Capítulo 11

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Alejandra: "Nada que te importe imbécil."

Gabriel: La agarro por la cintura y la pego a mi cuerpo. Me acerco a su oído y le digo. -"No te voy hacer nada, porque soy un caballero."- La mire a los ojos y le sonreí. Puse mi mano derecha en su cintura y la otra le tome la mano para ayudarla a caminar hasta mi carro. La ayudo a montarse en el asiento del copiloto, le pongo el cinturón de seguridad. Me monto y la miro que está mirando por la ventanilla. Le acarició su mejilla y me mira sorprendida.

Alejandra: "¿Qué haces? «Arruga su ceño»

Gabriel: "No te voy a hacer daño, necesito tu dirección"

Alejandra: "Dale yo te digo instrucciones dónde tienes que ir."

Gabriel: "¿Segura?" Asiente. Enciendo el motor y arranco el auto. -¿Por qué se abra emborrachado? Es una mujer decidida, dedicada, sensible aunque quiera demostrar lo contrario.- Miro a Alejandra que tiene la vista para la ventanilla y le digo. -"Falta todavía"- Espero que me responda, pero no dice nada. -"Alejandra"- Me estaciono, le quitó el pelo de su rostro y tiene los ojos cerrados. -Lo que me faltaba ahora donde la llevo.- La muevo un poco y le digo. -"Alejandra despierta."-

Alejandra: "Mmm..."

Gabriel: Le agarro la cara y le digo. -"¿Dónde vives?"

Alejandra: "Déjame dormir."

Gabriel: "Ahora que hago." Tomó su cartera y buscó su celular. Lo enciendo. -"Mierda tiene contraseña. Alejandra, la contraseña de tu teléfono cuál es."- No dice nada. Pongo mi mano en la sien y me doy masaje. -Piensa Gabriel, donde puede estar segura. La llevo a un hotel. No seas bruto, cuando se levante va a pensar que me aproveché de ella.-

Le acarició la mejilla y le acomodó su cuello para que no esté incomoda. Arrancó el auto. -Jamás imaginé que estuvieras en mi carro. Aunque me hubiera gustado que fueras consiente. Me alegro que estés conmigo, ahora ya que después no me vas a querer ver ni en pintura. Que voy hacer contigo Alejandra. Mi corazón dice una cosa y la razón otra. Si tan solo supiera lo que está pasando en tu cabecita y tu corazón.-

Me estaciono frente a la entrada. Me bajo, le abro la puerta y le quitó el cinturón de seguridad. Pongo una mano en su espalda y la otra levanto un poco sus muslos para sacarla del auto. Le doy una patada a la puerta para cerrarla. Como puedo toco el timbre de la casa. Abre la puerta y entró. -"Perdón por levantarte abuelo."

Felipe: "Esta muchacha ¿quién es?"

Gabriel: "Es Alejandra, abuelo." La acomodo en mi pecho y le digo. "Esta borracha, no sé dónde vive."

Felipe: "¿Por qué la trajiste aquí?"

Gabriel: "Mi intención era llevarla a su casa, pero se durmió antes de darme la dirección."

Felipe: "Voy por una empleada para que prepare una habitación."

Gabriel: Arrugo el ceño junto con la nariz y le digo. -"No, son las dos de la madrugada. Mejor ayúdame a ponerla en mi habitación."

Felipe: "Estás loco, en tu habitación."

Gabriel: "Sí, vamos" Subo las escaleras y mi abuelo me sigue al lado. Me abre la puerta y destine de la cama. La acomodo con cuidado para que no se levante. Miro a mi abuelo.

Felipe: "Esto te va a traer problemas con Montero"

Gabriel: "No la iba a dejar que tomará un taxi ebria."

Felipe: "La hubieras dejado en un hotel."

Gabriel: «Suspire» Lo mire directo a los ojos y le digo. -"Lo pensé, pero ella va a pensar que me aproveché de ella."

Amor SecretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora