En Cada Cumpleaños

Cap. 5~Recomponiendo los ánimos

Ahora que sabéis todo lo sucedido con Rob seguiré hablando de lo que realmente importa ahora.
Luis me había escrito un par de veces cuando estaba con Rob. Yo no le prestaba mucha atención la verdad, porque sinceramente no me interesaba aunque sí que hablaba con él. Se enteró de que estaba con un chico, no sé si se lo dije yo, y él me dijo que estaba con una chica y creo que quería ponerme celosa porque me decía sin venir a cuento que se morreaba con ella y detalles que no le pedía. Además quería una foto y el nombre de Rob, y yo no le di ni una cosa ni la otra. Le volví a ver ese verano en unos cuantos cumpleaños, incluso me invitó al suyo y una vez me escribió para preguntarme que tal.
El mismo día que le conocí hacía un año y en el cumpleaños de la misma persona ahora más cercana a mi, le volví a ver. Desde su cumpleaños no le había visto y ya entonces me agradaba su presencia. Antes del cumpleaños de Claudia le pregunté varias veces si él iba a ir y esta insinuó varias veces que me gustaba, yo lo negué pero después de su cumpleaños me di cuenta de que sí, Luis me gustaba. Quedamos Claudia, él y yo a los dos días. El mismo día que empezaban las vacaciones de Navidad. Nosotras ya estábamos en segundo y él en primero, aunque mis sospechas me decían que si seguía por ese camino, al año siguiente seguiría en primero y nosotras en tercero. El día que quedé con ellos en el pueblo de ambos me lo pasé genial. Él me quitaba una pulsera y yo a él un reloj y nos lo devolviamos. Si uno cogía lo del otro, el otro tenía derecho a coger la pertenencia del mismo. Me lo pasé realmente bien y confirmé lo que quería negar, Luis me gustaba. Estaba perdidamente colada por él y sin embargo, era insoportable. Supongo que siempre me atrae lo opuesto, o eso dicen. A mi la química me parece muy rara. Ese día me tuve que ir pronto porque mi madre tenia que ir a casa a hacer no sé qué comida para no sé cuándo y entonces cuando estábamos haciendo unas compras antes de ir a casa me llegó un mensaje por el móvil de Claudia y podría jurar que era Luis con el móvil de ella. ¡Y adivinar lo que me mandaron! Me decía en el mensaje que había estado muy pegada a él y me preguntaba si me gustaba. Yo dije que me caía muy bien y entonces ahí quedó la cosa. No iba a caer en el engaño porque sabía perfectamente que era él a pesar de que decía ser Claudia. Ahora se me ocurren contestaciones perfectas pero en el momento de hablar cambié de tema. ¿A vosotros no os pasa que se os ocurre lo mejor cuando ya la situación no tiene nada que ver? Pues yo estaba ya cansada de ello.
Bueno el tema quedó ahí y quedamos los tres de nuevo el seis de febrero porque Claudia pasaba de estar en su casa el día del cumpleaños de su tia segunda Antonieta. Decía que era horrible, por lo que los dos accedimos.