El dolor de no Existir
Por Mary G.B
Fred tenía aquellas escrituras marcadas en su pecho, todos los ángeles que habían muerto tenían esa marca en el pecho y empezaban a levantarse.
Yo solo miraba sus ojos cristalinos que me miraban preocupados, esperanzados y contentos. Lo tome del rostro yo era lo que Klein era.
Quería saber quién era.
Quería saber cómo era.
Pero ahora, yo soy lo que es él.
Le sonreí.
Cyril se acercó preocupado por Amy quien estaba cargada por Klein. Miro a Klein serio.
-No puede ser posible.- fue lo que dijo.
Klein movió la cabeza.
-Ahora no, Cyril, tiene que descansar.- me miro.- la llevare a un lugar seguro, estas al mando, volveré enseguida.
No sé cuando desapareció todo pero me encontraba en una pequeña casa de madera.
-Señora Helen.
En la puerta de la sala salió una señora muy baja y vieja algo gordita y caminaba raro.
-Señor, la habitación esta lista.
-Gracias, Señora Helen.
Me llevo a una habitación y me recostó en la cama, no podía moverme mi cuerpo estaba duro. Klein se agacho un poco.
-Esta era la señal que tanto esperaba para poder actuar.- me explico.- Amy, no eres humana no totalmente.
Me acomodo la almohada.
-Tuve que alejarte de personas importantes, enseñarte todo sobre nuestro mundo y alejarte de Roxes.- esto último lo dijo enojado.- sé que falle sobre lo de Roxes.
-No fue tu culpa.
-Soy el Líder.
Me quede mirándole por unos segundos.
-Escucha, te tienes que recuperar mientras reestablecemos la Casa del Muerto y los ángeles se recuperan, no cometeré otro error, desde ahora en adelante tendremos que evitar que Roxes reviva a Verious estoy seguro que le faltan algunas cosas y podemos detenerlo.
-Klein.- tome su mano.- he escuchado una voz mientras brillaba, me sentí en una inmensa paz, creo que hay algo que debemos buscar también.
-Estoy seguro que mientras sigamos a Roxes encontraremos las respuestas, yo he buscado sobre mí.
Vi su cara de tristeza, saber algo que no eres, ahora sabia como se sentía.
-Lo haremos juntos, verdad?- pregunte.
-Claro, tonta.- tomo mi mejilla.- debo de irme, la Señora Helen te ayudara en todo.
Se paró con su típica seriedad.
-Todos entenderán, no eres un mal líder Klein.
-Gracias.
Sonrió y se fue.
Me quede mirando el techo estaba pensativa, no podía creerlo, yo no era humana. ¿Cómo puede ser posible? Toda mi vida lo he sido, no? Roxes y Klein, son diferentes a mí, yo no puedo ser eso.
Ni siquiera sé que soy ahora.
Mire el techo lo único que podía hacer, tal vez por eso conocí a Klein para saber quién soy, para saber quién fue mi madre y porque puedo ayudar a los ángeles. Eso me hacía feliz pero por otra parte.
ESTÁS LEYENDO
El Ángel de las Almas
Fantasy(EDITANDO) El destino puso en su camino a un ser humano para que Klein descubriera lo que él era y podia ser capaz, Amy es la humana que lo llevara a preguntarse varias cosas y a enamorarse de ella. Amy por su parte busca saber como era su madre. E...