Nunca digas de esta agua no beberé. (Actualización lenta)

Mi estúpido despecho

Dress:
Después de las dos últimas clases en las que no pasó nada digno de contar, llegó la hora de salida.
-Muy bien...¡Me voy con Trevor!-dije a todo el grupo que estaba ahí.
Es decir, todos. Incluyendo a Chuck y Melanie que ya habían salido.
-¡No! Yo quiero ir ahí-dijo Chad triste.
-Tarde, es mi novio-dije sacándole la lengua.
-No por mucho, querida-dijo y se empezó a acercar a Trevor mientras él se alejaba.
-¡Oigan! ¿Nadie va en mi carro?-preguntó Ted.
Mi pobre primo tenía un carro viejo (Por no decir chatarra) en el que nadie quería ir. En total eran 4 carros: Uno de Trevor, otro de Rest, de Ted y el último de Santiago.
La verdad era que quería irme en el carro de Santiago para conversar lo de la mañana y lo que paso con Tifanny pero él ni siquiera me miraba.
En el carro de Santiago estaban Chuck y Melanie, él perdió el Piedra, papel o tijera y Louis que también perdió.
En el de Rest estaba Robert, sólo l pues, porque bueno nadie quería ir con los gemelos.
Sólo quedaba o el carro de Ted o un Lamborghinni o un traste sacado de la basura.
-Chad, tu ven conmigo-dijo Ted.
-Ah, ahí voy mi queridisimo Ted-dijo desganado y me susurró un Te odio.
Reg y Ryan se subieron en la parte de atrás y yo en el asiento del copiloto.
-Entonces, ¿Pongo música?-dije y Reg y Ryan me respondieron que sí.
Puse I'm a mess de Ed sheeran porque era hermosa y me puse a cantar.
-¿Se enteraron que volvió Tifanny?-dijo Ryan.
-Ni me lo digas, estuvo en mi clase de música.-dije rodando los ojos-¿Y a ti que te parece su llegada?- le dije a Trevor pues, esos dos tenían historia.
Resulta que el año pasado, Tifanny se le tiró encima a Trevor o eso es lo que dice él y por alguna razón todo el colegio. Rompimos, pero luego vino con un ramo de flores y la muy tarada le perdonó.
¿Por qué hablas en tercera persona?
Porque no me quiero referir a mí como si fuera una tarada.

-No me importa-dijo indiferente y eso me alegraba.
-A mí tampoco-dije y le tomé la mano.
-Ay, que cursis-dijo Ryan-Amor de mis amores, dueña de mi existencia, mi vida, mi alma y mi corazón. ¿Quieres darme un beso?
-Que yo recuerde, aún no me has pedido para estar.
-¡OH TURN DOWN FOR WHAT!- grité y Reg con Trevor se pusieron a bailar conmigo.
-Yo creí que...-empezó Ryan.
-No, no. Yo me declaré, que es otra cosa. Si quieres beso, tienes que pedirme que sea tu novia y si quieres que acepte tienes que hacerlo bien. De otra forma, puedes seguir besando el melón de plástico que tienes en tu cuarto.
-Yo no beso ningún...-Todos lo miramos con cara de "¿En serio?"-Está bien, puede que lo haga pero lo hago en tu nombre.

-Ah, osea que ahora tengo cara de melón.-dijo Reg indignada.

-¡La cagaste!-dijimos Trevor y yo al mismo tiempo.

-No, amor...-empezó Ryan pero, lo interrumpieron.

-¡No soy un amor!-dijo y se cruzó de brazos en una posición muy inmadura, la verdad. Sólo se ponía así junto a Ryan.

-Llegamos, amigos-dijo Trevor al aparcar fuera de la casa.

-Amor-dijo Ryan cuando Reg bajó del carro pero, ella lo miró mal-¿Dulcesito? ¿Miel? ¿Diabetes? Es que eres tan dulce que me produces diabetes.-Le guiñó un ojo.

-¡La estás cagando!-gritamos Trevor y yo de nuevo. Reg bufó y entró a la casa, seguido de Ryan.

-¿Somos los primeros?-pregunté a Trevor.

-No, por lo sorprendente que parezca, Ted llegó primero-dijo señalando la carcocha de mi pobre primo.

-Supongo que manejas como abuelita-dije jugando y abrazándolo.

-Supongo que Ted fue Meteoro en otra vida.

-Apoyo la segunda opción-dije riéndome y Trevor me besó.