Cap 5: Adiós.

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Me extrañaba la expresión triste que tenía Abuela. La seguí hasta el sofá del salón, me senté y entrelazó sus dedos.

Abuela: Karina, cielo, te tengo que dar una mala noticia...

Karina: dime -dije un poco preocupada.

Abuela: cielo, temo decirte esto pero voy a ir al grano, vale? *asentí y me coge de las manos*

Karina: me estas asustando Abuela...

Abuela: Karina, no voy a estar mucho tiempo aquí, contigo. Me... me han dado un mes de vida.

No.

Se me cayó el alma al suelo. Abuela? Tan pronto? Por qué? Por qué a mi? La persona que más quiero en este mundo, por qué me tiene que pasar todo esto? Qué le he echo yo al mundo? No... esto tiene que ser un sueño!

Karina: dime que esto es una broma -dije mirandole a aquellos pequeños ojos azules de 85 años.

Abuela: Lo siento cielo, no puedo hacer nada -me abrazó y yo hice lo mismo, llorando como nunca en su hombro. Sólo pensarlo y se me cae el alma al suelo.

(...)

Han pasado 3 semanas desde entonces, 29-12-15. Sí, pasaron las Navidades, pero los Reyes todavía no. Me desperté muy pronto, pero no vi la hora. Había un silencio tremendo en la casa, que raro...

Me acerqué al salón, nadie. La cocina, nadie. En ningún sitio había nada, pero vi una nota en la mesa del salón-comedor:

Para Karina, de Abuela:
Cielo, sólo quiero que sepas que aunque yo no esté contigo, aunque te sientas sola en casa cuando vivas sola aquí, quiero que sepas que en un huequito de tu corazón estará ocupado por mi alma.
Te quiere, Abuela.

(...)

Nadie Me EntiendeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora