Mis últimas palabras son siempre de odio y rencor.
No hacía una persona, no hacía mi mismo yo.
Son palabras que ladro a la humanidad,
deseando ser escuchada y ver un cambio en las críticas que son nombradas.
Pero nadie escucha,
vivimos en una burbuja.
Mis últimas palabras marcan lo que siento y veo.
Vidas marchitas por el odio que promueve este maldito mundo.
Vidas perdidas entre complejos y modelos de perfección.
Vidas ahogadas por el poder.
Y vidas olvidadas en su propio fin.
Mis últimas palabras lloran y gritan lo que nunca antes había sido capaz de expresar.
Me veía atada bajo miles de palabras que ahora me impulsan.
Palabras de odio, rencor, envidia, repugnancia y fatalidad.
Palabras que ya no me ahogan.
Palabras que me han hecho ver el mundo diferente.
Y que ahora puedo ver tal y como es,
frío, marchito, lleno de odio y de humanos que solo saben pedir poder.
ESTÁS LEYENDO
Rota
Poesia~La sonrisa más bonita no es siempre la más verdadera pero siempre es la más ensayada~