Más allá de la amistad [1era Temporada]

Capitulo 20

Narra Martin

Abrí con pesadez los ojos, no había dormido muy bien anoche, me había quedado pensando en lo que estaba pasando con Juan, en cómo estaba cambiando nuestra relación. Me senté en el colchón y miré a Juan, él estaba dándome la espalda así que me levanté y me acerqué lentamente a él para mirarlo, aún estaba dormido, sonreí pasando mi mano delicadamente por su mejilla.

-¿Qué estoy haciendo?-me pregunté deteniéndome-no debería hacer eso-suspiré, sentí cómo se movía quedando boca arriba, me quedé quieto creyendo que estaba despertando.

-M-Martín...-me estaba nombrando dormido-h-hazlo de nuevo...-pronunció débilmente.

-¿Hacer qué?-pregunté con la esperanza de que no despertara y se enfadara por haberme acercado tanto a él.

-B-bésame...-pronunció débilmente, tragué saliva nervioso; ¿de verdad me estaba pidiendo que lo bese? digo, ayer me había dicho que no quería que lo bese. Me acerqué a su rostro terriblemente nervioso por la situación. ¿Y si está despierto y esto es una broma? ¿Acaso estoy cayendo como idiota en una jugarreta?-p-por favor... s-solo hazlo...-su voz tan débil, era casi un susurro. Me acerqué más a su rostro, mirándolo esperando que abriera los ojos y dijera que solo era una broma, pero no lo hacía, no habría sus ojos ni me decía que era una broma. Finalmente junté nuestros labios en un pequeño y suave beso que duró unos pocos segundos ya que Juan me había apartado de él.

-¡¿Q-qué mierda estás haciendo?!-preguntó con el ceño fruncido y un sonrojo en sus mejillas; ¿qué le diría? "me pediste que te bese mientras dormías y yo solo obedecí" que niño tan obediente soy, ¡bravo!

-Lo siento...-dije sentándome en el colchón.

-¡¿Cómo se te ocurre besarme?!-¿no era eso lo que quería? Dormido me había rogado, prácticamente, que lo bese y ahora me reclama. No contesté nada, solo solté un suspiro, me levanté y salí de mi cuarto. Otra vez tratar de que nos llevemos bien.

-Mierda... hasta parecemos pareja con tanta pelea y reconciliación-¿eh? ¿Pareja? ¡¿En qué mierda estoy pensando?! Me sorprendo yo mismo de las mierdas que se me pasan por la cabeza. Suspiré pesadamente, me dirigí al baño, me di una ducha rápida y luego volví a mi cuarto, Juan se encontraba sentado en mi cama, en cuanto cerré la puerta tras mi espalda él se dio vuelta y me miró. Un silencio incómodo inundó la habitación, parecía que ninguno de los dos sabía que decir o que hacer.

-Em... ¿quieres ir a desayunar? Seguramente mi madre dejo algo preparado-dije tratando de cortar un poco la tensión.

-Está bien, espérame abajo, me alisto y voy-se levantó de mi cama haciéndome señas con una de sus manos para que saliera del cuarto, yo solo asentí, salí del cuarto y me dirigí a la cocina, sobre la mesa, sorprendentemente, no había nada, mi madre no había dejado nada para que Juan y yo desayunáramos.

-¿Y ahora como me las apaño?-me pregunté mirando la cocina.

-Creo que hoy solo será café-me sobresalté al escuchar la voz de Juan a mis espaldas, me giré rápidamente para mirarlo-¿te ayudo?-fue lo único que dijo dirigiéndome una pequeña sonrisa, yo solo asentí, rápidamente comenzamos a preparar algo de café y algunas tostadas para acompañarlo. Pronto terminamos, preparamos la mesa, ambos nos sentamos y comenzamos a desayunar.

-Hey, Juan-dije sin mirarlo; tengo que decirle acerca del beso.

-¿Qué?-tragué saliva nervioso. ¿Cómo se lo digo? No es algo fácil de decir.

-Veras... lo del beso...-lo miré al fin-estabas hablando dormido, no tengo idea de que estabas soñando pero me pedias que te bese, lo hice solo porque...-no sabía cómo continuar.