiós. —Contesté para luego colgar.

Pongo en marcha el coche de camino a la editorial.

En los altavoces suena: It's Time de Imagine Dragons, sí. Es mi grupo favorito.

— So this is what you meant when you said that you were spent and now it's time to build from the bottom of the pit right to the top don't hold back — Canté a todo pulmón mientras pisaba el acelerador.

Crucé en la intercepción y seguí cantando: — So this is what you meant when you said that you were spent and now it's time to build from the bottom of the pit right to the top don't hold back — Se venía el coro y me movía, y golpeaba el volante con mis dedos al ritmo de la música.— It's time to begin isn't it I get a little bit bigger but then I'll admit I'm just the same as I was Now don't you understand That I'm never changing who I am. — Sigo cantando durante el trayecto, hasta que It's Time, se da por acabada y antes de poder darme cuenta, me encuentro frente a la famosa editorial de Amanda.

Miré la verja que porta el anunció en el cual pone en letras cursivas y elegantes: West Editorial. Y el eslogan no podía faltar. Claro está; "Miles de historias por descubrir".

Aparqué al lado del pasaje para personas, cogí mi abrigo y guantes, bajé del auto y me encaminó a la recepción de la editorial.

Paré en seco al percatarme de lo que vi.

—Calma, Cullen. Tal vez es un hecho de confusión.

Es cierto, hay muchas mujeres de ojos tan grises como el cielo a punto de soltar una tormenta ¿No?

— ¿Esta Amanda West?— Pregunté, mirando fijamente esos ojos.

Era ella.

Lo sabía.

— Sí. Sí... Claro —Su voz vacilante, delataba vilmente su nerviosismo.

Miré sus mejillas, buscando un ateísmo de sonrojo, pero, solo me encontré con un leve rosa pálido, muy poco notorio.

Por la forma en la que sus ojos grises me taladraban, estaba seguro de que me reconoció.

— Jake.

Al girarme podía ver a Amanda con una ceja levantada.

— Adiós— dije en un susurro, estaba por irme sin esperar respuesta. Pero algo me detuvo. — ¿Cómo te llamas?

—Riley, Riley Hamilton.

— Jake, Jake Cullen. — Ella cogió mi mano con recelo al estrecharla, pero pude sentir su nerviosismo y una leve corriente de cosquilleo.

Agradable. Me resultó, agradable.

— ¿Vamos?— Me dirigí a la ojiazul, para luego lanzarleuna última mirada de despedida a Riley. I