Capitulo 1

60.1K 2.6K 96
                                    

Tres meses de estar casada con un hombre que nunca estaba en casa, Leandros había dejado claro que no le interesaba en ningún sentido. Ella vivía en la mansión de su esposo mientras él residía en nueva york en su departamento de soltero.

Madison había dejado claro que quería trabajar al día siguiente, y su esposo había echado chispas por los ojos alegando que su esposa no necesitaba trabajar, todavía podía recordar la última vez que lo vio antes de irse y dejarla sola.

~~~~~~~••••••~~~~~~~~~

Madison bajo de su cuarto con un vestido conservador azul que le llegaba hasta las rodillas, un moño apretado, estaba decidida a hablar con su esposo sobre el querer trabajar.

Bajo las escaleras, y fue hasta el despacho de su esposo, tocó tres veces hasta que tuvo una respuesta seca.

­- adelante ­-se escuchó la voz gruesa­.

Abrio la puerta y entró con un poco de nerviosismo, cerro las puertas con cuidado y volteo a ver a su guapo esposo.

­ - ¿podemos hablar? ­-dijo mirándolo.

El alzó una cena y le indicó que tomara asiento en la silla frente de él, llegó y se sentó recatadamente, respiro profundamente antes de decir lo que tenía que decir pero su boca no estaba en sintonía con su cerebro.

­- voy a trabajar ­-soltó de repente.
­
Leandros la miro serio sin pizca de humor, maldiciendose mentalmente, no se retractó, lo miró con expresión neutra esperando su respuesta. Aprendió a ocultar sus emociones por su padre él consideraba que eran debilidad y si ella lo mostraba era castigada por ello.

­- mi esposa no tiene necesidad de trabajar -­fue la respuesta de él.

- pero yo si quiero ­-contratado ella sin pensarlo­.

­- pero yo digo que no y esa es mi decisión ­-la miro enojado.

­- ¿porque? ­‐preguntó ella­.

­- estás aquí como pago por las deudas de tu familia, no necesitó que mi esposa.... -dijo agriamente la última palabra-­ sea vista trabajando en no se que...

Ella se enojo, no iba a permitir que la encerrara como un criminal en aquella casa, lo miro con enojo y él alzó una ceja en símbolo de interrogación.

­- voy a trabajar con o sin tu permiso ­-declaró ella levantándose­.

­- no me retes Madison ­-se levantó enojado y la miró severamente como lo hacía su padre, ella dio un paso a atrás por instinto­.

­- pero yo quiero... ­-lo miro con suplica cosa que no sirvió­.

­- no y esa es mi respuesta, si lo haces atente a las consecuencias con tu familia ­-graznó el­- si quieres entretenerte puedes remodelar la casa, a fin de cuentas vivirás aquí.

Fue un golpe bajo, si lo contradecía él sería capaz de hacerle algo a la empresa de su padre y ella tendría a su papá encima diciéndole lo igneta que era y la golpearía, no quería, Rafaele era un hambre de carácter y no le importaría golpearla aún estando casada.

Bajo la mirada y salió del estudio de su esposo con lágrimas en los ojos, le marcó a su tío que no trabajaría, él le preguntó el porqué sólo le había dicho que quería disfrutar de su recién esposo y matrimonio, una vil mentira.

~~~~~~~••••••••~~~~~~~~

Tomó un sorbo de su taza de café griego, dejó que la brisa cálida del mar egeo bañara su rostro pálido, Diantha era muy amable con ella y la había ayudado en remodelar la casa, eso ocupó su tiempo para no pensar en su miserable vida, si salía tenía que estar rodeada de guardaespaldas por su protección no le gustaba pero Leandros lo había dejado claro y era una orden que no podía ser rota o habría cabezas rodando literalmente.

Matrimonio por conveniencia (Sin Editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora