[Capítulo 18] ~Fiesta II~

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Agacho la mirada decepcionada.

-¡Mira lo que has hecho! ¡Me has dejado guapísima! -me dice Kleys con una gran sonrisa.

-¡Tontaaa! Me habías asustado. Sólo te arreglé un poco, por naturaleza tú siempre has sido guapa -le digo empujándola por haberme asustado.

Ya faltan unos pocos minutos para que llegue Nick por nosotras.

Suena el timbre, bajo a abrir la puerta. Era Nick quien estaba tocando.

-¡SORPRESA! -me dice Nick.

-¡Wao, Nick! ¡¿Qué te has hecho?! -digo boquiabierta.

-¿Tan mal me veo? -dice.

-¡Nooo, imbécil! Te ves bastante bien -le digo. Kleys quedará boquiabierta -añadí guiñándole un ojo.

Al parecer la fiesta ha hecho que todos cambien para verse mejor. Nick se había quitado los lentes, dejando ver sus hermosos ojos azules. Se había arreglado el cabello y llevaba ropa ajustada. Un nuevo Nick.

-Kleys! Recoge nuestros bolsos y baja. Nick ha llegado! -le grito desde abajo.

-Tranquilo! Estás guapo -le digo para calmar sus nervios.

Kleys baja con nuestras cosas y al ver a Nick se queda como justo le dije a Nick. ¡BOQUIABIERTAAAA!

-¡AAAAA! Mi amor, estás guapísimo y eres sólo mío -le dice y se balancea sobre él y ambos comienzan a comerse literalmente.

-Respeten a la solterona de su amiga! Dejen eso para la noche y en privado. Nos espera una fiesta allá afuera -les digo con cara de asco. Los tomo del brazo y les doy un empujón para salir, ambos ríen y nos dirigimos al auto de Nick. De hecho, es un hermoso auto. Nick nos abre la puerta del auto para que entremos. Todo un caballero.

Minutos después...

Llegamos a la fiesta, salimos del auto y todos se quedan mirándonos. Esta vez estoy segura de que mierda en la cara no tenemos. Mientras caminamos para entrar a la casa unos chicos comienzan a piropiarnos a Kleys y a mí. Nick fulmina a todos con la mirada.

Pasamos por un grupo de chicas las cuales comenzaron a murmurar entre ellas y miraban a Nick. Ahora la que fulminaba a todas era Kleys.

En esta fiesta todos estaban tomando alcohol, fumando cigarros y hasta drogándose.

Ya estamos adentro y Nick nos invita a bailar en grupo, yo me negué, quería analizar el lugar, por ahora.

-Vayan ustedes. Estaré sentada en el área de bebidas, iré por algo que no sea alcohol -les dije con una sonrisa. Ellos asintieron y se fueron.

Aquí me encuentro tomando una piñacolada. El lugar se ve asqueroso, todos bailan y toman hasta más no poder. Esta adolescencia...

Volteo mi vista para seguir inspeccionando. Me siento una inspectora. Miro a mi derecha y veo a las amigas de la rubia oxigenada de Laura. Ha de estar cerca la puta. -bufeo-

Me quedé inconscientemente mirando a las amigas de Laura. Sus amigas se llaman Cleiton y Clarissa, son hermanas. Cuando iba a retirar mi mirada de ellas veo como Laura y Sean se van acercando a Cleiton y Clarissa, quito mi mirada de allí y me dedico a dar un sorbo a mi bebida.

Después de un rato miro disimuladamente hacia Sean, y vi que este ya me estaba mirando.

-Hola, guapa-.

Escucho esas palabras y giro. No conocía a este chico, y nunca antes lo había visto en el instituto. Hay demasiados chicos.

-Hola -le respondo.

Su aliento es asqueroso. Se nota que ha tomado bastante y apenas la fiesta empezó hace media hora.

Odio a Kleys y a Nick por abandonarme, sólo acepté venir por ellos y andan por ahí haciendo no sé que cosas o tal vez aún bailando. A ambos les encanta bailar. Aunque ni me abandonaron, yo solita me negué a ir, pero ellos bien pudieron acompañarme. Bueno, este no es momento para quejarme. Estaba histérica.

El chico desconocido se me comienza a acercar y yo me levanto de mi asiento intentando alejarme de él. Éste me agarra bruscamente el brazo para que no me vaya.

-¡Suéltame, imbécil! Me lastimas -le digo.

-Concédeme esta noche -me dice el asqueroso ese.

Se nota que estaba bien borracho.

Lo empujo para zafarme de su agarre y fallo en el intento. Tiene bastante fuerza el pendejo.

De tantas chicas en esta maldita fiesta, él viene a molestarme a mí.

-¡QUE ME SUELTES! -le grito ya enfadada.

Los que estaban cerca creo que pudieron escuchar lo que dije.

El chico me agarra la cintura y me pega a él mientras yo me niego intentando empujarlo.

-Que la sueltes te ha dicho, imbécil! -una voz conocida pronunció en gran tono estas palabras.

-¿Y tú quién eres para decirme qué hacer? -le dice el chico sin soltarme. Me retuerzo del dolor, es un bruto este tío.

-Ahora verás -dice y le mete un fuerte golpe en la cara.

El tipo me suelta y comienza a pelear con Sean.

-PAREEEN! NO PELEEN. SEAN, DÉJALO -grito desesperada.

Un grupo de chicos se acercan y pensé que era a desapartarlos, pero no, para mi mala suerte eran los amigos del desconocido y se unieron para golpear en grupo a Sean.

Tenía una impotencia muy grande, nadie hacía nada y no escuchaban mis súplicas de que lo dejaran. Ahora esto es por mi culpa.

Mis amigos aparecieron y los fulminé con la mirada. Todos estaban viendo el espectáculo de mierda. Ellos intentaban calmarme.

Sean intentaba defenderse, pero eran demasiados para él. Estaba sangrando ¡JODEER!

Malditos inútiles que no hacen nada por ayudar y sólo se quedan viendo todo como si fuera una película la cual a todos les disfrutaba. La estúpida de Laura ni preocupada está.

Vi al chico desconocido a un lado mientras los otros seguían golpeando a Sean. Nadie hacía nada y yo tenía que hacer algo. Se me ocurrió la peor idea, pero lo haría. Me dirijo al chico y le grito:

-SI QUIERES ALGO DE MÍ, DILE A TUS AMIGOS QUE DEJEN DE GOLPEARLO-.

No sé qué estaba haciendo, pero fue lo único que se me ocurrió. Después de todo Sean está así por defenderme.

-Trato hecho, guapa -me dice.

El maldito psicópata se acerca a sus amigos y les ordena que lo dejen. Parecen perros falderos de ese tipo. Los animales esos lo dejan de golpear y me acerco a Sean.

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OMG! La cosa se ha puesto color de hormiga, ¿qué pasará más adelante? ¡Descúbrelo en el próximo capítulo!

¡Hey! Gracias por el apoyo que he recibido de ustedes, por sus comentarios y votos. Les agradezco de corazón. ❤

Adolescente problemática.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora