Mi Pequeña Monstruo [Finalizado]

Cap. 2: sufrir te fortalece.

El sonido de una puerta resonó en la sencilla oficina, tocó un botón insertado bajo su escritorio el cual le permitió al visitante entrar.

– Señor Zed – dijo un soldado acercándose al líder mientras este observaba aburrido una pantalla que proyectaba una cámara oculta instalada en cierta habitación donde se observaba una nueva residente durmiendo.

– Dime, soldado – dijo indiferente sin dirigirle la mirada. Ya llevaba alrededor de una hora esperando resultados y nada sucedía, su paciencia se agotaba.

– Perdone mi atrevimiento, pero de parte de mis compañeros quería consultarle sobre el trato un poco exagerado de esa niña y que papel ocupa en su plan. – un silencio incómodo (para el soldado) se formó, luego de unos segundos, Zed comenzó a reír frenéticamente.

Luego de unos segundos miró al soldado; un delgaducho hombre y enano comparado al tamaño promedio, típicos ojos azules, vestido con el uniforme de su equipo, sus brazos eran delgados, sin ánimo, posiblemente era un completo novato en el tema.

– Verás soldado, supongo que sabes el origen de este gran equipo que dentro de muy poco conquistará Hoenn, o incluso el mundo, ¿cierto? – El subordinado comenzó a sudar y ponerse nervioso, mal día para elegir a este individuo en la primera semana que lleva, su jefe continuó – No te preocupes, hoy tengo un buen ánimo – exclamó, luego sonrió y se levantó de su asiento – lo que sucede es que... ¿qué tal si mejor cierras tus ojos para imaginar? – dirigió su mirada al soldado.

– Eh...de acuerdo – el soldado cerró los ojos un poco extrañado pero debía obedecer, de todos modos, este individuo era el encargado de liderar esta organización.

La respiración del soldado se volvió entrecortada al recibir un golpe, o mejor dicho puño en su estómago, el nuevo cayó al suelo y tosió frenéticamente. Miró extraño a su jefe y pudo notar su expresión facial que mostraba frialdad y detenimiento.

– Ustedes deberían dejar de husmear únicamente porque no les he mencionado todos los detalles, ¡¿qué me importa el método?! ¡Debemos actuar rápido antes de que noten la ausencia de la chiquilla! ¡¿Vamos en buen curso y voy a cuestionarme ahora?! ¡¿Crees que es sencillo ocupar el otro papel de lastimar a las personas sabiendo que tienen ser-? – silencio absoluto.

Zed observó al soldado unos segundos y luego dio media vuelta mirando el ventanal de su oficina.

– Largo de aquí, si piensas en no perder tu trabajo, no quiero volver a escucharte ni verte en mi oficina.

El soldado dudó qué hacer, luego de reflexionar sobre lo sucedido se levantó y salió rápidamente cerrando con el menor ruido posible la puerta.

"Otra vez estos recuerdos invaden mi mente, debo bloquearlos" pensó él. Abrió un cajón de su escritorio y luego de rebuscar sacó un marco de foto con un práctico diseño, acarició el vidrio y lo volvió a guardar en el cajón justo al momento que recibió una llamada y se retiró.

Un leve resplandor se hizo presente fuera del ventanal, luego de emitir un leve brillo el cajón se abrió mostrando la imagen enmarcada de un niño de unos 8 años sonriendo junto a sus pókemon en un radiante campo acompañado de un cielo brillante y despejado. El resplandor emitió una leve risa, volvió a emitir un brillo que cerró el cajón y desapareció.

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Pv. Ruby

La frustración y el estrés me causaban un grave dolor de espalda, pero eso no me impedía continuar con mis intenciones. Debía encontrar la causa de esto.