Capitulo 32

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Narra Paula:

Me resulta muy raro volver a tener a mi madre en frente de mi ¿que se supone que tengo que hacer? ¿Perdonarla? ¿Darla una oportunidad? ¿Para qué? Para que luego tengamos que aguantar al novio..

Mafer: ¿una cena? ¿Para qué mamá?

Mama: necesito estar con vosotras, sois mis hijas.

Yo: según tu ¿para qué quieres a unas niñas caprichosas y mal criadas?

Mama: siento mucho lo que os dije, no lo decía en serio, no estaba bien ese día.

Mafer: mama nosotras hemos pasado unos años horribles y separarnos de ti nos ha ayudado a comprender que tu nunca estuviste verdaderamente con nosotras.

Bajo la cara para no ver la reacción de dolor de mi madre, porque Mafer tiene toda la razón del mundo, el que verdaderamente estuvo siempre fué mi padre. Pablo al verme tan mal me da la mano y me acerca mas a el.

Mama: lo se, y me duele muchísimo que eso sea así, por favor, dadme una oportunidad para volver a empezar yo os quiero.. ¿Vosotras a mi también no?

Levanto la vista y la veo con las lagrimas en la cara miro a lo lejos y está el hombre con el que vino con cara de tristeza, ¿porque no les doy una oportunidad?

Suelto la mano de Pablo y me voy directa hacia mi madre dándola un abrazo, al principio se queda en shock pero al instante me abraza y llora aun mas.

Mafer: una ultima oportunidad mama.

Mama: gra.. Gracias.

Yo: pero mamá, la confianza y el perdón se ganan no sé regalan.

Mama: lo sé, chicas en serio, voy a intentar con todas mis fuerzas ser una buena madre, os lo prometo.

Yo: venga ya, por favor, no llores mas.

La limpio las lagrimas de la cara y vuelvo a mirar a lo lejos y veo al hombre que antes estaba triste ahora tiene una gran sonrisa.

Yo: ¿y el? ¿No nos lo vas a presentar?

Mi madre gira la cara.

Mama: ¿seguro que queréis conocerlo? -ambas asentimos- Víctor, acércate. -El hombre mira con duda a mi madre, pero después de dudarlo un poco se acerca.- El es Victor, ellas son paula y Mafer, mis hijas, y ellos son, Pablo y Daniel, sus novios.

Victor: en.. Encantado.

Se le nota que está nervioso, lo que me hace tener seguridad en el, me acerco para darle la mano y me corresponde con más nerviosismo, repite la misma acción con Pablo, Mafer y Dani.

Pablo: encantado.

Mafer: espero que seas un buen hombre.

Dani: ¡Mafer!

Victor: tranquilo, no pasa nada, es normal, y no sé si soy un buen hombre, lo que si sé es que quiero a tu madre, que sin ella yo no podría haber superado lo de..

Ambos tienen los ojos brillantes, eso es amor, o eso creo, cuando iba a decir lo de su madre agacha la cabeza en signo de dolor.

Yo: tranquilo, no pasa nada, eso nunca se supera, pero si lo asumes.

Victor: gracias.

Yo: de nada, y me gustaría seguir hablando con vosotros, pero no aquí en medio de la calle con el frío que hace.

Mama: podríamos ir a cenar.

Yo: si, pero no hoy, mañana tenemos clase y yo por la tarde trabajo.

Volver a empezar (Pablo Alborán)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora