Amor Secreto

Capítulo 05

Alejandra al escuchar esa voz tan particular, tan conocida, se voltea con suma lentitud para confirmar su sospecha de quien se trata. Levanta su ceja izquierda en forma de sorpresa. Abre su boca par de veces intentando pronunciar alguna palabra, pero no sale ninguna. Respira profundo para tranquilizar a su corazón acelerado.

-Tú de nuevo- replica.

-Tal parece que el destino se empeña en ponerte en mi camino- expresa muy sonriente. Alejandra por su parte sonríe por sus palabras, pero voltea sus ojos por la desfachatez con la que le habla. Tiene que reconocer que es muy dinámico con sus palabras para alabar a cualquier mujer. Está prefiere permanecer en silencio y no dar pie para entablar una conversación.

-¿Cómo estas Alejandra? ¿Por qué te puedo llamar por tu nombre? -pregunta. Alejandra le sonríe y es inevitable que se emocione por lo que fija sus ojos en los de Gabriel.

-Todo bien y, ¿tu? -le devuelve la pregunta con una sonrisa.

-Estoy bien, pero ahora me encuentro mucho mejor con tan solo tu presencia- responde con una sonrisa muy coqueta de su parte.

-En serio, no sabía que podía mejorar el día de alguien, pero me alegro que estés mejor ahora. Permiso me tengo que retirar- le deja saber. Alejandra pasa por el frente de Gabriel sin dejar que diga media palabra, pero esté la detiene agarrándola por el codo derecho y le da media vuelta. Están frente a frente mirándose a los ojos.

-Alejandra, Alejandra, quería platicar contigo- expresa.

-¿De qué? Que yo sepa no tenemos nada de qué hablar, pero seré condescendiente contigo. Te daré unos minutos- sede Alejandra.

-Me iré sin rodeos. Todo lo que te dije la semana pasada en la playa es cierto. Yo me enamore de ti desde el primer instante que te bese- confiesa. El corazón de Alejandra comenzó a bombear rápidamente por las palabras tan firmes de Gabriel con tanta decisión. Traga saliva en seco para mirarlo a los ojos y confirmar con su mirada que no miente. Que dice la verdad. Alejandra no puede evitar sentirse confundida y extrañada. No puede creer en encontrarse a un hombre como él.

-No crees en el amor a primera vista- añade Gabriel y provoca que Alejandra sonría y ver como sus ojos color café brillen. -¿De qué te ríes? -pregunta.

-Es que estaba pensando en el amor a primera vista, pero eso no puede ser que me digas eso a penas nos hemos visto- le dice mirándolo a los ojos y esperando una respuesta lógica de su parte con este extraño sentimiento que ella está sintiendo.

-Alejandra no entiendes que el hombre de tu vida soy yo -Gabriel se auto señala, esté la ve sonreír y lo mira con el rabo del ojo-. Yo te amo y me amas- concluye. Alejandra mueve su cabeza de lado a lado negando las palabras, pero le es imposible no sonreír por la locura de Gabriel.

-Esto es una completa locura Gabriel. No nos conocemos, no sabes mi apellido- cuestiona. Él le regala una sonrisa encantadora y se pasa su mano por su barbilla, pensando en sus próximas palabras.

-Eso no me importa porque tú te vas a casar conmigo y cuando nos casemos tu llevaras mi apellido que va hacer Vivanco -esté sonríe-. Mírame y dime que me amas, como tan fácil te lo digo yo. Te amo Alejandra- expresa muy coqueto y Alejandra sonríe, mientras se sonroja. Gabriel no despega su mirada de la de ella. Esté espera una respuesta de parte de Alejandra, pero no llega.

-Está bien. No tienes que decir nada ¿Sabes por qué? Porque tu mirada me lo dice todo y tu boca también- añade por un intento de convencerla. Le pone las manos en las mejillas y la acerca a su cuerpo para robarle un beso tierno.

Sus labios se unen en uno solo, provocando un sinfín de sentimientos, de electricidad que los recorre por todo su cuerpo. Alejandra reacciona cerrando los ojos perdiendo el control de su cuerpo que la traiciona y le corresponde con dulzura.