Epílogo.

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Epilogo.

El tiempo pasa volando, la vida puede llegar hacerse compleja (aún más de lo que ya es) en muchas ocasiones creemos amar a algunas personas, pero no. Solo es eso: algo que se cree; ya han pasado diez años desde que ha ocurrido esta historia y hace un momento que la he terminado de contar, es melancólico recordar algo como esto y odioso a la vez.

Ahora que lo pienso ¿Cómo pude creer amar a Riley en cuestión de meses? El amor no nace tan rápido y si para algunas personas llega a serlo en cuestión de tan poco tiempo ¡Felicidades! Tienen una capacidad de amar única, pero por desgracia, ni hace años ni ahora ha sido ese mi talento. Tampoco diré que Riley no se había creado un espacio en mi corazón del que no saldrá, pero ese sentimiento de añoranza podía asegurar que era "Amor".

El amor es una palabra que conlleva sentimientos fuertes, sentimientos que no muchos tienen la dicha de entender y experimentar, el amor es querer a alguien a tu lado sin importar nada, simplemente sin importar sus mañas, sus errores, sus virtudes, su apariencia; sin importar absolutamente nada. Porque eso es el amor: aceptar cada parte del otro.

Existe una leyenda, de un hilo rojo, una leyenda hermosa aunque tal vez solo se quede en esa categoría. No soy fanático de estas leyendas que la gente inventa, pero esta me ha parecido una bonita.

"Cuenta una leyenda oriental que las personas destinadas a conocerse tienen un hilo rojo atado en sus dedos. Este hilo nunca desaparece y permanece constantemente atado, a pesar del tiempo y la distancia. No importa lo que tardes en conocer a esa persona, ni importa el tiempo que pases sin verla, ni siquiera importa si vives en la otra punta del mundo: el hilo se estirará hasta el infinito pero nunca se romperá. Este hilo lleva contigo desde tu nacimiento y te acompañará, tensado en mayor o menor medida, más o menos enredado, a lo largo de toda tu vida. Así es que, el Abuelo de la Luna, cada noche sale a conocer a los recién nacidos y a atarles un hilo rojo a su dedo, un hilo que decidirá su futuro, un hilo que guiará estas almas para que nunca se pierdan... con el corazón, fuente de vida y eternamente concebido como el hogar del amor..."

Un hilo rojo al que no podremos imponer nuestros caprichos ni nuestra ignorancia, un hilo rojo que no podremos romper ni deshilachar. Un hilo rojo directo al corazón, que conecta a los amores eternos, a los profundos, esos que simbolizan el antes y por los que no hay después. El amor de una madre, de un padre, de un hermano, de un niño, de un amigo, de un hombre o de una mujer... Un hilo rojo que simboliza el amor y el interés común... Cada uno que lo interprete como quiera pero lo que está claro es que, en ocasiones, las casualidades son tan fuertes que no dejan lugar a dudas... Almas gemelas se llaman, corazones entrelazados con una o varias eternidades por vivir... Un hilo rojo que me ha unido a la mujer que se ha convertido en mi amor.

La vida da demasiadas vueltas, da demasiados saltos y sacudidas y acá estoy con la mujer que creí amar en meses, la que se alejó por años y volvió a mí, la que me ha levantado, ha caído conmigo y sigue brindándome esa hermosa sonrisa y mirándome con los ojos grises más hermosos que he visto en la tierra.

Antes no sabía amar verdaderamente, ni lo que conllevaba. Antes solo era un crio inmaduro que jamás había sentido nada igual. Hoy por hoy sé que es un sentimiento inigualable, tengo el corazón lleno de él, lo tengo lleno hasta reventar y cada día le doy gracias a Dios por mi familia.

Sí, familia. Riley me ha dado dos hermosos gemelos con una combinación inigualable de ambos, los gemelos viven de viaje en viaje, pero seguido mandan miles de regalos y postales; Ava y Eduardo están próximos a casarse, Amanda ha encontrado a su hombre (aunque aún no se atreve a dar el paso al atar) todos estamos felices y disfrutando de la vida.

Sé que vendrán momentos difíciles, sé que la vida no es color rosa, pero estamos juntos y sabremos afrontarlo.

"Los hombres mujeriegos no suelen durar mucho en esa vida llena de diversión, pues, pronto llegará (o casi arrollaran) a la mujer de su vida, a cada mujeriego le llega su hora; y aunque no lo crean los mujeriegos son los que en su debido momento más entregan, más aman y más sufren".Jake Cullen.

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En unos momentos les dejaré en link del PDF de la historia en los comentarios para una mayor experiencia en  la lectura.

Gracias 

Los Amo 

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