Capitulo 37

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Mariana Sotomayor

Cuando sus manos tocan mi cuerpo, en ese instante mi cuerpo se estremeció. Me beso con desesperación, con deseo y pasión, lo cual le correspondí hasta que nuestra respiración se entre corto y nos despegamos despacio.

»Un vacío se apodero de mí, lo mire a los ojos y sin pensarlo le estampe mis dedos en su mejilla. Dejándola roja y su rostro completamente confundido.

Ricardo: "¿Qué te pasa?" me dice gritando.

Mariana: "Que te pasa a ti, porque te dejara entrar no tienes derecho a besarme, sin mi consentimiento." Camine hasta la puerta de mi apartamento y la abrí esperando que saliera.

»Vi cómo se movió del comedor y camino hasta la salida. Parándose frente a mí, con total firmeza y decisión. Sin más ni más, me agarra por la nuca y me vuelve a dar otro beso jugando con mis labios y le respondí gustosa hasta que se separó de mi con una sonrisa de satisfacción.

Ricardo: "Hasta luego, preciosa."

Mariana: Se fue así, sin insistir, dejándome caliente. Me toco los labios sintiendo su sabor, sus labios presionando los míos. -"Adiós, idiota."−

»Logro gritarle antes que entre al elevador. Cierro la puerta, recostándome en ella. Cuestionándome. -"Mariana que te está pasando con ese hombre."−

Alejandra Montero

Sentada mirando el mar, sintiendo la brisa del viendo, el olor a sal y sintiendo la arena rozar mis pies. El pelo levantado por la brisa dándome en alguna parte de mi cara.

−Es un hombre maravilloso, no me arrepiento de haber esperado. Fue tan delicado, dulce me hizo sentir tantas cosas en una sola noche. Me hizo vibrar en sus brazos. Me hizo olvidar todo.−

»Siento una las lágrimas correr por mis mejillas e intento limpiarlas con el dorso de mi mano. Suspiro profundo intentando las ganas de llorar al recordar lo canalla que fue mi padre con mi madre.

−Porque nos hizo esto, yo confiaba en él a pesar de que todo, que Gabriel lo acusaba. Con esto me demuestra que él no es el hombre que siempre pensé que era.−

Siento a alguien sentándose detrás de mí, rodeando sus brazos por mi abdomen. Volteo mi cara sonrió al ver al amor de mi vida sonriéndome.

Gabriel: "En que piensas. ¿Por qué esas lagrimas amor?"

Alejandra: Siento como las limpias con sus dedos. Me encojo los hombros. "Estaba pensando en ti y en mi papa."

Gabriel: "No me gusta verte llorar. Te duele lo que hizo."

Alejandra: Asiento. "Sabes quiero volver, quiero hablar con mi mama, entre otras cosas quiero hacer."

Gabriel: "Tenía en mente quedarnos hasta mañana, pero sí creo que debes afrontar la situación con tus padres."

Alejandra: "Sabes, estaba ciega por el amor a mi papa, que me olvide de mi madre, desde que llegue ni siquiera me he percatado si duermen juntos."

Gabriel: "Yo creo que si tu madre no es feliz con tu padre que se divorcie. Total él no tiene nada que ver con esa."

Alejandra: Me inclino así al frente. -"Por qué lo dices con tanta seguridad."− Lo miro con mi frente fruncida. Desvía la mirada hacia el mar.

Gabriel: "Cuando compre las acciones, tu papa tiene hipotecada la casa, me entere que el no pago los atrasos del préstamo y por molestarlo, compre la hipoteca hasta ahora desde que adquirí la hipoteca no ha pagado ni un solo pago."

Alejandra: Me levante de la arena mirándolo confusa. -"Me quieres decir que en otras palabras estoy en la calle."− Asiente.

Gabriel: "Jamás haría algo así, pero ten la seguridad que si tu madre se quiere divorciar de Máximo, y él quiere quedarse con la casa, ten por seguro que se la quitó para entregártela a ti."

Alejandra: Siento las lágrimas correr por mis mejillas y miro hacia el mar. -"Que ibas hacer con la casa."−

Gabriel: "La realidad, quería dejarlos en la calle, porque estoy seguro que tu papa tuvo que ver con la muerte de mi familia."

Alejandra: Sus brazos me rodean abrazándome fuerte contra su pecho. -"Quiero irme ya por favor."− Me despego de sus brazos, limpiándome las mejillas.

Gabriel: "No te enojes conmigo, yo no quiero hacerte daño."

Alejandra: "No estoy enojada, solo necesito resolver esta situación." Camino dejándolo atrás hasta llegar a la casa que entro por la terraza sigo derecho hasta la habitación. Busco una funda y echo la ropa sucia en una y en la otra ropa nueva.

Gabriel: "Voy a recoger todo lo de la nevera y nos vamos."

Alejandra: Veo como me tiene los ojos aguados, sale de la habitación y le acomodo su ropa. Salgo con las fundas y me lo encuentro con la cabeza pegada la puerta principal. -"Estoy lista."−

»Lleva sus manos su rostro sin voltearse por unos instante, luego me mira y camina hasta mi tomando las fundas.

Gabriel: "Vamos, eche todo al carro."

Alejandra: Salgo de la casa, veo como toda la parte de adentro está apagada y cierra con llave la puerta principal. -"Cerraste toda la casa."− Asiente.

»Echa las fundas a la parte trasera del auto y me abre la puerta, entro cerrando la puerta. Le da la vuelta al auto y se sienta en el sillón del conductor. Enciende el motor y arranca sin ponerse el cinturón de seguridad.

***

Gabriel: "Sana y salva en tu casa."

Alejandra: "No es mi casa." Se baja del auto rodeándolo y me abre, salgo inmediatamente. Va a la parte trasera del auto y saca mis fundas con mis pertenencias.

Gabriel: "Es tu casa, siempre lo será."

Alejandra: "Gracias." Me da mis pertenencias, le doy una sonrisa forzada. -"Buenas noches."− Me doy la vuelta y camino lentamente, en dirección a la puerta, sin evitar que mis lágrimas corran por mis mejillas. Siento como unas manos que me agarra por los brazos, mi corazón se acelera y al mismo tiempo una opresión en el pecho.

====Nota====
Sorpresa! 😁😁😁
Aquí les dejo otro capítulo...
🙈🙊🙈🙊
No me maten, porque después no puedo terminar la historia.
😜😜😜
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