Volver a empezar (Pablo Alborán)

Capitulo 45

Narra paula:

No puedo sacarme de la cabeza las palabras de mi prima, ¿la pegaba? ¿¡Por qué coño no me lo dijo!?

Pablo: eres un valiente hijo de puta, con que pegando a las mujeres ¿no? ¿Así te crees mas hombre?

Alex: tú no te metas en mi vida, no conoces a Tamara, y mucho menos me conoces a mi, voy a hacer que vuelva conmigo, haré lo que sea, pero volverá conmigo.

Pablo: por encima de mi, escúchame muy bien, no te vas a acercar a ella, es cierto, no la conozco mucho, pero es la prima de mi novia, por lo tanto pasa a ser como mi prima, y a mi familia nadie la hace daño, no voy a dejar que vuelva con un idiota maltratador.

Alex: ya lo veremos lo que pasa.. Créeme que volverá a mis brazos.

Veo las intenciones de Pablo, quiere pegarle y no se lo reprocho pero no es un buen momento, cualquiera le reconocería, y si me he detenido yo de no darle una buena paliza es por que los niños nos están mirando.

Yo: ya Pablo por favor, no le hagas caso, mi prima no es tan tonta como para volver con este idiota créeme, la conozco demasiado.

Alex: ya veremos Paulita, ya veremos..

Yo: ¡vete ya!

Se fue echándonos una mirada llena de odio junto con una sonrisa de triunfo.. Joder, ¿en qué momento cambiaste tanto?

Pablo: bueno ya está, ¿donde se habrán ido Tamara y Lolo?

Yo: conociendo a mi prima seguro que se fue a correr, según ella con eso se desahoga.

Sofia: ¿que ha pasado tío?

Pablo: nada mi niña... Solo... Cuando te enamores de alguien, preséntamelo antes ¿vale?

Ambas niñas ríen y yo le toco la espalda para que se calme, miro a mi hermana que aún está helada por lo que ha pasado.

Mafer: la pegaba.. ¿Por qué nunca nos dijo nada?

Yo: quizás porque vivíamos lejos, ya Mafer.. Ahora sólo podemos apoyarla y no dejarla sola.

Pablo: ¿y qué hacemos? ¿A dónde vamos?

Yo: ¡¡a comer!! Seguro que tenéis hambre.

Sofia: pizza por favor.

Elisa: si por favor.

Pablo: está bien, vamos, luego llamo a Lolo para ver como está vuestra prima.

Yo: gracias.

Caminamos jugando todos al veo veo, Elisa es muy lista, sin embargo Pablo es muy despistado y no se fija bien en las cosas que tiene al rededor, lo que causa la risa de todos.

Entramos a la pizzería y les digo a todos que se sienten en una mesa lejana, ya es suficiente con que hayamos venido aquí exponiendo que reconozcan a Pablo y hablen, al menos que sea lejana la mesa.

Pido dos pizzas grandes y las llevan a la mesa, me siento a lado de Pablo y el me acaricia la mano que tengo en la pierna, estoy nerviosa por estar aquí delante de tanta gente, no por mi, si no por el.

Pablo: ya amor por favor, tranquila, nadie me va a reconocer.

Muerdo un cacho de pizza, hablamos de como les va en el colegio a las niñas y su tío las mira con admiración, las quiere, y mucho.

Bruno aun sigue durmiendo en la sillita, es una total marmota, igual a su tío.

Sofia: ¡tío! ¿Podemos ir a ese parque de bolas por favor?